Cuando te fallo Jesús
mi corazón se siente huérfano
y mi cuerpo nada en dolor.
Llueve en mis ojos
y me da vergüenza mirar los tuyos.
Cuando te fallo Jesús
mis poemas son aven sin alas
y mis labios lloran con palabras.
Me amas tanto
que me duele no entregarme tanto
como vos te entregaste por mí, por amor.
El consuelo que me queda,
cuando mis fallos me queman,
es tu perdón y abrazo cuando estoy sucio.
El diablo aprovecha mi caída con la piedra para agarrarla y tirarmela y me lastima.
Pero vos estás ahí,
cuando ni yo estaría para mí.
Cuando te fallo Jesús
soy un una rama rota de un árbol cansado
y los pájaros no pueden hacer nido ahí.
Cuando te fallo Jesús
la religión que llevo dentro me castiga
y no me deja escuchar tu dulce voz de amor diciéndo: "hijito, andá y no pequés más"
Cuando te fallo Jesús
es cuando más siento tu amor
y tus caricias me limpian.
Cuando te fallo Jesús
tu sonrisa ilumina toda mi oscuridad.
Cuando te fallo Jesús
mi debilidad comienza a transformarse
en tus fuerzas,
y yo, en vos, cuando soy débil soy fuerte.
Cuando te fallo Jesús, escribo un poema
que habla de cuanto me amas.
