08 DE DICIEMBRE
1:20 AM:
Ya no entiendo nada, mi mente espera ansiosa por poder tener algún tipo de distracción con cualquier cosa, me siento mal últimamente pero concretamente no entiendo que clase de sentimiento guarda mi interior. Estoy muy asustada, todo es completamente incierto y yo muero de miedo, tengo tantos pensamientos en mi mente. Comenzando por el sueño tan intrigante que tuve hoy en uno de mis colapsos matutinos en los que duermo todo el día intentando silenciar mis pensamientos, seguido de la reciente muerte de aquella pequeña ave que me acompañó durante el transcurso de uno de mis puntos más bajos, donde nadie mas estuvo ahí para mi. Continuando también con la manera en que quise ahogar mi tristeza y callar mis culpas internas queriendo refugiarme en la peor de las salidas que pude, tal vez también deba mencionar el estado de depresión en el que me encuentro cada que dejo que mi mente se adueñe de mi una vez mas, y todo esto lo puedo concluir con los moretones que cubren mi cuerpo justo ahora, con cada situación mi mente se llena de mas y mas pensamientos. Estoy saturada, llena de miedo, y siento que poco a poco voy tornándome una persona que comienzo a dejar de reconocer.Estas cosas me las confirman personas a las que aun les dirijo la palabra dentro de mi pequeño circulo social que se abre cada que mi peor versión sale a la luz. Estas personas me mencionaron que mi semblante cambio, que yo cambie, y seguido de esto surgía aquella pregunta repetitiva el «¿donde había quedado yo?», quiero llorar justo ahora y enorme nudo en mi garganta contiene ese llanto que hace todo por salir cual jaula contiene a un reo, me estoy hundiendo otra vez.
Mi corazón no deja de cargar estas emociones así que por hoy dejenme llorar hasta que gota a gota alivie el dolor que siento y pueda fluir como las aguas cristalinas del río trayendo a mi la paz y armonía que puede proyectar ese paisaje
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Mil y un noches - Diario de una chica inestable [Editando]
Randomuna recopilación de escenarios que no dejan de pesar en el alma. La esencia de estos escritos desaparecerá como el aroma del café por las mañanas.