¿Quién eres?

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«-¿Y todavía preguntas? ya deberías saberlo

Hizo una mueca de su total confusión y ceño fruncido-Es que en verdad no se-pudo decir luego de jugar un rato con su cabello

En frente suyo había un espejo y en él la silueta de una mujer que no lograba percibirse. Britney jugó con su cabello e hizo movimientos para saber si era ella misma. Estaba atónita al darse cuenta que no, no podía entender nada y su confusión y miedo incrementaban.

-¿En serio quieres saber?-dijo con una voz siniestra y burlona

Ahmn... sí-el miedo la estaba comiendo viva, pero no quería reflejarlo. Su semblante temblaba pero su voz era pacífica.

Mi niña, soy... -hizo una pausa antes de continuar con lo que diría

-¡Oh vamos! Suelta lo ya!-interrumpió Britney ante su desesperación

-No seas impaciente-dijo exasperado-soy tan solo el reflejo de tu alma, soy el fuego que aviva tu ser, tan solo provengo de tu mente

-¿Quieres decir que tu?... -no podía entenderlo. ¿Cómo podría ser que su interior fuese tan siniestro? era algo abominable de creer. Hizo una pausa antes de continuar-¿Que... que tu eres yo?-dijo ella con mirada de insatisfacción y burla.

-No es tan difícil de entender, pero como siempre tan incrédula-dijo mientras se soltaba unas leves carcajadas

-¡¿Qué?!-aún no podía entender esas duras palabras sobre todo por que provenían de ella misma-¿Me acabas de decir incrédula?

-Sí, así es. No me hagas repetirlo dos veces querida. En verdad me das tanta risa. Mírate, tu simple cuerpo es un asco y ni hablar de tu carácter de ¡¿#$%?!

-Carajo ¡Cállate!-Las risas de su interior y la silueta que miraba le estaban colmando la paciencia. Aborrecía esas voces. De pronto aventó un puñetazo a su reflejo que de pronto se había vuelto borroso por los vidrios rotos.

-Que graciosa eres en verdad-dijo burlonamente-¿en verdad creíste que es tan fácil deshacerte de mí?-soltó carcajadas interminables.

¡Que te calles!-volvió a soltar un puñetazo mientras que las lágrimas comenzaban a brotar. Quería hacer oídos sordos a esa voz desagradable pero era inútil su intento.

De pronto sintió que algo escurría en su mano, era sangre que brotaba escandalosamente. A pesar del dolor tan fuerte que podría sentir, ella lo ignoraba por completo. Comenzó a sollozar y sentirse vacía, estaba empezando a creer lo que estaba escuchando.

-¿Ves? ¿qué te dije? ¿quién podría quererte así?-amablemente y con tono de lástima dijo

Ella volvió a mirarse y quería no creer eso, no quería seguir escuchando esas palabras tan hirientes. Hasta que escuchó entonces otra voz.

-¡No la escuches! ¡Eso no es verdad! Mírate bien, eres hermosa, mira esas caderas, mira esos ojos tan tiernos y coquetos, ¡mira esa nariz afilada que otras envidian! mira esa figura es de una chica saludable que se alimenta bien.

Tú... -dijo la voz desagradable-no la embaluques con tonterías.

Comenzó entonces una guerra de pensamientos negativos y positivos que Britney no sabía que creer de sí misma. Estaba confusa, necesitaba algo o alguien que la ayudara a dejar de sentirse así y calmar esas voces que la hacían perder la calma.

Solo tu y yo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora