부산

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—Despierta, vago— llamó el hombre mayor a Yeosang haciendo que se despertara rápido y abriera un ojo en señal de que escuchó —Te espero afuera— y sin mas salió de la habitación

El pelirosa lo pensó y era mejor ir y que hablaran o discutieran todo lo mas rápido posible.

Miró la hora y eran mas de las doce del mediodía, se vistió, se preparó todo en el baño, salió buscando una banana y salió.

Miró el patio y vio a su padre sentado en la sombra de un arbol, al parecer su mamá habia salido, así que si sale algo mal, está solo.

—¿Qué quieres hablar?— se paró al lado sin mirarlo y sin intenciones de quedarse por mucho

—Hablemos como unas personas civilizadas— habló sin mas, mirando el horizonte

—Lo dice el que insulta a una comunidad entera de su misma especie pero con gustos diferentes— contra atacó sin pensarlo

—Eso es diferente— aún ni siquiera lo miraba

—Es lo mismo, genio— suspiró y empezó a pelar la banana —Ya, dime que quieres—

—¿Por que ese color?—

—¿Qué tiene de malo?— se agarró un mechón en intento de mirarlo —Es solo un color—

—¿Eres gay?— preguntó con temor mirándolo

Yeosang se limitó a reír mientras se metía por la boca media banana sin masticar y la sacaba chupandola.

—¿Tengo un aura gay o que? Digo, para que pienses eso— sonrió ladino

—Tienes agallas, pero no cerebro— se levantó aún mirándolo con asco como comía la banana de una forma no tan normal —Pero lamento decirte que tu valor no dura mucho— Yeosang lo miraba dudoso, pero esa mirada cambió al instante que la mano cereada de su padre golpeó cerca de su ojo dejándolo anonadado en el piso —Solo eres un asqueroso marica que no sabe defenderse— le susurró de cerca, y un olor repugnante de alcohol invadió sus fosas nasales

Eso se pondría peor si no hace algo rápido, ya que es un patio cerrado con muros, nadie lo ayudaría, porque nadie lo ve.

Intentó levantarse pero un mareo lo volvió a dejar en el piso, los golpes no tardaron, golpe, tras golpe, pero solo en lugares donde no se vería las marcas. O eso creía.

—A ver si con esto se te pasa lo trolo— rió seco —Ni se te ocurra decirle a tu mamita linda o terminará igual— susurró a su oído dejando nuevamente rastro de alcohol en el aire —Diecisiete años tirados a la basura— escupió en el pasto —Una sola palabra de esto salida de tu asquerosa boca y haré dinero con tu trasero— quedó parado como si pensara en algo —No creo que den mucho, solo son huesos, huesos sin carne, dan ganas de vomitar por como se ven— fue lo ultimo que dijo y se retiró del patio trasero, dejándolo solo hasta escuchar la puerta delantera cerrarse fuerte

Se había ido.

Intentó levantarse con la fuerza que tenía aún, estaba acostumbrado a ese trato, ocurrió toda su vida, ya sea por el o por los chicos de su escuela, pero no le afecta, aún tiene sus caídas de depresión y ansiedad que esta intentando convivir con eso.
El solo queria cumplir la mayoría de edad y así poder trabajar para mudarse con los pocos ahorros que tiene a otra casa, lejos de ese hombre.

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⏰ Última actualización: Jun 25, 2020 ⏰

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Sentimientos encontrados - SeongSang -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora