08 DE DICIEMBRE
3:12 AM.
Mientras mis lágrimas se desbordan incontrolablemente después de haber sido retenidas por tanto tiempo puedo recordar a la perfección aquel sueño que me ha dejado pensando con mucho detalle respecto a todo lo que pasa en mi entorno algo que me parece bastante perturbador ya que este sueño se convirtió en una mezcla de mis muchos miedos con mis pocas soluciones para cada uno de ellos. Mi subconsciente es tan paranoico...En un inicio aparecía yo intentando huir de mis problemas, como siempre me desaparecía de la vista de todos por algunas horas y como ya ha sido costumbre, apenas y era perceptible ante los ojos de los demás. Luego de ello me encontraba al parecer en los mismos lugares que frecuentaba cada que me sentía mal respecto a algo así que decidí variar un poco. Quise ir a una pequeña plaza que se encontraba prácticamente cerca de mi casa y así logre pasar algunas horas, después de eso iba camino a la biblioteca a leer un libro mientras tomaba un café caliente pidiendo así un "macchiato" para recordar el dulce sabor que comencé a perderle a la vida cuando comencé a salir sin compañía buscando ocultarme de todo aquello que quebrantaba mi corazón. Y con cada sorbo, acudía a mi memoria uno de los recuerdos mas dulces que iba teniendo con el paso del tiempo, todo aquel momento que se impregno en mi corazón pero mi tristeza se quería empeñar en opacar.
Después de eso salí una vez mas a contemplar el paisaje buen tras iba de regreso a... Bueno, realmente no tenia algún lugar concreto al cual volver pero al menos en ese sueño volvía hacia la plaza donde comencé. Dos chicos se sentaban al lado mio y comenzábamos una partida de Mortal Kombat, dentro de mi sueño la mayoría de cosas iban saliendo bien pese a que se trataba de una fuga de mi mente a otro lugar. Todo era felicidad hasta que en aquella plaza hizo su aparición el mejor amigo de mi actual pareja hablando pestes de mi, solo me quedaba permanecer sentada mientras observaba y escuchaba todo desde mi lugar. Seguido de el entraron sus demás amigos diciendo uno a uno que no valía la pena para el, que solo lo había hecho perder el tiempo en algo inservible como lo era yo, que era lo peor que había cruzado por su vida, recalcaban lo buenas que eran todas aquellas chicas que alguna vez aspiraron a algo más con el, que a su lado yo era insignificante, que aun no lograban comprender que hacia el conmigo. Mi corazón se desmoronaba mientras mi rostro permanecía inexpresivo.
Juraba que había dejado mi teléfono en casa pero un sonido me saco de aquella escena donde yo permanecía atónita, era un mensaje de el diciendo:
"Haz sido mi peor perdida de tiempo, la peor persona que he podido conocer y lo peor que le podría pasar a alguien. Jamás vuelvas a buscarme por favor, eres demasiado poca cosa y realmente esperaba mas de ti, pero como era de esperarse FALLASTE."
En ese momento colapse y quise morir, iba corriendo hacia un rincón como siempre me orilla a hacerlo mi debilidad. Sorprendentemente tal cual ocurrió alguna vez Bastian apareció, llore por mas de una hora, acababa de perder al chico que creí que me amba y no sabia siquiera el porque. Mis ojos estaban inundados en lágrimas y mi corazón roto en miles de pedazos.
Bastian intentaba consolarme pero no fue la la mejor de las ideas, intento besarme, pedirme una nueva oportunidad y hacerme sentir que todo eso acabaría volviendo a su lado. Mi dolor me cegaba en todos los sentidos y solo me quedó sacar todo aquel pensamiento que se había enterrando en mi, cual sepultura olvidada, pude decirle uno a uno todo aquello por lo que estaba eternamente agradecida con el y siempre tendría un lugar en mi corazón, pero que ni con todo el cariño, aprecio y nostalgia del mundo podría volver a mirarlo del mismo modo. Entonces y solo entonces fui capaz de sacar pensamientos como lo mucho que bajo mi autoestima, lo mal que me hizo sentir, el daño psicológico y emocional que me había causado, entre otras cosas. Claro que lo seguiría apoyando toda mi vida por el cariño que prevalecia ahí y todos los momentos en los que estuvo incondicionalmente para mi, pero que ese cariño no era sinónimo de poder volver a verlo como una pareja, le pedía y suplicaba a gritos que se marchara con cualquiera de sus otras chicas, que yo ya era un tema que había pasado de ser relevante a ser algo ambiguo y vago entre sus recuerdos, le pedía que me tratara tal cual me hizo sentir con sus acciones pasadas y una vez mas... Lo volví a alejar.
Me encontraba hasta el tope de enojo, tristeza, decepción y miedo. Bastian me tomo de la mano sin decir nada y me llevo con una chica que jamas había visto en mi vida pero que al parecer era una "ayudante emocional" como el la llamó, no creí en ello así que decidí caminar a la escuela pero sin saber como o porque, la escuela ya no existía, todo me resultaba un tanto extraño incluso mis conocidos me veían como completa extraña, y los pocos que me recordaban me dejaron de lado por completo.
Todo era extraño y doloroso pero a su vez comprensible, llegue a un punto donde todo y nada tenían sentido, opte por ir rumbo a casa con el corazón hecho trizas pero intentando comprender todo. Para sorpresa mía resulto también que no tenia ni siquiera una casa; según el contexto ya no tenia familia, habíamos peleado tan horrible que como última decisión acordaron que se irían y me dejarían a mi suerte sin volver a saber unos de otros. Ya no me conocía nadie, ni siquiera yo.
Volví a como había iniciado, vagando de un lugar a otro preguntándome que había pasado. Y de pronto todo cobró sentido en mi mente, llegaban a mi uno a uno los flashbacks de cada cosa que había pasado, hasta que por fin logre recordar que desde el principio había estado huyendo de todo porque tenia claro todo lo que pasaba a mi alrededor. Subí unas escaleras lo mas rápido que pude hasta llegar al punto en donde sentía mis piernas desgarrarse tal cual lo hacia mi corazón en esos momentos, seguí corriendo hasta sentir lo alto de un edificio donde al estar en la cima me arrinconé débil y temerosa mientras mi cuerpo se deslizaba por una pequeña y blanca pared. Al instante se oyó una vez más esa voz familiar diciéndome
–dejame ayudarte– en el tono más suave y dulce que haya escuchado.
subí lentamente la mirada y ahí estaba esa chica de nuevo, al no tener absolutamente nada mas que perder la deje sentarse al lado mio mientras le contaba fragmentos de lo que pasaba a mi alrededor mientras en un desesperado intento por sentir calma me acogía entre su regazo con un amor y ternura que jamás había sentido. Al instante el edificio comenzó a desmoronarse.
–tranquila, yo te voy a salvar— me susurro con su suave voz. –pero no se ni siquiera quien eres, vuelve conmigo por favor— dije entre sollozos.
– yo se quien eres y como encontrarte, te buscaré siempre que me necesites— respondió una vez más con un tono suave y dulce que me reconfortaba.El edificio seguía colapsando y ella tocó mi frente
–Nos veremos pronto— me dijo con una sonrisa suave y delicada en su rostro.
Todo se tornó blanco y en ese instante pude despertar.
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Mil y un noches - Diario de una chica inestable [Editando]
Randomuna recopilación de escenarios que no dejan de pesar en el alma. La esencia de estos escritos desaparecerá como el aroma del café por las mañanas.