La historia del ciervo del agua-AP (Larry)

Cap 3

-.- dialogo

"" Pensamientos

<<El mismo personaje sigue ablando

"!Debe de ser un orco, lo que me dijo la abuela en ese momento era cierto¡"

Pensó Louis preocupado con los ojos abiertos en asombro y la boca tapada por su mano.

"Más bebida por favor..." pensaba el orco recuperando poco a poco la conciencia. Cuando sintió que lo levantaban y empezaba a moverse. Despertó asustado por ser capturado por un humano, tratando de no moverse para no alertarlo y no acabara con su vida.

"Como dijo mi abuela el quien se lo encontrar se lo queda", "!Y ahora es MIO¡"

Louis pensaba caminando con el joven orco en su hombro cual costal de papas tratando de no saltar tan alto entre cada paso que daba para no despertarlo.

Mientras el orco no salía de su shock rígido en el hombro de hombre que lo llevaba para comérselo.

"Tiene un fuerte golpe en la cabeza" Louis lo acostó en su antigua habitación sobre un futon en el suelo y salió a buscar como quitar ese chinchón que parecía más hinchado cada minuto que pasaba.

Cuando Lou salió de la habitación el orco se levantó, pero cuando oyó pasos que se acercaban y la puerta empezando a abrirse se recostó de nuevo con los brazos unidos en la barriga uno de sus puntos vulnerables.

"Despierta, despierta"

El orco sintió como le colocaban algo encima del chinchón que olía como especias. Abrió los ojos como platos al entender.

"Me está condimentando, ¡¡QUIERE COCINARME Y COMERME!!" pensó el orco asustado empezando a temblar y hacer se bolita en la pared más cercana.

-AH! ¿Despertaste? - dijo dejando la cuchara de madera con ungüento y tratándose de arreglar el flequillo con su saliva.

<<-No tengas miedo, conozco tu identidad- parpadeo coqueto y sonrió de lado jugando con su cabello. - ¿Eres u orco verdad? - dijo logrando asustando más al orco.

<<-Hola soy Louis, Soy una persona humilde que hace bebidas con cebada- se sonrojo un poco al decirlo sonriendo amplia mente logrando que le salgan unas adorables arruguitas en las esquinas de sus brillantes ojos azules.

<<-Por lo general, creo que eres guapo y siempre te he admirado por presentarte así. ¡¡Es genial!!- refiriéndose a que había aparecido en su jardín desnudo, traído gracias a sus oraciones.

"¿Me ha visto?"- se preguntaba el orco muy confundido.

-Me pareces tan familiar!!- Louis se acercó más viéndolo más de cerca.

"¿QUE?"

-No, no ,no- el orco negó una y otra vez con su voz un poco ronca.

Louis se alejó de un salto y aplaudió confundiendo un poco más al ojiverde.

-Tratare tus heridas con sinceridad, preparare comidas y me quedaré aquí hasta que estés bien. ¿Qué tal pasar tiempo conmigo? - Louis dijo con ojos brillantes y gran sonrisa.

El orco confundido por la gentileza del humano dudo un poco antes de aceptar recordando lo enojado que se ponía cada vez que el comía un poco de sus huertas. "¿Qué hacen en mi jardín?". Pero esta vez el humano parecía tan bello y alegré preocupándose por él.

-Si...- tenía que ser una persona buena. "Mañana tengo que escapar lejos de aquí" una persona buena para no comérselo de inmediato. "¿Que hago ahora?".

Asintió vigorosamente haciendo sonreír mas al hombre frente a él.

-Entonces deberías estar muy cansado esta noche, descansa bien y veremos mañana- sonrió levantándose muy feliz porque su presa acepto quedarse.

<<-Descansa bien "SEÑOR TIGRE" - se despidió cerrando la puerta tras él.

"¿Qué tigre?" - ¿Tigre? - menciono el ciervo muy confundido por el hombre.

Cerro de un portazo la puerta de su habitación. Con la mano en el corazón latiéndole muy rápido su cara sonrojada y su sonrisa feliz en su rostro decía que estaba fechado.

"Se ve muy guapo incluso en un lugar tan iluminado como este"

"Las oraciones a Payne han funcionado"

"Debe ser aquel tigre negro que vi cuando fui a explorar cuando era niño"

"Su cabellera era enorme y voluminosa"

"Pero veo que es muy tímido" suspiro sonriendo.

"TENGO QUE ENAMORARLO"

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"Estoy listo para irme ahora" se sentó en el futon al no oír nada con sus orejas de ciervo en su cabeza. Nerviosamente se encogió viendo para todos lados. "¿Qué hare?"

-Solo me acostare un rato antes de irme- anuncio acomodándose mejor y después de unos segundos bostezo quedándose dormido repitiendo.

-Solo un rato, solo un ra...to, Solo un ra-

Un pajarillo cantaba y los pollitos graznaban para que Louis los alimentara.

El sol del día le pego de lleno en la cara despertándolo. Parpadeo para acostumbrarse a él y no recordada donde estaba. Recordó como se había golpeado la cabeza y como el hermoso hombre lo trato cuando el pensaba que era un demonio.

-Me quede dormido!!- dijo regañándose y jalándose sus orejas de un lado para otro estrujándolas.

Toc, toc

-buenos días- "Él está aquí" miro muy asustado la puerta.

Deliciosa comida apareció frente a el cuando las puertas se abrieron. Solo podía ver la comida ni siquiera noto cundo Louis se sentó frente a él, comenzó a comer. "Rico" masticaba con entusiasmo tratando de llenarse las mejillas como una ardilla.

Louis aprecio como sus orejas salían y se movían de abajo para arriba aparentemente felices.

-Tienes unas orejas grandes- dijo restregándose los ojos cansados por haber despertado temprano para cocinar a su futuro compañero.

El orco rápida mente las oculto.

-Quizás vi mal- menciono empezando a comer. –Eres un tigre ¿Verdad? -

-Huh?- el ciervo está muy confundido de cómo lo iba a confundir con un carnívoro.

-¿Dime lo que te gusta?- dijo con una mirada picara.

Se detuvo y pensó que si él creía que era un tigre podía actuar como uno.

-¿Carne?-

-Bueno la próxima vez te haré carne- le dijo soltando un suspiro. –Pero no tengo ningún talento para cazar, así que comprare algo cuando tenga que ir al mercado-

El ciervo empezó a sudar al parecer no podía actuar como un tigre.

-yo... no soy... un tigre-

-Ah!!!- grito al recordad, cuando el orco dijo lo último. - solo es un ciervo de rio, pero, pero la magia es que nunca lo he visto ni una sola vez, no sé qué tan ágil será-

<<-Pero ellos realmente son los que destruyen mi jardín y se comen todo los que siembro y no sé qué hacer ahora-

<<- ¿Te gustaría ponerles una trampa a esos ciervos? -dijo muy entusiasmado. - ¿Te gustaría comer carne de ciervo? -

La cuchara cayó al suelo y el ciervo se puso pálido como una hoja.