One-shots EliteCraft

La isla

Un viaje de fin de curso a Nueva Zelanda en avión...¿Qué podía salir mal?

Estábamos ya montados en el avión, a mitad de recorrido, solo quedaban 4 horas para llegar al destino. La clase estaba bastante ansiosa, y los profesores no podían controlarnos a todos.

-¿Qué pasaría si este bicho se llega a caer?- preguntó la chica de pelo rosa, Nia. Ella era la típica alumna que sacaba buenas notas siempre pero que se llevaba bien con todos.

- Saldremos en la tele...- bromeó Hardy aunque a Nia no le hacía mucha gracia. Hardy, el chico que nadie sabía cómo aprobaba, pero lo hacía. Su compañera de asiento le pegó divertida, ella era Lili, le costaba mucho aprender las cosas y a menudo le ayudaba ya que se extresaba demasiado, pero a la larga era muy buena alumna.

-¿Cómo carajos se va a caer esto?- preguntó Cris alternando la mirada entre los participantes de la conversación. Él estaba de pie, igual que todo su grupo de amigos el Imperio 51, eran los que peores notas sacaban, según ellos, una perdida de tiempo estudiar.

- Mira, solo tiene que explotar ese motor de allí...- explicó Killer, él era mi mejor amigo, también buen alumno.

- Si explota la explosión llegaría justo hasta allá, matándote al momento - dije señalando todos los posibles muertos.

- No me asustes Rich...- me dijo Nia cambiándose de sitio.

Y como si fuese una película, vi como el motor se rompía en pedazos, y algunos de ellos caían. Todos gritaron asustados, y empezamos a caer.

*

Desperté adolorido, me costó ponerme en pie, pero cuando lo hice y supe dónde estábamos me quedé quieto de la impresión. Estábamos en una isla, el avión totalmente partido, oía los gritos de mis compañeros y veía a algunos de ellos correr en distintas direcciones.

-¡Tenemos que ayudar a los heridos!- me gritó Kaumaru desde lejos, asentí y comencé a seguirle viendo el panorama.

Horas después nos reunimos todos los supervivientes, ningún profesor, nadie de vuelo... Solo nosotros, los alumnos.

- Yo propongo que alguien sea el líder, que nos guíe y ayude - dijo Cecililla.

- Creo que tiene que ser el delegado de clase...- respondí desinteresadamente.

- Claro, cómo eres tú...- dijo Gona molesto, no me llevaba mal con él, solamente teníamos nuestros roces.

- Y el subdelegado también podría ayudar...- respondí mirando a mi compañero.

-  Y yo que me apunté por broma...- contestó Farfadox resignado.

- Por pendejo - le espetó su amigo Conter.

- Propongo una norma muy clara, nada de adentrarse dentro de la maleza, solo podemos estar en la playa, no sabemos lo que puede haber ahí...- propuse sabiendo que me iban a odiar por decir eso.

-

Está bien...- dijeron todos al unísono.

Nos dividimos por grupos para buscar refugio, comida, ropa o supervivientes.
Muchas personas tecleaban en su teléfono intentando avisar de nuestra situación, pero era imposible, no había cobertura.

*

Habían pasado varios días desde que nos habíamos estrellado, ningún barco, ningún avión, ningún helicóptero... Nada podía salvarnos de este infierno.