Tsukishima Kei // One-shots

•5•

Observo su escritorio lleno hasta el tope de cosas, los cuadernos, hojas, apuntes y libros parecían un mar profundo dispuesto a tragarlo por completo, tembló, tenía tanto que estudiar  ni siquiera sabía por dónde empezar y tampoco tenia muchos ánimos de hacerlo mientras trataba de acomodar sus propios pensamientos fue interrumpido por el sonido de su teléfono celular, alguien lo estaba llamando, miro el remitente era Kenma pensó en un segundo en no contestar pero sabía la clase de problemas que acarrearía tomar esa decisión.

—Hola Kuro.

—Hey! Kenma ¿Cómo estás? —Trato de sonar tranquilo.

—Bien bien, me encontré a tu madre ¿Sabes? —"Mierda" pensó Kuro, empezó a ponerse nervioso.

—Ah... ¿Si?

—Si —El tono de Kenma al hablar había pasado de ser tan monótono a ser más serio, incluso se podría llegar a decir que había algo de enojo— Me dijo que te invito a almorzar pero le dijiste que ya lo habías hecho y te llamaba para asegurarme de una cosa ¿Cuándo fue la última vez?.

—¿A qué te refieres? —Se hizo el desentendido.

—No te hagas el idiota, sabes a que me refiero.

—... —No quería decirle la verdad, pero Kenma era muy perspicaz, se daría cuanta apenas se vean de lo mucho que Kuro había adelgazado. —El jueves... — Cerro sus ojos apretando con fuerza, esperando el sermón del más bajo, pero este nunca llegó.

—Otra vez... —La voz tan enojada que se oia del otro lado del móvil paso a ser más calma, pero llena de tristeza. —Shōyō, Kageyama y yo estamos cerca de tu universidad, ven a almorzar con nosotros.

—Yo no... —Su mejor amigo lo interrumpió.

—No es una pregunta, tienes media hora, ven o iré a buscarte, te pasare la ubicación.

—Está bien —La pequeña amenaza y orden disfrazada de invitación hizo sonreír por primera vez en toda la semana a Kuro, saber que su mejor amigo se preocupada tanto por él a pesar de que ambos eran adultos lo hacía sentir feliz. Una vez que cortaron la comunicación, el de cabello negro corrió al baño, debía bañarse, afeitarse y arreglarse en menos de media hora, busco entre sus cosas, su armario era un desorden de ropa tanto suya como la de Kei, el olor del perfume de su ex seguía muy impregnado en las prendas de ambos, ese aroma volvió a llenar de angustia su corazón, devolverle todo, pero por ahora no podía.
Quería llorar, pero se volvió a decir a si mismo que no lo haría más, no dejaría que algo como eso arruine su sábado; termino de alistar sus cosas y salió, camino unas calles con los auriculares puesto, mala idea, parecía que su propio celular estaba en su contra, reproduciendo esas tontas canciones de amor, se sentía como si la vida se riese en su cara, vio al trío a lo lejos, el más bajo de los tres apenas se dio cuenta de la presencia de Kuro trato de llamar su atención agitando los brazos.

—Kuro-san!

—Hey chibi-chan, tanto tiempo —Kuro pudo sentir la mirada de los otros dos restante inspeccionarlo de pie a cabeza— Kageyama, Kenma — Saludo a ambos levantando la mano, el primero en ser nombrado hizo una pequeña reverencia, después de eso el cuarteto se dirigieron a un restaurante de comida brasilera.

Kenma pudo percibir la cara de sorpresa y susto que Kuro puso al leer los nombres "raros" de los platillos que presentaba el menú— No te preocupes, todo es mucho más rico de lo que suena. — Dijo su mejor amigo, Hinata se encargo de sugerirle  todos algunas cosas, una vez la comida estaba en la mesa hablaron de cosas triviales sobre la vida de los cuatro en general, la energía desbordando del pelinaranja, y los tontos comentarios que a veces Kageyama tiraba sin darse cuenta hicieron que Kuro por un momento dejará de sentirse triste y que olvidara por un momento de lo que estaba pasando en su vida.

—¿Y qué hacen por aquí?

—Vinimos a ver a una tía de Kageyama, es modista. —Hablo Kenma al fin, había estado muy callado desde la llamada telefónica.

—Va a hacerme un traje para la boda de Yamaguchi.

—ah si que el pecoso va a casarse, en horabuena. —Dijo alzando en alto el vaso de jugo qie sostenia fingiendo alegría.

—¿Tsuki no te lo dijo? —Hinata pregunto con mucha inocencia, sin darse cuenta de lo que acababa de provocar, Kuroo al escuchar ese apellido borro su sonrisa por completo.

—Kei y yo.. no hemos hablado mucho desde hace unas semanas.

—oh, yo... lo siento.

—Descuida, son cosas que pasan.

El ambiente se había puesto un poco tenso después de esas palabras, Kenma le hizo un gesto a Kageyama y este tomo su celular, mientras fingia revisar sus mensajes le pidió a Hinata lo que acompañe a otro sitio, el más bajo trato de preguntar por qué, pero después de una pequeña discusión al final solo se fueron.

—¿Es por eso que no estas comiendo? ¿Qué te hizo ahora?

—Descubrí que me estaba engañado y cortamos...—Soltó sin más, Kenma estaba al tanto de la relación mantenían, el menor lo engañaba con quien se le cruzara en el camino para después venir arrepentido de todo y que Tetsuro lo vuelva a perdonar de nuevo. Tsukishima era una persona toxica, manipuladora y abusiva, todo esto le ocasiono ansiedad y depresión a Kuroo. Para agregar más cosas a la lista, no se sabe en qué momento exacto, pero luego de una fuerte discusión que la pareja habían tenido el pelinegro termino en el baño vomitando todo su almuerzo, al principio creyó que había comido algo en mal estado, pero empezó a darse cuenta de que las náuseas aparecían luego de las discusiones y en un momento el mayor simplemente dejo de comer.

—Kuro... 

—Lo se... Pero esta vez no va  ser como siempre, lo prometo...  

Kenma suspiro cansado ¿Cuando tiempo su mejor amigo iba a poder mantener esa promesa?