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Después de su desayuno, yuna continuo con su labor de investigación y redacción de la misma para la conferencia en la universidad donde era investigadora por más de dos años, en tanto Eunha lavaba los pocos platos y utensilios que usaron. Al cabo de unos minutos una leve punzada comenzó a molestarle en la parte baja del estómago; en ese instante Yuju quien fue por un libro que había leído antes de dormir cruzo por la pequeña cocina y noto la molestia en su chica.
¿yeobo? ¿todo bien? ---
Ne, solo un pequeño dolor --- dejo el libro sobre la barra, alcanzado a su novia mientras le abrazaba por la espalda.
¿es muy fuerte? – las punzadas comenzaban a ser continuas, la bajita solo afirmo
Ne, iré a recostarme antes tomare una pastilla... si no mejora te aviso – se separó y le dio un corto beso en los labios. Yuna suspiro un poco triste, quería hacer sentir mejor a su chica, pero aún le faltaban algunas cuartillas para terminar.
Al entrar en su habitación, Eunha paso a su tocador buscando detrás del espejo esa pastilla que le ayudaría a mejorar el malestar. Una vez que la encontró el medicamento saco una y camino a su cama, del buro tomo algo de agua que siempre tenían a la mano en una jarra; un trago y paso la pastilla. Se recostó dando tiempo a que surtiera efecto, se acomodó de lado haciendo así menos presión en su vientre.
Pasaron más de 20 minutos y el dolor fue aminorando, pero no del todo permaneció más tiempo del pensado en cama, comenzaba a pensar que visitar al médico era la siguiente opción... la bajita pensó por un momento en los alimentos ingeridos y con ello encontrar tal vez la causa de aquel malestar.
"Fresas" parecían tener un buen color, las uso para su cereal, pero ella misma las miro al final con un poco de desconfianza. Estaba decidido de seguir una hora más así le pediría a Yuju que le llevara a ver a un médico.
La puerta de su habitación se escuchó abrir, sabía que su novia la vería en algún momento al no volver a la sala. Pero sin pensarlo sintió algo tibio en su vientre, abrió los ojos y miro la bolsa, luego a su novia quien con sumo cuidado sostenía tan peculiar artículo.
Si no mejoras con esto... -- Eunha se giró para quedar boca arriba. – quizás con esto se sienta menos – y la más alta deposito un beso en la frente, logrando sacar una sonrisa a su novia.
