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A la mañana siguiente...

Eran las 6:30 de la mañana. Los Parr se estaban despertando, y los niños también.

-¡buen día, niños!- saludó Bob, sonriente.

-¡buen día, papá!- saludaron Dash y Violeta.

-hola, niños. Aquí tienen su desayuno preferido: panqueques- dijo Helen.

-¡sí! Panqueques- se entusiasmó Dash.

-no olviden que hoy tienen escuela- recordó Helen.

-ok, mamá- dijo Dash, serio. Realmente no tenía ganas de ir a la escuela.

Luego del desayuno, Dash y Violeta se vistieron para ir a la escuela, y minutos después, llegó el autobús para recogerlos.

-adiós, niños- los saludó Helen.

-adiós, mamá, papá- exclamó Violeta.

-¡nos vemos!- dijo Dash.

Cuando Dash y Violeta salieron de la casa, subieron al autobús.

Y, cuando llegaron a la escuela...

Violeta llegó a su escuela, y Dash la saludó desde el autobús.

-adiós, hermanita- exclamó Dash.

-nos vemos, Dash- sonrió Violeta.

-¡suerte con tu novio!- le deseó Dash.

Violeta, en vez de enojarse, como hacía siempre, respondió:

-gracias, Dash-

Amor Entre Hermanos (Los Increíbles) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora