Completos desconocidos ,pero completos amantes. (Finalizada)

La entrada al santuario (cap 2)

Seika: b-bueno, yo estoy consciente de que puedo ser castigada, pero no me rendiré hasta ver a mi hermano, entiendes, y si tú vienes a castigarme por eso, te juro que no te tengo miedo.

Aioros: mmmm, ya veo, bueno se ve que tienes un objetivo muy claro, pero no deberías tomarte a la ligera el poder de un caballero Dorado, sabes nunca vi a alguien tan decidido por un objetivo y encima de eso, jurar no tener miedo ante un caballero dorado, me impresionas niña.

Seika: bueno, ese objetivo nunca lo dejaré, así que no hay nada que me detenga.
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Aioros: te mereces un premio por tu valor, te llevaré a ver a tu hermano.

Seika: Que!!! Enserio!!! No puede ser, pero no puedo entrar al santuario, tu mismo lo acabas de decir.

Aioros: es cierto, pero quién dijo que te iban a ver.

Seika: eh? No estoy entendiendo.

Aioros: no te preocupes solo relájate.

Cargo a Seika y la lanzó con fuerza hacía arriba, porque la única forma de que una armadura pueda usarse es para actuar en una situación de peligro pero los caballeros dorados no necesariamente necesitaban hacer esto pero Aioros vio la oportunidad de lucirse frente a una chica que no sabía mucho de los caballeros, por eso la lanzó y jalo la parte de la caja de Pandora y la armadura salió.

Seika: pe-pero que estás haciendoooo ahhh!!

Aioros: (Salta y la atrapa) te tengo.

Seika: estás loco!!! Bajame ahora mismo!!

Aioros: ¿Quieres ver a tu hermano?

Seika: si? Se supone que me ibas a llevar a verlo.

Aioros: entonces no te sueltes de mi, o si no, no vamos a poder ir a tu hermano. ( Salta y usa las alas de la armadura)

Seika: e-esta bien, le temo un poco a las alturas, otra de las razones por las que tampoco podía escalar el muro del santuario.

Aioros: no te preocupes nunca te soltaré, solo sostente fuerte de mi, y si tienes miedo, toma mi mano.
Dijo Aioros con una sonrisa dulce y un leve sonrojo.

Seika: (sonrojada) e-eh, y-yo. (Voltea al lado opuesto para no verlo a los ojos)

Aioros: muy bien, ya casi llegamos, necesito que me prometas algo.

Seika: ¿Qué promesa?

Aioros: que no te separes de mí, por ninguna circunstancia y si llega a ocurrir algo, sigue mis indicaciones.

Seika: si, lo prometo.

Aioros: muy bien, llegamos, dame la mano.

Seika: (sonrojo) ehhh, si. (Le da la mano)

Aioros: muy bien, desde ahora vamos a susurrar okey.

Seika: si.

Aioros: muy bien ahora...... Escóndete.

La empujó hacia un arbusto

Seika: que..... Auch. Aioros ¿Que pasa?

Aioros: viene mi hermano, guarda silencio okey.

Seika afirma con la cabeza.

Aioria: hola Aioros, te estaba buscando, el patriarca Shion quiere verte a ti y a Saga.

Aioros: QUE!!!! Ahora?

Aioria: si, ahora!

Aioros: eh, y- yo, *suspira* ya no tiene caso, Seika sal de ahí.

Aioria: metiste a una niña al santuario Aioros, sabes que puede pasar!!!!

Aioros: lo se, pero ella quiere ver a su hermano, pero creo que ahora no podrá ser posible.

Aioria: ¿Su hermano? ¿Quien es?

Aioros: es uno de los recientes aspirantes a Caballero de bronce, Seiya de Pegaso.

Aioria: Seiya, lo conozco.

Aioros: si pero ahora no va a ser posible que lo vea. Necesito tu ayuda, tengo que sacarla de aquí ahora, ya que no puedo fallar en mi asistencia con el patriarca.

Seika: que!! ¿Cómo que no voy a poder ver a Seiya?

Aioros:  en primera, baja la voz, segunda tengo algo importante que hacer pero te prometo que te llevaré a ver a Seiya después, en este momento Aioria te sacará de aquí, puede ser peligroso para ti.

Seika: pe-pero.....

Aioros:  porfavor, te lo pido.

Seika: esta bien.

Aioria: bien, vamos por aquí Seika.

Seika:  esta bien.

Aioria saco lo más rápido posible a Seika de ahí, al salir Seika se fue a la casa del viejo John un poco desanimada, pero aun sabía que no se rendiría en tratar de ver a Seiya.
Paso el tiempo y se hizo de noche, todo estaba en silencio, Seika estaba en su cama pensando en si lograría ver a Seiya o solo se caería y no lo volvería a intentar. De repente alguien tocó levemente pero suficiente para que se escuchará en la ventana, Seika se asustó pero vio que Aioros.

Seika: ( abre la ventana) ¿Qué haces aquí?

Aioros: vine a cumplir mi promesa. Vamos a ver a Seiya.

Seika: ¡¿ahora?!

Aioros: si, ahora, ven toma mi mano.

Y Seika no se negó, otra vez tomo su mano y fueron al santuario. Aioros la llevo a una pequeña casa, un poco alejada del santuario.

Aioros: es aquí.

Seika:  (se asoma por la ventana) ahí está el es mi hermano Seiya!!!.

Aioros: baja la voz quieres.

Seiya: eh? Hay alguien ahí?