𝐇𝐄𝐀𝐓𝐇𝐄𝐑 ── byler

05┃𝘱𝘳𝘦𝘴𝘦𝘯𝘵.

─ ¿Tal vez un perfume? ─ pregunto Tom viendo las vidrieras. ─ ¿Crees que a ella le guste? ─ pregunto.

─ No lo sé, ella es más de videojuegos y eso, tal vez podríamos comprarle un nuevo juego de mesa o un disco. ─ contestó Sophie.

─ ¿Quien es la chica? ─ preguntó Will, todavía tenía nervios y estaba callado. ─ ¿Tu novia? ─ le preguntó a Tom.

El rió. ─¿Que? No hermano, no es mi novia. ─ contestó y sonrió mientras miraba a Sophie, está se puso nerviosa y evitó tener contacto visual con alguno de ellos.

─ Es una chica, u-una amiga. ─ dijo simplemente.

─ ¿Cuál es su nombre? ─ pregunto Will. ─ Claro, si tú quieres decirme.

─ Hey, ¿Ese no es tu amigo? ─ Sophie miro con el ceño fruncido hacia la fuente de agua.

─ ¿Eh? ─ preguntó Will confundido, frunciendo el celo igual y viendo hacia la misma dirección que su amiga.

Tom miro aún con su simpática sonrisa hacia allí, pero un poco confundido. ─ ¿Mike, Lucas? ─ pregunto en susurro Will.

─ Creo que son ellos. ─ dijo Sophie. ─ ¿Acaso te espían? ─ preguntó.

─ Solamente ignorenlos, por favor. ─ pidió Will, Tom asintió y la chica solamente rió suavemente.

─ ¡Ya se! ─ exclamó Tommy. ─ podríamos comprarle una patineta nueva. ─ se dirigió hacia la pelirroja.

─ ¿Cuánto dinero llevas? ─ preguntó ella.

─ Lo suficiente para comprar una. ─ respondió, Will solamente miraba como ellos hablaban, mientras pensaba en sus dos amigos.

¿Que hacían allí? ¿No iban a quedarse en el sótano de Mike?

Se preguntaba una y otra vez, no quería sacar conclusiones, tal vez salieron con sus novias o tal vez quisieron comprar algo de comida.

─ Will... ¡Will! ─ Tom chasqueo los dedos en frente de la cara de Will para que reaccione.

─ ¿Si? lo siento. ─ se disculpó.

─ Descuida, te preguntaba si querías ir a tomar un helado, Sophie fue a comprar el regalo. ─ repitió el chico de rizos.

─ Si, está bien. ─ acepto.

─ Hablame de ti. ─ dijo Tom.

─ Bueno, me llamo Will Byers, tengo dieciséis años y... ─ se quedó callado, no tenía nada más que contar, omitiendo cuando se perdió en el otro lado y fue un huésped de un mounstro. ─ ... me gusta dibujar.

─ ¿En serio? A mí igual. ─ sonrió Tom. ─ Bueno, yo me llamo Tommy Smiths tengo dieciséis años, llevo viviendo aquí por cinco años, mi color favorito es el rojo y me gustan las películas de comedia.

─ ¿Llevas viviendo aquí por cinco años? ─ pregunto sorprendido Will, nunca lo había visto antes.

─ Si, aunque no lo creas, conocí a Sophie hace un mes, se volvió mi mejor amiga. ─ El suspiró. ─ Ella me entiende, ¿Sabes? Es como yo.

─ ¿En qué sentido? ─ pregunto Will, llegaron a la heladería y entraron, pidieron dos helados de cono y se sentaron a comer.

─ No sé si puedo contartelo, tenemos miedo a ser juzgados o algo así. Se que tal vez pienses que es raro lo que te digo, pero no queremos perder a un amigo como tú. ─ Will frunció el ceño. ─ Lo siento, no creo que me hayas entendido.

─ ¿Por qué piensas que los diré algo? ─ pregunto Will bajito.

─ La mayoría de las personas lo hacen. ─ Se encogió de hombros.

─ Está bien si no quieres contarme, pero nunca podría juzgarlos, no soy esa clase de persona. ─ dijo Will. Tom sonrió y tomo la mano de Will por unos segundos.

Will sintió sus mejillas enrojecerse, le gustó aquel toque. Tommy retiro su mano y volvió a comer de su helado. ─ Hey chicos, aquí están. ─ Sophie se sentó aun lado de Tom.

─ Si, estábamos hablando. ─ dijo Tom.

─ Will, me encontré a Mike en el camino, fue algo raro. ─ la pelirroja frunció el ceño. ─ El paso aun lado mío y choco su hombro con el mío, fue un accidente, tal vez no se dió cuenta. ─ se encogió de hombros. ─ Soy muy pequeña, tal vez no me vio.

─ Uh, ¿Compraste la patineta? ─ preguntó Tom.

Will frunció el ceño, sabía que Mike la había chocado a propósito.

─ ¡Si, es genial! ─ respondió contenta Sophie. ─ Mañana se la daré.

─ Está bien. ─ dijo el chico de rizos.

─ Debo irme. ─ Will se levantó del asiento. ─ Los veo luego, chicos.

─ Adiós Will. ─ Saludó Tom con una sonrisa. ─ espero verte seguido.

─ Nos vemos, Will. ─ se despidió la pelirroja. Will solamente sonrió y salió del local, tirando al sesto de basura el helado sin terminar.

Comenzó a caminar hacia la salida, tomo su bicicleta y pedaleo hasta la casa de Mike.

Will se sentía frustrado, realmente lo hacía, Mike se molestaba que el pase tiempo con Sophie pero el si puede hacerlo con Jane, no era justo para el.

Mike tenía que saber que el ya no tenía tiempo para el, Will haría amigos nuevos y nada iba a ser lo mismo.

Will quería olvidarse un rato de Mike, pero ¿Cómo? Lo veía por todas partes. Aunque lo negaba, sabía que iba a ser imposible alejarse del pelinegro.

Pero el tenía su novia, y nunca iba a dejarla.

Will deseaba ser ella.