12.

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-Adachi, ¿nos puedes explicar qué pasó en la huerta?.

-¿Cuántas veces les tengo que decir que no tuve nada que ver con ese maldito incendio?.

-Es difícil creerte y más cuando ya tienes antecedentes. Ustedes dos eran los únicos encargados de la huerta, nadie más se interesaría en ella.

-¿Estás seguro de eso?. Muchas personas pueden entrar a esa huerta a consumir drogas o alcohol, ¿cómo puedes culpar tan fácilmente a Yuto sin tener alguna evidencia?.

-No te metas en esto Wooseok. Vete, al parecer estos idiotas solo quieren joderme.

-Cuida el vocabulario Adachi, no creas que estás con tus amigos delincuentes.

-Maldito imbécil.- Luego de decir esto, Adachi se lanzó sobre el guardia, le pegó dos golpes, antes de que el guardia le hiciera una llave, dejándolo en el piso.

-Adachi, cruzaste la línea. ¿Qué hacemos con él?.- Al parecer el guardia ya le tenía bastante rencor a Yuto, quién sabe qué le habría hecho, o no hacía falta que le hubiera hecho algo, tal vez solo le molestaba su actitud.

-Llévalo al cuarto de aislamiento, en un rato iré.

-¿Cuarto de aislamiento? No estamos en una jodida cárcel, ¿no va eso en contra de las normas?.

-Jung Wooseok, claramente no leíste nuestras normas, bueno, dudo que alguno de ustedes lo haya hecho. A los jóvenes agresivos, como el joven Adachi, se les puede llevar al cuarto de aislamiento, para que reflexionen sobre lo que han hecho.

-Vete a la mierda, hijo de puta.- Yuto hizo resistencia que no sirvió para nada. Porque el guardia más rápido se lo llevó.

-Espero que en el aislamiento también cambié ese horrible vocabulario.

Regresé a la habitación muy enojado e impotente por no saber cómo ayudar a Yuto. En estos momentos solo quería confiar en él, sé que no sería capaz de provocar un incendio. No soporté todos mis abrumadores pensamientos y salí nuevamente de la habitación. No sabía adónde ir primero, lo único que se me cruzó por la cabeza fue ir con Hongseok.

-¡Hongseok!.- Toqué desesperadamente la puerta.

-Wooseok, ¿qué pasa?.

-Es Yuto, lo culparon del incendio y no sé qué debo hacer, estoy muy preocupado. Sé que no se llevan muy bien, pero ayúdame, tiene que haber algo que pueda hacer.

-¿Qué demonios?. Me gustaría ayudarte, pero no lo sé, Yuto me detesta y no creo que este muy feliz cuando sepa que te ayudé.

-No me importa eso en estos momentos, lo que me interesa es que me ayudes, luego lo resolverán entre ustedes.

-Está bien, supongo que se lo debo. ¿Qué haremos?. No me digas que nos convertiremos en detectives de quinta, siempre me fue mal en los acertijos.

-No te preocupes, solo sígueme, tenemos que ir primero al lugar del incendio. Por ahí comienza todo.

-No puedo creer que accedí a ayudarte, me estoy arrepintiendo.

Llegamos a la huerta, ya habían controlado el incendio y no se miraba nadie cerca. Me frustra demasiado no saber lo que había pasado. Tal vez no me importaría tanto sí Yuto no estuviera involucrado en esto.

-Y bien, ¿qué sigue, señor detective?.

-Cállate, no lo sé.

-Demonios Wooseok, estamos perdiendo tiempo aquí.

Al final Hongseok tenía razón, no había nada que hacer ahí, y nos dirigimos a nuestras habitaciones, no logré dormir nada, pensando lo peor. Ya era un exagerado y mis pensamientos lo eran el doble. Uno de los tantos pensamientos extremistas, era que tal vez estarían torturando a Yuto, no, no, eso no podía ser, tampoco es como si hubiera guardado información secreta del gobierno. Dejé a un lado mis pensamientos ridículos y me centré en encontrar algún tipo de evidencia que mostrara la inocencia de Yuto.

Fui con el rubio llamado Hyojong, tal vez sabía algo. Pero cuando llegué ahí, solo me dijo que Yuto estaba actuando de una manera muy extraña y que no sabía lo que le pasaba. ¿Le afectaría tanto nuestra conversación?, no, el Yuto que conocía no se pondría así por una tonta discusión. Estuve sentado por varias horas en el patio, mirando hacia lo que quedaba de esa rústica huerta.

-Emm, disculpa.-Me sorprendí al escuchar a esa persona, estaba tan sumergido en mis pensamientos, que no me había dado cuenta que hace un rato había un chico a mi lado.

-No quise interrumpir, pero me gustaría comentarte algo, es acerca de la huerta, sé que eras el encargado.-¿Podría ser una señal del universo?, vaya suerte cargaba, sería maravilloso si tan solo mi vida se  desarrollara tan fácilmente, como el misterio del incendio en la huerta.

-Está bien, dime.

-Yo estuve cuando sucedió el incendio. No lo malinterpretes, no fui el que lo provocó.- El chico parecía muy nervioso e inseguro, parecía que estaba debatiendo si hablar o no.

-Ya, ve directo al punto.

-No llevo mucho tiempo en este lugar y ya había un incendio, además, estuve justo en el momento en que la persona estaba encendiendo fuego a la huerta.

-¿Por qué me estás contando esto?. ¿Me estás haciendo una broma?. Si es así lárgate, esto no es nada divertido.

-No te pongas a la defensiva, como dije antes, te cuento esto porque sé que eras el encargado y porque noté que llevas varias horas mirando hacia la misma dirección, hombre, no quitas tú mirada de esa huerta.

-No tiene nada que ver contigo, y no sé qué ganas al ayudarme, además eres nuevo y dudo que sepas quién era el piromano.

-Pensé que podría ayudarte al menos a buscarlo, no sé quién es, pero si me acuerdo de su rostro, de algo te puede servir.

-Esto es mejor que no tener nada. Aún falta mucho para que sea el toque de queda. Andando.

-¿Adónde?.

-A buscar a esa persona.

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Gracias por leer <tres

Un poco de diversión [WooYu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora