Infierno. Es la palabra que describe la vida de Marisa, una pequeña de apenas 10 años que lo tenía todo pero su vida se redujo a tirar del gatillo para sobrevivir y luchar contra la banda de terroristas que arrebato lo que tanto amó. Sus ideales es...
¿Ser asesinada o asesinar? Esa pregunta no dejaba en paz mi cabeza pero tengo que sobrevivir... Tal vez Niki siga viva y si todavía tengo esa esperanza, debo sobrepasar cualquier prueba. Dispare dos veces en el torso, conseguí 15 puntos, luego dispare en la cabeza, me sorprendió darle en la X -Oh.. muy bien hecho, el era un enemigo.- le devolví el arma mientras los demás niños murmuraban, quizá el único que no me miraba aterrorizado era el chico castaño de la primera posición. ¿Katherine hubiera querido el primer lugar aún sabiendo que tendría que matar a alguien?
Llegué al piso y me encerré en el baño, estába llorando y respirando demasiado rápido ¿En serio mate a alguien? Soy un monstruo, acabo de decidir el futuro de una persona, ahora no es más que un futuro inexistente. Pensar en eso me hizo vomitar, ¿Toda mi vida haré esto? ¿Cortaré el futuro de las personas? Alguien tocó la puerta, salí del baño y vi a Katherine, parecía algo avergonzada.
-Marisa, perdón.- dijo Katherine mirando al piso -No te preocupes, entiendo lo injusto que fue, ¿Cómo está Lucia?.- dije escondiendo mis sentimientos -Esta muy mal, ya van dos pruebas que no pasa, una más y morirá..- se hizo un silencio incómodo
Me acerque a Lucia, ella parecía devastada -¿Lucia..? Tranquila, estoy segura de que formaremos equipo nosotras tres.. -Gracias Marisa.- ella no dijo más, sabía que eso bien podría ser mentira -¿Saben lo que un equipo debe tener?.-Dijo Katherine siguiéndome el juego. Ambas sabemos que es más alta la probabilidad de que muera a qué pase las pruebas, pero queríamos hacerla sentir mejor -¿Confianza?.- dijo Lucia -Asi es, ¿que tal si nos ponemos apodos?.- dije ahora yo, es algo básico pero nunca lo hemos hecho -Tu puedes ser Mar.- dijo Lucia -Tu Luci.- dijo Katherine -Y tu Katy.- las tres reímos por lo tonta que es la situación o al menos yo sentí que eran risas falsas, quisiera volver a reír como antes con mamá y Niki.
Fuimos a clases como en la escuela, quisiera pensar que son las mismas materias. -Hola chavos, seré su maestro, la materia se llama "Fraude I" Hoy les enseñaré a mentir y que parezca convincente pero antes, quiero que todos aquí feliciten a Marisa porque ya les lleva ventaja, hoy por la mañana como premio por quedar en Primer lugar se le dió la oportunidad de realizar su primer asesinato.- todos estaban horrorizados y me miraron con asco, uno de mis compañeros que ganó un puesto en la segunda práctica levanto el brazo -¿Asesinar con frialdad es un acto que se deba felicitar?.- el aún tenía cara de asco, justo la cara que las personas ponen después de pisar caca. -¿Fue con frialdad?.- cuatro de los cinco presentes asintieron -Oh, está chamaca me llena de orgullo.- soltó una carcajada y lanzo una mirada de muerte que asustó a más de uno -Aquel que no pueda asesinar, será asesinado, creo que Marisa ya comprendió ese punto.
-Bueno, comencemos con la clase, Marisa y Darcy pasen al frente.- no quiero meterme en más problemas así que me levanté lentamente -Marisa, le dirás una mentira a tu compañero y viceversa, yo les daré preguntas.- asentí, realmente si he mentido, cuando hacía travesuras siempre culpaban a Niki. -Marisa, ¿Alguna vez has asesinado?.- la respuesta era obvia, pero pude fingir algo de miedo -No, nunca lo haría.- dije con un miedo fingido -Muy bien, eres buena. ¿Darcy alguna vez has asesinado?.- Darcy se congelo, ni siquiera hablo -S-si.- tartamudeo y estaba moviendo sus manos -Mal, vayan a sentarse.- fui a sentarme en lo que el negaba decepcionado.
-Morros, ustedes ya no tienen familia, ahora deben sobrevivir, necesito que lo entiendan y bueno, para mentir bien habrá que ir directo a lo que queremos comunicar pero tampoco ser muy breves, no dar explicaciones demasiado largas es lo ideal, traten de eliminar el nerviosismo, para que luzca convincente habrá que fingir ps la emoción que quieres transmitir, de tarea les dejo mentir pero al final, deben decir que era mentira, no es necesario mentirle a los compas.- termino la clase y se fue.
-Hola chicos, es la primera vez que los veo y me presento, mi nombre es Bruno, mi especialización es el cuerpo humano, pero no vayamos a lo complejo, hoy les enseñaré primeros auxilios. -Lo más escencial es mantener la calma para poder pensar con claridad, dependiendo de la emergencia. Ahora todos inhalen y exhalen.- Al menos este profesor parece bastante pacífico.
-Bien, después, si es alguien de su equipo y no está conciente se verificarán sus signos vitales en su cuello o muñeca, ahora háganlo y cuenten sus pulsaciones hasta que yo les diga.- comencé a hacerlo, tuve alrededor de 24 pulsaciones en el tiempo que nos dió, no estoy segura porque al inicio no me salió. -Bien, eso fue en 20 segundos y si lo multiplican por 3 será por minutos.
-Recuerden, hay diversos tipos de accidentes, hoy veremos el de la hemorragia.- dicho eso, tomo un cuchillo filoso y se apuñaló la pierna mientras reía, todos lo mirabamos con terror. Definitivamente está loco, es como los demás profesores o peor -Queridos alumnos ¿Me dejaran morir?.- uno de mis compañeros intento salir por ayuda pero la puerta estaba cerrada.
-Primero, ¿Que tipo de Hemorragia es? ¿Interna o Externa?.- todos estaban demasiado conmocionados por la sangre -Externa.- Respondí y el sonrió -Correcto mi pequeña asesina.- de todos los apodos, ¿Por qué asesina? -¿Quien quiere venir a tomar mis pulsaciones? Corran, me estoy desangrando y si eso sucede, moriré JAJAJAJA.- Elian rápidamente fue a tomarle las pulsaciones, aunque se veía asqueado.
-Por ahora está bien, ¿Que sigue?.- dijo Elian y el maníaco sonrió mostrando los dientes -Un torniquete, ¿con que lo harían? -¿Ropa?.- dijo Katherine quitándose su suéter
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-Rapido, si me desangró no conseguirán la llave para salir de aquí y moriremos todos.- uno de los chicos se desmayo después de escuchar eso, otros estaban en shock, tomé el suéter de Katy que se encontraba en shock y comencé a hacer el torniquete, no creo que lo haya hecho bien porque seguía sangrando. -Dame la llave.- El sonrió con mayor malicia -Y si no quiero ¿Que harás?.- tome el cuchillo y lo amenace -Podemos hacerte otro torniquete, ¿Que dices profe?.- el comenzó a reír y nego, le encaje el cuchillo en su pierna sana y la sangre me salpicó, pero estaba decidida a salir antes de que la sangre volviera locos a todos, el soltó un pequeño quejido -Pero que salvaje eres pequeña, esa expresión me facina, la llave está en el cajón de mi escritorio.- Mientras todos me miraban como un bicho raro, Elian intento abrir el escritorio pero estaba cerrado -La llave -En tu corazón, dónde estés yo estoy.- estaba cantando, parecía que desangrarse no le afectaba. -Bien, cómo no te afecta... Chicos, tenemos que forzar la cerradura del escritorio. El profesor se levantó y me entrego la llave, ¿Cómo pudo levantarse con ambas piernas apuñaladas? -Eres una buena niña aunque un poco salvaje.- comenzó a reír de nuevo, creo que debo acostumbrarme a esto.
Después de todo el escándalo, las tres nos encontrábamos en el dormitorio, comimos algo de la comida enlatada porque ninguna sabía cocinar y decidimos ir a dormir, mañana sería otro día de locos.
