Dear Friend || YoonKook

62. Entrada: SUGA | 16#

Se reunió el clan de las rarezas, edición especial. Me sentí un moco entre tanto crecimiento, encanto y sofisticación. Esto es lo que pasa cuando estudias algo que tiene que ver con ciencias y otro poco de humanidades. En lugar de lucir estrambótico y distinto luces acabado con ganas de más café y llorar hasta secarte. Jungkook si llego como un purasangre de humanidades. Éramos un grupo más que pintoresco en esa sala para comer.

Creí que tendríamos dificultades a la hora de hablar. El contacto ha sido un poco cortado por trabajo y estudio, pero nos pusimos a hablar como unos locos y parecía que nada hubiera cambiado. Que seguíamos teniendo 15-16 años, veníamos de alguna competencia o un entrenamiento de basket y porrismo... Todo sigue igual

Lo extrañaba mucho.

De verdad que lo extrañe.

Y me hizo muy feliz que volviera a suceder.

Aún con el desastre que fuimos y la tan particular foto que nos tomamos para inmortalizar la reunión que sería una de muchas. Sin la escuela como excusa para vernos y teniendo a un pequeño trio (Hoseok, Taehyung y Jimin) con exceso de ganas de vernos posiblemente los tenga respirando en mi nuca para pasear.

Todo bien mientras no me interrumpan componiendo, sino los mato.

O solo a Tae. Hoseok es muy lindo para que lo mate y Jimin muy tierno para ponerle una mano encima.

¿Ya mencioné que soy un moco entre tanta perfección? Pues aquí está de nuevo.

62. Querido amigo...

Da continuos toques a la mesa, impaciente. Llegó más temprano de lo que debía y por desgracia le jugó en contra. Se revuelve el cabello pintado de vinotinto y mira el reloj. Quedan aún varios minutos para que los demás lleguen. Saca de su bolso un cuaderno y escribe todo lo que le viene a la mente. Últimamente está teniendo un impulso creativo tremendo. Tanto que al menos la mitad del álbum de un grupo en la agencia que trabaja, es suyo. Tanto lírico como instrumental. Le hizo mucha ilusión eso.

Pues no creyó que lo tomarían tan en cuenta al estar empezando.

—Oh, Yoongi.

—Hola. —Saluda tímido a Namjoon. No creyó que sería el primero en llegar. No ha cambiado absolutamente nada. Quizá el hecho de que llegara pareciendo actor de Hollywood.

—Vine con el miedo de que el último en llegar pagaría.

—Deberíamos hacerlo.

—Cruel.

—Tacaño.

—Just a Little.

La puerta se vuelve a abrir y ahora entra el que es efectivamente modelo y luce como uno. Tan etéreo y perfecto como es costumbre. Jin con cabello negro, gafas y porte principesco.

—Ah~ Mi pequeño mortal y el gigante mortal. —bromea dejando el abrigo en la silla y tomando asiento.

—Eres al único que no extrañé. —Toma del agua que le sirvieron hace un rato.

— ¡YAH! NIÑO IMPERTINENTE ¿QUE TE SUCEDE? CUALQUIER OTRO EN TU LUGAR AGRADECERIA LA COMPAÑIA DE ESTE HERMOSOROSTROPEQUEÑOMALCRIADOINSOLENTE. — Namjoon se cubre la cara, riendo a más no poder y Yoongi por igual. El más alto golpea la mesa, un salero se cae y el silencio viene de su parte pues los otros dos siguen riendo.