This Town - {njh}

Diez

"Since we're alone
You can show me your heart
If you put it all in my hand
No, I swear
No, I won't break it apart"

"Since we're alone
Show me all that you are
And if you get lost in the light
It's okay, I can see in the dark"

Mí teléfono sonó, haciéndome salir de aquella magnífica burbuja de inspiración. Dejé escapar un suspiro, y tomé el aparato entre mis manos, sin embargo, al ver el contacto de Bella sobre la pantalla, mí rostro se iluminó por completo. Sin dudar ni un segundo, contesté, para luego llevarme el teléfono al oído.

- ¿James?

- Dime.

- Quiero mostraste algo.

- ¿Algo? - le pregunté mientras mí ceño se fruncía.

- Una sorpresa, bobo.

- Oh.

- ¿Qué ocurre? - podía percibirse cierta preocupación en su tono de voz.

- Nada, me has tomado por sorpresa - una pequeña risa se escapó de mis labios, contagiandosela.

- Eres un idiota.

- No puedo negarlo - susurré, haciéndola reír nuevamente.

- Ven a casa en media hora, ¿De acuerdo?

- Está bien, Bella. Nos vemos luego.

- Adiós, James.

Y finalmente colgó la llamada.

Estas últimas semanas, Bella y yo nos habíamos acercado más de lo normal, y era entendible, porque nos habíamos estado viendo casi todos los días. Ambos disfrutábamos los momentos con el otro, entonces, ¿Por qué no estar juntos?
Pero a pesar de ello, su llamado me había dejado un poco confuso... ¿Que se traía entre manos la misteriosa chica pelirroja?

*

- ¿Vas a decirme de una vez que es lo que estás tramando?

- Una amplia sonrisa apareció entre los labios de Bella antes de que moviera su cabeza con rapidez hacía ambos lados - ¡Es un se-cre-to!

- Pues no me gustan los secretos - comenté, volviendo la vista hacia delante.

Hacía un par de minutos que habíamos salido de la casa de la joven, pero aún no había conseguido sacarle ningún tipo de información. Dejé escapar un suspiro luego de pensar que la cosa no iba a cambiar mucho, Bella no era la típica mujer que daba fácilmente el brazo a torcer. Quizás, lo mejor sería cambiar de tema.

- Aún no te han contestado lo de la escuela de arte, ¿Verdad? - ella negó, dejando escapar luego un suspiro.

- Recibí un email diciendo que la próxima semana comunicarían los resultados... - cruzó sus brazos sobre su pecho sin detener sus pasos - jamás pensé que tardarían más de un mes en evaluar las producciones de los participantes.

- Bueno, a mí me llama la atención que hayan participado más de cincuenta personas, teniendo en cuenta que es un pueblo bastante pequeño.

- Sí, en eso tienes razón. Los cursos dentro de la academia de arte son muy caros - dijo, encogiéndose de hombros - es normal que los pocos adolescentes que queden por estos lares decidan aprovechar este tipo de oportunidades.

- Lo entiendo... - susurré, desviando mí vista hacia la joven - igual no debes preocuparte por eso, Bella.

- ¿Por qué? - ella también clavó su mirada en mí, la cual tenía cierta chispa de curiosidad.