Frágil Corazón

II.- Nueva Manada

Las lágrimas caían sin permiso de sus ojos y no paraban, Stiles conducía hacía el pueblo vecino. Peter le había dicho que el alfa se reuniría con él a la entrada del pueblo.

Su corazón dolía, sabía que en algún momento todo lo que había guardado dentro de su corazón tendría que salir y aunque la manada se haya comportado de esa manera él no podía odiarlos, los amaba y eran su única familia y no los iba a dejar pero necesitaba estar solo, lo único que lo alivió por decirlo así fue la mirada de dolor de Derek, sabía que el lobo no soportaba verlo sufrir, por lo menos lo aliviaba que Derek estaba triste por él pero lo entendía era mucha información que analizar.

Ya más tranquilo soltó un suspiro y esbozó una sonrisa, iba empezar algo nuevo y tenía que ser positivo, lo necesitaba. Se había desahogado y le había quitado un gran peso de encima.

Algo que caracterizaba a Stiles era su fuerza y su gran y puro corazón a pesar de todo lo que había pasado, todo lo que había sufrido no podía odiar a su padre o a la manada; siempre querría a su padre y o perdonaba pero esperaba no verlo de nuevo prefería quedarse con los pocos buenos recuerdos que tenía junto a él.

Al llegar a la entrada se encontraban dos hombres esperándolo así que bajó de su jeep.

El primer hombre rubio de ojos azul cielo de 27 años, definitivamente era el alfa, pensó Stiles. El segundo era castaño de ojos azul de 23 años.

- Alfa Michael - dijo Stiles con respeto

- Hola Stiles, no tienes que portarte aquí, eres muy importante para Peter y él es un gran amigo. Es un gusto conocer a su cachorro - dijo el rubio sonrojando al menor

- Gracias por recibirme, Pet es el mejor

- No hay de que, él es uno de mis betas, Ryker - presentó el alfa

- Un gusto Stiles, Peter nos ha contado muchas cosas de ti, eres increíble, has pasado por mucho. No todos los humanos lo soportan - le dijo Ryker emocionado

- Gracias, supongo

- Bien Peter me explicó tu situación. Te quedarás en la casa de la manada y trabajarás en mi restaurante y otro de mis betas dijo que en las noches podrías trabajar en su bar. Peter también me comento que estas en último año así que ajustaremos tus horarios para que puedas estudiar y trabajar - le explico el rubio

- Muchas gracias de verdad - dijo el castaño esbozando una gran sonrisa

Michael lo atrajo entre sus brazos en un abrazo, ninguno de los lobos había desapercibido el ligero olor a tristeza y ojos rojos del chico. Stiles sintió aquel abrazo cálido y reconfortante, se sentía familiar y cálido. Al separarse Ryker se acercó y revolvió el cabello del chico.

- Ahora vámonos, es viernes y tenemos que presentarte a los demás e instalarte - le dijo el alfa dirigiéndose al jeep del castaño

Stiles condujo por unos momentos hasta el bosque donde había una casa bastante amplia y hermosa.

Al bajar los esperaban tres hombres y dos mujeres. En cuanto el castaño bajo del jeep fue rodeado por los brazos de las chicas y un chico.

- Eres súper tierno Stiles, toda una lindura - le dijo una de las chica, era rubia de ojos verde de 18 años

Se separaron del castaño, el cual estaba sonrojado al ser recibido de esa manera. Al igual que los otros lobos notaron los ojos rojas del chico y vieron a su alfa, Michael negó con la cabeza.

- Chicos, él es Stiles, preséntense - les ordenó el mayor

- Yo soy Leah - se presentó la rubia

- Soy Ava, un gusto castañito - se presento una chica pelirroja de ojos verde de 20 años

- Micah, un placer - se presentó un chico azabache de ojos miel de 19 años

- Hunter, a tu servicio - dijo un chico pelirrojo de ojos gris de 21 años

- Si alguno de estos locos te molesta no dude en decirme, soy Joseph - se presento un chico castaño de ojos verde de 20 años

- Un gusto chicos, gracias por aceptar que viva aquí prometo que no estorbare

- No te preocupes por eso castañito, nos han dicho muy buenas cosas de ti además eres especial - le dijo Ava abrazándolo por los hombros

- Entremos, estoy seguro de que Stiles está cansado y debemos de aclarar lo de sus horarios de trabajo - dijo Michael

Todos asintieron ayudando a Stiles con las pocas cosas que tenía llevándolo a su habitación, la cual era bastante amplia, sus paredes eran blancas y una negra, la cama era matrimonial, había un escritorio, armario, un pequeño librero y un pequeño balcón.

- Esto es demasiado - dijo Stiles impresionado

- Tranquilo, vamos a mi oficina - le dijo el alfa

Stiles y Hunter entraron a la oficina junto con Michael. El alfa se sentó detrás de su escritorio mientras que los otros dos frente a él.

- Bien Stiles tu clases son de 7 de la mañana a 3 de la tarde por lo que trabajarás en el restaurante de 5 a 8 mientras que en el bar estarás de 9 a 12. Los sábados trabajaras solo en el bar de 4 a 1 y el domingo será tu día de descanso. Es un horario apretando y si se te complica en cualquier momento te ayudaremos, Hunter es el dueño del bar por ende tu jefe. Te cobrare una pequeña renta en la que vendrá incluida la comida ¿Estás de acuerdo? - le dijo Michael

- Es excelente, gracias - les dijo Stiles

Los tres salieron de la oficina encontrándose a los demás betas.

- Stiles una cosa me gustaría que Micah te acompañe al instituto, ya que tienen la misma edad y a él no le molesta, se que eres parte de la manada Hale-Mccall - todo notaron la mueca de tristeza del chico - pero ahora también eres parte de mi manada y no me siento cómodo dejándote solo

Al escuchar el pecho de Stiles se lleno de alegría, se sentía querido. Ellos lo querían en su manada sin importar que fuera un humano e incluso lo consideraban alguien especial.

- Me siento honrado de ser parte de tu manada pero si aún seré parte de mi manada original después de todo son mi familia - dijo con la voz entre cortada recordando lo que había pasado horas antes

Leah se acercó a Stiles abrazándolo y llevándolo a los sofás de la sala principal, los demás se sentaron a su alrededor.

- Pequeño cuéntanos que te sucedió - le dijo Leah con cariño

Durante lo que quedo de la tarde Stiles les habló acerca de todo lo que le había pasado desde que Scott fue mordido, incluso les habló de sus padre y de su enamoramiento por Derek Hale. Les contó acerca de un secreto que ni siquiera la manada sabía, bueno la manada no sabía muchas cosas acerca del pequeño humano.

Ellos estaban molestos por cómo había tratado al castaño y se habían prometido ese día que querrían y protegerían al humano incluso de su propia manada.