Después de todo, no llegaron a la habitación... Sucede que antes de salir del lago, ponerse la ropa mojada y pasar desapercibidos por sus familias, ─como si lo que traían puesto no fuera para nada sospechoso─; vinieron a ellos de literalmente un chapuzón, impidiéndoles el huir. Por suerte les escucharon acercarse con tiempo, así pudiendo cambiarse más rápido. Y sí, sus planes se habían arruinado. Pero, oportunidades siempre habían. Por este motivo les siguieron la corriente, sabiendo que sus necesidades eventualmente encontrarían una manera de salirse con la suya, la cual sorprendentemente llegó muy temprano.
Su señal para regresar a la casa de campo fue cuando el cielo se volvió completamente negro. Cenaron y se fueron a dormir, y cuando ya todo mundo se encontraba en sus cuartos, grande fue la sorpresa que Minho se llevó, cuando se enteró de que Jisung lo esperaba frente a su puerta. Resulta que el chico se escapó de la habitación que compartía con su familia porque no soportaba los ronquidos de su papá. Dijo que se encontraba ahí en busca de compañía, pues dormir en la tenebrosa sala no se le antojaba mucho que digamos.
Algo sacado de onda, Lee lo dejó entrar, todavía no acostumbrándose al hecho de básicamente coexistir a su lado, sabiendo que sus sentimientos recién se determinaron mutuos.
── ¿Vienes? ──escuchó detrás suyo, al voltearse, encontrándose con Jisung ya arropado en su cama. Lo miró con cierta impresión, el rubio copiando sus facciones al interpretar las contrarias de manera incorrecta── Oh, perdón. No te molesta que duerma contigo, ¿verdad...?
Bufó una risa burlona ante sus palabras y dijo las suyas con obviedad── Jisung, llevamos durmiendo juntos desde que tienes dos años. ──para agregarle más sátira a su locución, alzó una ceja, se cruzó de brazos y ladeó su cabeza, sabiendo muy bien que Jisung quería decirle algo más, estando dispuesto a sacárselo.
── Sí, pero- Ya sabes... ──balbuceó ansioso, sin la mínima idea de cómo expresarse. Tenía miedo de cagarla.
Luego de pensarlo un rato, Minho recordó sus encuentros íntimos, y tomando en cuenta como se sintió hace rato en cuanto a eso de ser correspondido, supuso que Jisung se sentía igual. Así que se preparó y tomó un respiro animador para decir lo siguiente.
── Nada ha cambiado, ni va a cambiar entre los dos. ¿Está bien?
Apartó la mirada y la reposó en sus manos.
── Así que... ¿Ahora eres mi amigo con derechos?── ¿Qué? ──espetó confundido. El menor sólo levantó sus hombros, todavía dejándole sin respuesta alguna. Chasqueó su lengua, idealizando lo difícil de hablar que sería esto. En consiguiente, se acercó al otro, quien se hundía cada vez un poco más entre las mantas; sentándose a su lado para llamar su atención── Jisung... ──inició, dejando suspendida en el aire su disque oración en lo que pensaba qué agregarle.
── No, está bien. Entiendo si prefieres dejarlo como antes. ──se apresuró a decirle, aunque no se veía muy convencido ni de sus propias palabras. Quizá sólo no quería tener esta incómoda conversación.
── ¿Qué parte de "creo que me gustas" no entendiste, Han Jisung? ──le replicó, iniciando a desesperarse.
── Que no estás seguro de todo esto que sientes y que prefieres mantener las cosas neutrales. ──dictó, provocando que Lee tallara su cara con cansancio, su reacción no siendo muy bien tomada por Han, quien en cuánto notó la exasperación en él, se alertó más── Y... Y eso está muy bien, ¿sabes? Sí... Porque nosotros-
Con la intención de detener las idioteces mal dichas de Jisung, lo tomó por la mandíbula y atrapó su labio inferior en un beso mórbido. Minho ladeó su cabeza para profundizar un poco más el contacto antes de separarse, sus ojos al instante cayendo pesados sobre Jisung, quien a penas insinuaba en seguir con aquel beso, sumergido en un estado de estupefacción bastante sólido.
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❛ un reencuentro veraniego ❜ minsung
FanficOcurrió un verano de esos, mientras enredados entre sus sentimientos, seguían haciendo el intento de atrasar algo inevitable, algo que a fin de cuentas terminaron por revelarse piel a piel, convirtiéndose más que inseparables. Minho le aseguró que s...