Seiryu

Caítulo 1 - Ryuji

Hacía frio, pensó. Ryuji, caminaba por las calles de su querida cuidad, Zaragoza, en busca de algo que hacer, o ir a picar algo. Paró en un escaparate a mirar una columna de Play Station 4 en El Corte Inglés, en el que se fijó en su propia imagen. Pelo largo, castaño, ojos marrones y sosos, según él, altura media, y 17 años de edad. Joven, con la vida entera por delante, y con carácter amistoso, y positivo. Pero había dias como aquel que prefería estar solo, disfrutando del frio y el ambiente navideño. Se arregló el pelo debajo del gorro negro que se habia puesto en la cabeza, y se abrochó el abrigo gris que le dió su abuela para que "No muriera de frío".

Siguió andando, escuchando villancicos, y oliendo dulces que vendían en los puestos. Estaba feliz. Pero algo le sacó de ese ensueño. Un pitido atronador de un tractor, en la carretera de su derecha. Le dio tiempo a ver el motivo de semejante alboroto. Una niña de unos 4 años, se hallaba delante del tractor recogiendo una pelota, en plena carretera.

Se preguntó, porqué. Se preguntó si iba a parar a tiempo. Se preguntó si... No. No se lo preguntó, no le dió tiempo. Es como si hubiera perdido la conciencia y su cuerpo lo manejara otro. Saltó. No supo porqué. Por supuesto él era de los que siempre ayudaría a alguien o salvaría a un amigo. Pero jamás le había pasado algo parecido. Simplemente se vio en el aire, empujando a la niña al vuelo, mirando el tractor a escasos metros... no, centímetros. La niña cayó, lejos de allí. Después, un sonido, un pitido, villancicos de fondo... Y dejó de oír. Dejó de sentir. Dejó de vivir.