три

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Gustabo llevaba casi 3 semanas sin pisar la comisaría y eso se empezaba a notar.
Volkov empezó a extrañar las voces de Horacio (y de Gustabo, pero sobretodo de Horacio)

Conway también empezó a extrañar sus voces y gritos, también sus gilipolleces y sus risas. Se sentía como un hijo de puta pero de los malos, de los que no merecen vivir. Una presión en el pecho le acompañaba todos los días a todas horas, haciéndole sentir incómodo y con ganas de vomitar.
Nunca se había enamorado y menos de un gilipollas como él, no sabía quién era más gilipollas, si Gustabo o él por enamorarse.

Cansado de esa presión cogió el móvil de comisaría el cual sabía que Gustabo no tenía registrado y marcó estratégicamente unos números que extrañamente se sabía de memoria.
Unos que había intentado llamar millones de veces pero que ninguna voz lo recibía, menos esta vez.

-¿Quien es?-la voz adormilada del joven se escuchó por detrás del teléfono, haciendo que Jack soltara una sonrisa tierna

-Antes de que me cuelgues quería pedirte que vayas a las 8:00 p.m a la dirección que te voy a mandar, es urgente, no seas mariconetti y ven.-con eso colgó sin dejar que el otro hombre contestara, ganándose un suspiro de parte del pequeño

Aunque Gustabo se convenciera de no ir, en realidad por dentro lo deseaba con todo su alma y corazón, quería estar al lado de Jack a toda costa, pero también quería salvar la poca dignidad que le quedaba. ¿Iba a ir?;obviamente, ¿Iba a sufrir?; por supuesto, pero para esas cosas podia decir que era medio masoquista.

En cambio Jack ni siquiera sabía porque le llamó, ni siquiera sabe que le va a decir, solo quiere verle, quería ver esos preciosos ojos verdes (no sé de que color los tiene lo siento xd) quería volver a sentir sus suaves labios moviendose indecisos en los suyos, queria volver a besar su cuello y ver como se estremecía y ahogaba algunos gemidos solo para hacerse el duro y querer llevar la situación, pero nunca lo conseguía.

Gustabo decidio levantarse de la cama y darse una ducha fria para calmar sus nervios, acario su pelo con suavidad al igual que sus hombros. Al salir cogió alcohol y lo restregó lentamente por sus nudillos, sintiendo como estos ardían, algo que extrañadamente le alivio por completo. Decidió ponerse unos vaqueros rotos negros los cuales a su lado caia una pequeña cadena, y una camiseta de manga larga de rayas, iba algo raro para su gusto, pero había que aceptar que iba guapo.

En cambio Jack se puso el primer traje que vio, aunque todos eran iguales, no le importó, pues sabía que a Gustabo le volvía loco que vistiera así. Miró su movil y vio que la ultima conexion de Gustabo era de hace unas horas cuando le llamó, ni siquiera se había atrevido a conectarse. El menor decidio ponerse unas vendas en sus nudillos, no quería ver la mirada de pena que le regalaria Jack cuando le mirase.

Jack dio un suspiro extremadamente largo y pesado, sintiendo sus musculos tensarse al pensar en el suave tacto de Gustabo. Miró el reloj de su muñeca, eran las 7:45 así que decidió salir ya.

Se subió en el coche y condujo hacia el destino el cual era un pequeño parque abierto en la montaña, sabía perfectamente que a partir de las 8:00 el sol se iba, dejando un atardecer digno de película. Se preguntó a si mismo el porqué de que quería recuperar a ese chico a toda costa, de verdad que quería saberlo, aunque la única respuesta que realmente era lógica para él era que se acostumbró a sus caricias y besos.

Decidió aparcar un poco más adelante del sitio y se bajó, al cerrar el coche miró al frente, a unos pocos pasos se encontraba Gustabo sentado en el césped mirando adelante con los pies cruzados, ni siquiera se giró al escuchar el apagar de un motor, ese motor que se conocía de memoria.

-Por una vez en tu vida has acertado en algo...esta lindo el lugar.-musitó el menor, haciendo que Jack sonriera de lado y se sentará al lado suya

-Nunca me perdonarás, ¿verdad?-

-Quiero perdonarte y decirte todo lo que siento pero sinceramente la poca dignidad que me queda no me deja.-volvió a musitar-mejor dicho, la poca dignidad que me dejaste.

El corazón de Jack se partió en mil pedazos, imaginando como estos caían al suelo, deseando que Gustabo los cogiera y los volviera a unir

Se sentó al lado de él mirando el precioso atardecer que ese día el cielo les regalaba, haciendo que Gustabo cerrara los ojos y diera una bocanada de aire para después soltarlo lentamente, disfrutando del aire fresco que golpeaba lentamente en su rostro.

Jack apreciaba al menor con admiración, pues pudo ver como él se había derrumbado y roto en mil pedazos, y ahora estaba aquí, con el hombre que más le había hecho daño pero que más había amado en toda su corta y rápida vida como si nada.
Bajo su mirada a las manos del pequeño, viendo cómo está vez llevaba unas vendas las cuales sabía que no iban a durar mucho ahí, pues también sabía perfectamente el dolor que eso causaba, una venda rozando constantemente una herida infectada.

Estaba seguro de que Gustabo ni siquiera se había tomado el tiempo de curárselo bien, pues sabía que era jodidamente despistado, y amaba eso.

-Cada día doy más asco.-musitó en un suave susurro casi inaudible, pero que el pequeño lo escuchó como si lo hubiera gritado

-Sabes que es mentira. Por mucho que quiera odiarte por todo lo que me has hecho solo me haces querer estar más a tu lado.-los ojos de los dos hombres por fin se conectaron, un leve sonrojo se asomo por las mejillas del menor, haciendo que un sentimiento jodidamente tierno inundara la anatomía de Jack

-Quiero alejarme de ti, no quiero hacerte más daño, pero no puedo.-Su voz esta vez se elevó-simplemente... no puedo.-

Ni siquiera Gustabo supo de donde sacó la valentía para acercarse al mayor más de lo normal

-Estoy roto por dentro, pero aunque tú hayas hecho parte de eso también me alivias.-las manos de Jack viajaron hasta la cintura del pequeño, esta vez si se dejó, sintiendo como el alivio se esparcía por su cuerpo

-Te necesito conmigo ya.-musitó el mayor

-Me arriesgaré...voy a ir hasta el final contigo, aunque los dos sabemos que el más dolorido que va a salir soy yo.-habló Gustabo

-No voy a volver a cometer ese error-añadió Jack

Por fin volvieron a juntar sus labios esta vez con dulzura y amor, necesitaban eso, se necesitaban.
Jack le atrajo más a él, haciendo que Gustabo enrollara sus piernas en la cadera del otro, sentándose en su regazo.
Aumentó más el beso al meter su lengua, sintiendo como Jack apretaba más su agarre de la cintura, consiguiendo que Gustabo subiera sus manos al cuello del otro chico

Al final y al cabo, no podían estar separados
•••
JSIFKSKKCSN HOLA :)
Espero que os haya gustado mucho :D cada día amo más a este ship, stop😔👊🏻
OYE GRACIAS POR EL APOYO OS AMO MUCHO OMFGIDKCISKFIS❣️💚💚💖💖💛🤎💛💛❣️💞🧡💓💖❣️💕

I am broken inside-intendenteplayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora