Más que solo compañeros de laboratorio || entrapdak

Capítulo IV

POV Entrapta

Hordak había estado hablando por un rato, pero mis pensamientos estaban enfocados en la manera en que se lo pediría, además de no saber si el pequeño Imp estaría de acuerdo con llevar a cabo la nueva experiencia que propondría, pero realmente me gustaría darle un baño con las cosas que trajeron ayer de Dryl, entre ellos shampoo y otros objetos para el aseo...

–¿Hordak?–. Lo llamé sutilmente en una pequeña pausa.

–¿Qué sucede?–. Me cuestionó extrañado, así que simplemente le hice una de las preguntas que tenía con respecto a su limpieza personal.

–¿Imp y tú toman baños? Es decir, no busco ofenderte o algo parecido porque en verdad no huelen mal, de hecho tienes un olor atractivo–. Me percaté de lo que dije y me sonrojé un poco, a lo que él se rio un poco.

–¿Baños? disculpa princesa, pero no entiendo exactamente a qué se refiere. Tengo entendido que los baños no se toman sino que los etherianos hacen sus necesidades en ellos–. Me contestó y yo negué con la cabeza.

–N-no era eso a lo que me refería, sino a ducharse, con agua y jabón, además de otros productos para la limpieza–. Pareció meditarlo por un momento con los ojos entrecerrados hasta que chasqueó los dedos y volvió a hablar.

–No sabía que en este planeta se tenía esa costumbre. Había escuchado algo similar de alguno de los invitados de Primero que se alojaron en su nave, pero eso fue hace años... Ducha le llamó como tú en la segunda vez, no baño... Y respondiendo a tu pregunta: No, mas tenemos otra forma de asearnos–. Explicó.

–Fascinante...–. Murmuré ante la última revelación, preguntándome de qué forma sería si no era un buen baño con agua tibia y burbujas esponjosas alrededor.

–¿Por qué preguntas?–. Preguntó con curiosidad.

–Bueno... ayer llegaron mis pertenencias de Dryl, y me preguntaba si podría darle un pequeño baño a Imp–. Él lo pensó un poco y asintió.

–Si él está de acuerdo no veo el porque no–. La pequeña aceptación me hizo feliz, aunque me pregunté en donde lo haría, por lo que dijo está de más decir que es obvio que no hay baños en la Zona del Terror. Supongo que él logró deducir lo que pensaba, así que continuó –Hay una habitación vacía en la sala suroeste, si quieres instalarte ahí para llevar a cabo tu nuevo experimento–.

–Ya veo, muchas gracias... necesitaré unas cuantas cosas para instalar un baño funcional...–. Le comenté, pensando en toda la estructura y los sistemas que tenía que implementar, algo en lo que no me ponía a reflexionar muy seguido en Dryl teniendo en cuenta que su uso era algo muy práctico cuando ya está instalado a menos que tenga alguna avería.

Armarlo desde cero sería un desafío, pero nada imposible. Sería bastante similar a construir una enorme máquina, aunque con una forma distinta debido a que la función que desarrollaría no sería la misma que la de algún robot convencional.

–Si gustas puedo ordenarles a algunos soldados que te apoyen al armado de lo que necesites–. El más alto de los dos ofreció.

–Claro, unas cuantas manos más no me vendrían mal, muchas gracias–.

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Estuve haciendo algunas adecuaciones durante la última semana, colocando una tina y conectándola al drenaje de la zona del terror en la habitación que Hordak me permitió usar para este experimento y ahora primera fase de un proyecto mucho más grande que beneficiaría a muchas personas en la Zona del Terror.