Esa chica con ojos inyectados en sangre,
esa misma chica que buscaba aceptación,
esa pobre chica que deseaba ser alguien,
esa triste chica que era reinada por la desolación.¿La recuerdas?
Caminaba junto a ti en el pasillo del colegio.¿La extrañas?
Te daba las respuestas del examen.Era una patética chica que quería atención,
atención que nunca recibió.
Era una chica que deseaba amor,
amor que nunca consiguió.Creia en los cuentos de hadas de niña,
se destrozaron esos sueños al crecer.Pensaba que sería fácil la vida,
no podía creer lo ingenua que pudo ser.Su familia no la quería,
no tenía amigos,
en su escuela no existía,
su perro era su mejor amigo.Ahora que has escuchado de ella
te alegrará saber que ya no existe,
esa chica sumergida en tristeza
dejó de estar triste.Sus ojos llenos de lagrimas ya no existían,
su semblante apagado ya no existe,
su tristeza ya no existe,
esa chica patética ya no existe.No miento, ya no existe.
Dejó este mundo un 24 de febrero,
solo el cielo se mostró triste
que a nadie le importo es certero.Pensé que descansaría en paz,
pero en ese mundo nadie me extraña.
Ahora que sabes de mí y demás
¿Tú me podrías extrañar?