Fariseos

1.- Un mundo nuevo.

A todos nos desagrada el tener que hacer nuevos amigos y aún más cuando llegas a una nueva escuela. Pero antes que nada me presentó, mi nombre es Mesías y te estaré contando la historia de unos jóvenes, que ellos pertenecen al coro del Colegio Nueva Esperanza; y antes de que te preguntes ¿Un coro en un colegio? Pues este no es como cualquier otro colegio, es uno religioso y lujoso, donde los chicos más populares y ejemplares están en un coro.

Esta escuela se distingue por su uniforme de camisa manga larga color azul celeste, con su corbata azul marino, en caso de las mujeres falda color negro, unos calcetines negros con 3 franjas horizontales blancas en la parte superior de las calcetas, ya en los hombres un pantalón de vestir color negro y en ambos utilizan tenis de color blanco. Si su uniforme no es muy atractivo pero tiene a los mejores maestros capacitados para enseñar.

Hoy es el primer día de nuestros jóvenes, y quien va llegando es Rubén Montesinos bajando en la camioneta lujosa que lo fue a dejar su chofer personal. Rubén es de una familia adinerada, es muy atractivo, tiene muchas chicas detrás de él, pero no está enfocado en estar en una relación, es el vocalista principal del coro y que más se puede esperar de Rubén.

-Último año de preparatoria- susurro.

-¿Qué paso mi "güerito" ya estás listo?- dijo Javier mientras lo abrazaba con su brazo izquierdo.

-No- sonríe - me aterra el saber que es último año y más porque después de la prepa ya no estaré en el país.

-Tu tranquilo, yo te aseguro que este año será inolvidable.

Se preguntaran ¿Quién es Javier? Pues Javier Solís, es el mejor amigo de Rubén, él es el bajista del coro. Tal vez él no es el no es de una familia millonaria, pero si es sustentable económicamente. Javier ha estado enamorado de su compañera Sarahí, le ha declarado muchas veces pero Sarahí lo rechaza una y otra vez.

-Pero dime, ¿Cómo te fue con Sarahí en estas vacaciones?- mientras le bajaba el brazo a Javier

-Pues casi no nos hablamos. Pero no hablemos de cosas triste, mejor pensemos en que ahora si nos la pasaremos genial.

Los dos amigos se dirigían a sus casilleros, pero en otro pasillo de la escuela, se encontraban los futuros esposos, Leonardo Carrasco y Vanessa Acosta, ellos han sido novios desde la secundaria, comúnmente todo el tiempo están juntos. Para toda la escuela ellos son la pareja perfecta, que incluso algunos le tienen envidia.

-Amor, sabes me he puesto a pensar en que en este año pudiera ser la vocalista en alguna canción, solo en una.

Leonardo respira y le sonríe.

-Claro amor, le diré a Paulino que te busque una canción que se acople con tu voz.

-Gracias amor, te amo- mientras lo abraza y le da un beso en el cachete.

-Lo siento tortolitos por interrumpir- interrumpe George - pero si me podrías prestar a Leo solo un momento.

-Claro. Nos vemos en el salón amor- se despide con un beso y se va.

Aquí les presento al atlético de George Ugarte, el rompe corazones de la escuela, que tiene una relación con Talía, pero constantemente se pelean y para consejos siempre le pide ayuda Leonardo. Él es el baterista del coro.

-No me digas, problemas con Talía.

-Si- mira a una chica pasar- pero no sé porque se enoja conmigo.

-Es un misterio- sonríe- pero andando tenemos que ir a clase.

En lo que ellos se dirigían al salón, George observa a una chica entrando a la dirección de la escuela.

Creo que entro una chica que nunca he visto a la dirección.

-Es normal, cuando los de nuevo ingreso se pierden se van a la dirección.

Mientras ellos continuaban al salón, no sabían es que la chica que entro a la dirección se llama Esther, es nueva en el colegio y se acaba de mudar a la ciudad. Y ya en la dirección mientras platicaba con la directora Jiménez.

-Comúnmente no recibimos alumnos para último año, pero como tu papá era nuestro ex alumno ejemplar, le dimos la oportunidad de tener a su hija con nosotros - dijo la directora.

-Muchas gracias - contestó seriamente.

-Te entrego tu número de casillero y tu código - le entrega una hojita con su casillero - aquí en el lobby esta Talía Maya, que te acompañara donde se encuentra tu casillero y tu salón de clases.

-Gracias por todo, me retiro.

Esther sale de la dirección y se encuentra a Talía.

-Hola, mi nombre es Talía- observa que Esther tiene un papel en su mano - creo que ya te dieron tu casillero.

-Ah sí, es el 520- contestó.

-Casualmente es aquí a la vuelta.

-Sabes, mejor quiero ir al salón- dijo Esther algo molesta.

-De acuerdo, acompáñame.

Talía y Esther se dirigen al salón.

-Aquí es el salón, el único lugar vacío es el que está... allá atrás- lo dice algo tímida.

Esther se va a sentar en el único lugar vacío que se encontraba, mientras todos se le quedan observando, es como fuera un bicho raro, pero Esther no es muy sociable, no le gusta hacer amigos porque en cuanto pasa un año se cambia de ciudad, ya que su papá tiene un trabajo donde no tiene un lugar fijo, lo cambian a cada rato y gracias a eso, hizo que Esther no le guste socializar, pero hay algo que ella no sabe es que este año no será como los demás, y todo esto cambiara desde que puso un pie a esta escuela. Porque aquí se esconden muchos secretos y yo, Mesías les estaré contando todo. Porque que ningún secreto está a salvo. ¿O no Esther?