**•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ ˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚*No podía soportarlo más, parecía perro enjaulado, caminando de un lado para el otro con el desespero impregnado en su piel.
Al día siguiente de que planearon buscar una salida, el rey fue hasta la celda de JiMin para anunciar personalmente el puesto en el castillo. Lastimosamente era un hombre de palabra y cumplía lo que decía.
JiMin le había dicho a YoonGi que debían ser fuertes, el plan simplemente era ganar su confianza para evitar levantar sospechas y de paso tener la libertad de andar por el castillo para investigar y él para ver si JiMin podía encontrar algo en su habitación; sin embargo, YoonGi no es que estuviera muy seguro del plan. Además de sonar peligroso, todos sabían que el rey no era un tonto.
La estadía del rubio seguía siendo en la mazmorra; cuando lo encerraban, YoonGi se encargaba de revisar la biblioteca en busca de algún mapa o algo que pudiera ayudarle, incluso caminó gran parte del castillo, moviendo discretamente los objetos colgados en las paredes por si algo sucedía.
No había descubierto nada aún, y eso trajo consigo un estado de aflicción, pues ya había pasado un tiempo y lo que JiMin de vez en cuando le contaba sobre cosas que el rey le hacía a él y a las demás, lo encolerizaron demasiado. Y aquellas conversaciones siempre terminaban en una frase que JiMin decía: "lo soportaré y saldremos de aquí juntos."
Él era el más valiente de la relación, y a veces YoonGi solo se sentía inútil por ser en ocasiones tan manejable. Debía ser al contrario, siendo el mayor y un guardia, tenía que protegerlo.
Pero enseguida el razonamiento que surgía tenía un fin con la pregunta: "¿Qué puedo hacer yo?".
Se había abstenido también a tocarle más íntimamente a pesar de que el rubio en las noches que pasaba por allí se lo pedía detrás de la puerta de metal; no lo hacía porque le diera asco, tampoco por miedo, simplemente porque podía notar cómo su estabilidad se deterioraba con el tiempo, y a veces tenía que tratar sus resacas o cuidarlo en estado de drogadicción.
Eso sí, los besos lentos y las caricias generosas y tranquilas no se las negaba, siempre procuraba tratarlo con la mayor suavidad para que olvidara la brusquedad con la que el rey lo trataba.
El rey seguía sospechando de ambos, por eso había escogido a JiMin para ese cargo, para ponerlos a prueba y de paso había enviado a alguien que los vigilara.
Lastimosamente a veces la necesidad les había ganado, terminando con ellos besándose en los pasillos "escondidos". Y solo tal vez aquella persona enviada para vigilarlos de algún u otro modo se había dado cuenta. Solo sabe que cometieron errores que sabían que les costaría caro; lo confirmó cuando el rey lo llamó a su habitación, y esperando a que le abrieran la puerta escuchaba sollozos y gritos dentro de la habitación que no lograba entender. Por eso estaba desesperado.
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Bajo Llave - [YoonMin]
Fiksi PenggemarSer un guardia real no es tarea fácil. Pertenecer a la clase baja tampoco lo es. YoonGi es uno de los mejores guardias del castillo, y su trabajo varía de acuerdo a las órdenes de su rey. JiMin es un prostituto por necesidad, y a raíz de su manera d...