La última oportunidad. (PAUSADA)

Capítulo 1: Invocación y hostilidad.

Fate/stay night y sus personajes no me pertenecen.

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La luz brillante y resplandeciente baño por pequeñas partes divididas la habitación de la iglesia, era luna llena, por lo que la luz era mas brillante que de costumbre, pero lo mas importante, era la hora perfecta para llevar a cabo una convocatoria de este nivel.

Dos figuras, la de un hombre y una mujer estaban parados muy cerca del altar de la iglesia, la apariencia del hombre era muy normal, pero sus ojos estaban completamente vacíos, no había ninguna pizca de emoción en sus expresiones faciales, era el rostro de un cadáver deambulante y sin vida.

La mujer era lo que describirían los humanos como anormal, pero a la vez, "una verdadera belleza" ojos rojos como la sangre, y un cabello blanco como la nieve, su apariencia era como la de una princesa de los cuentos de antaño,  sus movimientos informales, pero elegantes eran la prueba de ello.

El hombre miro a la mujer que estaba a su lado, la que era la mujer de su vida y su querida esposa, la que tenia que proteger de este brutal baño de sangre , tenia que ganar el Grial como de lugar, para cumplir su sueño y sacar este mundo podrido a flote.

"¿Estas lista?"

Su esposa asintió ante el con firmeza, sabia que no debía esperar mas y con esa indicación ya dada, el ritual empezó.

"Cerrar (llenar), Cerrar (llenar), Cerrar (llenar), Cerrar (llenar), Cerrar (llenar)."

"Repite cinco veces."

"Pero destruye cada uno cuando este lleno."

"Por la presente lo juro."

"Seré todo lo que es bueno en el mundo entero."

"Seré el que dispondrá de todo el mal el mundo entero"

"Vendrás bajo mi mando"

"Así que deja que tu espada sea mi destino"

"Respetando la convocatoria del Santo Grial."

"Si accedes a esta voluntad y razón, respóndeme"

Con esas ultimas palabras siendo mencionadas, el circulo de invocación brillo con un azul radiante seguido de una luz segadora.

Después de unos segundos y que la luz desapareciera de la vista del hombre, en medio del circulo, ahí estaba,la figura de una mujer de cabello rubio como el sol y ojos verdes como esmeraldas, mirándolo fijamente.

Su vestido azul formal contrastaba con la luz de la habitación, su armadura plateada era muy reluciente, casi como si estuviera viendo la sombra de la luna proyectada en frente de el.

Pero en vez de sentirse asombrado, se sintió confundido y casi decepcionado por la figura legendaria que tenia delante de el.

"El Servant Saber ha respondido a tu llamado, te pregunto, ¿tu eres mi Master?"

Antes de que pudiera pronunciar una palabra mas, el circulo de invocación volvió a brillar de nuevo de forma radiante, alertando a todos los presentes que estaban en el lugar sagrado y sacando de nuevo otra luz segadora mucho mas brillante que la anterior.

A la luz de la luna llena apareció otra figura, un hombre bronceado, su piel era parecida al prejuicio que se tenia de los herreros en épocas pasadas, pero su cabello estaba lejos de ser normal, cabello blanco al igual que su esposa, blanco como la nieve mas pura.

Sus ojos estaban cerrados, su ceño no mostraba ninguna expresión, tenia una cubierta roja puesta sobre una armadura corporal negra con lineas blancas , su mitad inferior estaba cubierta también por ese abrigo rojo con un pantalón oscuro, sus botas estaban chapadas en la punta con acero negro.