La historia del ciervo del agua-AP (Larry)

Cap 9

-.- dialogo

"" Pensamientos

<<El mismo personaje sigue ablando

#Notas del traductor

Un nuevo día con un sol despejado brillaba en el horizonte. El bullicio de del mercado empezaba a florecer.

"El gran señor", caminaba por el mercado viendo a los comerciantes poner sus puestos. Con paso seguro y la frente en alto admirando a sus súpitos.

-¡¡SEÑOR!!- dijeron al unísono un poco temeroso sus lacayos.

Volteo altaneramente al verlos.

-Hace tiempo que no lo hemos visto señor- dijo el más pequeño de ellos.

-¡si ha pasado unos meses!- le contesto el padre a su hijo.

-por ahora tengo un trabajo y me estoy quedando en la ciudad- les contesto aburridamente.

-¡¿se va a quedar mucho tiempo señor Brais?!-pregunto el hombre mayor.

-Si, señor finalmente tiene un cargo oficial. -

-Ah... si... es verdad-dijo más interesado sonriendo un poco. -Ustedes que hacen aquí. - los miraba fijamente. –JA, deben de sentirse alagados por estar cerca de mí. - no recibió contestación. – Es un honor para ustedes ¿No lo creen? Estar conmigo.-

-Parece que hoy no hay nada que hacer aquí, así que por hoy regresaremos. - le dijo conciliador el hombre mayor.

-El agua de grifo es suficiente para ustedes. Ya que un vino para ustedes dos es mucho, el estar cerca de su señor es más que suficiente. - les dijo pomposamente. - hay que tener cuidado ya que los parásitos solo se aprovechan por ahora ustedes deben de regresar a la ciudad, lo antes posible- el señor mayor le dio una mirada confundida a su hijo el cual miraba molesto por la osadía de ser despreciado de esa manera.

-si... mi señor entiendo muy bien, debe de ser muy difícil tener el cargo de oficial si está soltero ¿Por qué usted es de un rango alto? - le dijo al gran señor, el hombre viejo le dio palmadas en la espalda a su hijo para calmarlo.

-si.. tarde o temprano sentare cabeza....- dijo y al pensar en el lindo orco que vendía en su mercado. Dando se la vuelta sin despedirse.

-En realidad... pienso que no debe de sentar cabeza mi señor ya que no creo que pueda tener una familia- dijo el más pequeño de ellos analizando lo de los pies a la cabeza (Creo que le dijo impotente.I.). –Además ¿Una persona que no apoya a los demás?, no puede enamorarse. – 

Se detuvo y giro para ver la cara sonriente de su lacayo. – Hoy en día, su padre está muy orgullosos del mío y dice también que usted está recibiendo tantas demandas en la corte. Para asegurar que las personas de clase humilde reciban los mismo trato que los de clase alta.-

-Este Chico, Mi señor no lo escuche, ¿mi señor? -la tensión era palpable en el ambiente los dos tenían una lucha de miradas.

-que acabas de... decir. - le dijo con la cara poniéndose cada vez más roja de la furia.

-¡AH! Mi señor no lo escuche creo que se golpeó la cabeza o algo así- el padre del chico se puso frente a él empujando a su hijo detrás de él.

-¿HUH? Bueno- dijo calmándose no tan seguro.

-¡EH! ¡OH!, eso no es cierto, ¡Yo solo estoy diciendo la verdad! - dijo apartando a su padre con el brazo empujándolo hacia atrás. –además no sé por qué molestas a la persona, que vive en la montaña. Ahora que me han dicho eso ¡NO QUIERO QUE LO MOLESTES MÁS!.-