Capitulo 9

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"No estoy loco! Me gusta escuchar peliculas." Ella se rio.

"¿Escuchar peliculas?2

"Si"

"¿Cómo hace eso? A veces hay varias escenas sin discurso."

"Eso es exactamente por qué. Me gusta imaginar estas escenas."

"Qué chica tan peculiar..."
Sacudí la cabeza con el ceño fruncido y luego enderecé las gafas.

Caminamos por el parque hablando e intercambiando algunas ideas.Veronica era inteligente,humorística. Me hacía reír a menudo y describía escenas que eran hermosas para ella.Poco a poco, me adapté a la forma en que sostenía mi brazo,la forma en que aprieta ligeramente cuando alguien está cerca y me hace girar. Ella era delicada y sutil, haciéndome sentir cómoda y segura.Fue difícil de explicar,pero ... Me gustó su compañía,la forma en que hablaba y se burlaba de mí. El sonido de su risa y tu aroma...

"Crucemos el puente para que podamos sentarnos ¿Quieres un helado?"

"Si es hielo..."

"Lo que tu quieras. Vamos"

Cambiamos la dirección del camino y sentimos la hierba bajo mis pies. Nos detuvimos unos pasos más tarde.

"¡Buenas tardes!" Escuché a un hombre exclamar emocionado "¿Qué querrás?"

"Un helado de limón y un..." Veronica se detuvo, esperando que completara la oración.

"Uva, por favor."

Su mano liberó mi brazo, y metí la mano en el bolsillo detrás de mis pantalones para obtener el dinero.

"Betty"

"Hmm..."

"Voy a pagar."

"No, Veronica, no tienes que hacerlo."

"¿Esa chica? ¿No la dejarás ser amable contigo?" dijo el heladero. Su tono era tan alegre que me hizo sonreír.

"Gracias" Veronica le agradeció.

"Mira, esto es para la chica avergonzada". Sentí que un hilo fue colocado en mi mano, suavemente,por otra mano ligeramente áspera. "Sosten a Betty."

"¿Qué es?" Pregunté con curiosidad.

"Un globo"

Sostuve el hilo y me sonrojé.

"Gracias" le dije.

"De nada,niña."

"Vamos" Verónica me tomó del brazo otra vez y me entregó el helado.

"Fue muy amable de su parte." comente sonriendo "¿Cuál es el dibujo del globo?"

"Un corazón rojo con una cinta blanca."

"¡Oh!" Exclamé poniéndome roja 2¿Crees que...Tal vez él pensó que tú y yo..." Veronica rio suavemente.

"No te preocupes." Dijo en un tono de voz divertido "Él sabe quién es mi novia."

No diría que me sorprendió, pero sentí que mi mente se detuvo por un momento después de esa oración. Veronica tenía novia ... Otra ... Chica.
No me importaba eso. No me importó.

Respiré hondo.

De repente me sentí incómodo caminando con ella a mi lado, sosteniendo mi brazo. No había un por qué en todo eso. Ni siquiera sabía por qué estaba allí con una chica que apenas conocía y que no podía ver.

"¿Betty?"

Giré mi rostro hacia su voz. Algo me molestó. No externamente, sino internamente. Algo raro y dolorido.

"¿Que pasó?" Pregunté un poco agresivamente.

"Yo soy quien debería preguntar eso" respondió Veronica.
Solo me encogí de hombros y tragué fuerte."Sentémonos" decidió,agarrándome fuerte del brazo y llevándome a algún lado.

Sentí que estaba más fresco donde estábamos. Quizás estábamos debajo de los árboles,porque el resplandor que había desaparecido antes se atenuó considerablemente.

"¿No te importa sentarte en el piso?"

"No" dije.

Las manos de Veronica agarraron una de mis manos.

"Estamos debajo de un árbol muy grande. Hay varios otros alrededor" describió, haciéndome sentarme a su lado."Hay algunas personas sentadas debajo de algunos árboles. ¿Puedes escuchar las conversaciones?"

"Sí" dije simplemente.

"¿Por qué decidiste cerrar de nuevo?" Veronica preguntó con calma.

Mordí mi paleta, tratando de retrasar la respuesta. Ya no quería ser grosero con Veronica o tratarla mal. No tenía ninguna razón para estar a la defensiva por cada palabra que me decía, pero sentí la necesidad de mostrarle que no era así,así que...

"No voy a cerrar de nuevo" dije con cautela, relatando mis pensamientos.

"Tus cambios repentinos de humor son espectaculares" se rió.

"¿Puedes por favor sacar este globo de mi mano?" pregunté extendiendo su brazo hacia ella,cambiando de tema.

"¿Qué vas a hacer con él?" Veronica sostuvo mi muñeca suavemente. Sus manos eran suaves y cuidadosas, haciéndome temblar.

"Deberías dárselo a tu novia", le dije.

"¿Y por qué crees que debería dárselo a mi novia?"

"Por qué...se suponía que estabas con ella hoy. ¿Cuál es el nombre de ella?"

"Cheryl"

"Ella se alegrará de oírte pensar en ella" Intenté sonreír "¿No crees?"

Veronica guardó silencio. Ella no me respondió, solo se quedó callada.

No podía decirle lo que pensaba y me molestó mucho. Quería saber cómo se veía, cómo brillaban sus ojos cuando se reía, o cómo su boca se comprimía cuando estaba molesta.

Estuvimos en silencio juntos por mucho tiempo. Escuché el sonido del viento balanceando las hojas sobre mi cabeza, escuché el aliento de Veronica a mi lado. El aire olía a hierba y tierra, y era agradable ser así, no hacer nada, preocuparse y no tener nada en qué pensar.El día pronto terminaría, pensé con un suspiro. Tal vez Veronica esperaba que ya no aceptara salir con ella, y ni siquiera sabía si realmente quería volver a salir con ella. El día había sido agradable, no podía negarlo, pero allí estaba Cheryl.

¿Qué tipo de chica deja a su novia a un lado para pasar la tarde con una niña ciega?

"Deberías ver el sol ahora, Betty" murmuró, su voz agradablemente dulce y profunda.

He querido ver el sol por un año.

"¿Está bajando?" Pregunté en el mismo tono de voz que ella.

"Una sombra de rosa tiñe el cielo. El color típico de la tarde. El sol sigue brillando mientras se desliza lentamente por el horizonte. Se ve enorme...Muchas personas están de pie mirándolo establecer. La luz hace que las sombras se alarguen y la mitad de los rostros de las personas se iluminan."

Cerré los ojos y contuve la necesidad de llorar.

"Es hermoso" murmuré, tragando el nudo en mi garganta, viendo la escena puesta en mi mente.

"Algunas aves cortan el cielo, pareciendo querer volar hacia el sol.Saben que está oscureciendo."

"¡Es un espectáculo!" Escuché a alguien exclamar frente a nosotros.

Veronica se rio y luego aceptó.

"Realmente es un espectáculo. Ojalá pudieras ver."

"Ya veo" le dije con una sonrisa, "Eres mis ojos, ¿no?"
Estuvo callada por un momento, así que sentí su mano acariciando mi cabello.

"Sí, soy tus ojos." Parecía un afecto fraternal. Me angustió.

Be My Eyes | Beronica AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora