•° Serendipia °•

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Baling

A pesar de no ser una secta tan conocida, estaba ganando renombre a pasos agigantados, lo cual para su actual líder era asombroso y hacía que la opinión popular fuera buena. Y como era típico de este líder, el realce del nombre de su secta se dio más por las alianzas que había hecho después de unos cuántas noches de tragos y algún que otro buen chisme de vital importancia para los líderes de otras sectas.

Otra de las razones eran sus mujeres. Sí, Baling se convirtió en un atractivo turístico para los hombres de altos recursos, ya que aquí encontraban bellezas femeninas en cualquier lugar que pusieran el ojo. No importaba si la chica era de bajo o alto rango, todas tenían una belleza natural que al género contrario llamaba como miel a las abejas.

A pesar de que estás chicas eran muy codiciadas por su belleza por hombres extranjeros, la mayoría se casaba con los hombres de su propia secta. Esto como consecuencia hizo que los extranjeros empiecen a "pelear por su amor". Esta "pelea por amor" se hizo tan famosa que hasta tenía un evento anual dónde los extranjeros y los oriundos se atacaban entre sí dedicando los mejores poemas y obsequiando las más caras joyas a la mujer que los hacía suspirar. La mujer debía decidir con quién quedarse antes de que los cerezos se queden sin flor.

Baling también era conocido por la gran cantidad de cerezos que nacían en sus tierras, algunos decían que esas eran las causantes de que las mujeres de aquel lugar sean tan bellas.

Pero bueno ¿Y esto qué tiene que ver con la historia que les estoy contando?

Pues, que antes de que ZiZhen naciese esta tradición ya estaba muy arraigada, pero ahora cuando él ya estaba en su juventud se hizo más famosa. Así que como todo joven curioso y un poco enamoradizo, participó en una de ellas. El chiste era que él lo hizo más para pasar el tiempo y ver qué sucedía.

Nunca imaginó que iba a ganar y peor aún, que la chica lo hubiese preferido a él antes que a alguien del clan Jin.

¡El clan que tenía más reputación, respeto y riquezas!

Bueno, claro está que eso pasó antes de que el Mayor Wei apareciera.

Regresando a ZiZhen. Como había ganado, además de pasar a ser orgullo de sus padres, se quedó con la linda chica.

"Bueno, no puede ser tan malo. Talvez nos podamos enamorar al paso del tiempo"

Error.

Su relación no fue tan bonita como había imaginado y escrito en sus poemas. Y el sentimiento tan adorado que quería tener nunca llegó. Su "amor" se desvaneció tan rápido como el tiempo que florecía un cerezo. Las peleas y la indiferencia se hicieron pan de cada día. Ella no era lo que imaginaba y para ella, él no era tampoco lo que había imaginado. Así que al poco tiempo decidieron darse un "descanso", para ver si de esa manera su relación mejoraba.

En medio de ese descanso, ZiZhen salió de cacería nocturna con algunos discípulos. Y ahí fue donde se encontró con quiénes ahora consideraba sus mejores amigos, los dos jóvenes Lan y con quién sería la musa de sus poemas y alguno que otro dibujo, Jin Ling.

Aunque al principio su presencia le pasó algo desapercibida, siempre le sorprendió la belleza natural que este tenía. No estaba bromeando cuando decía que Jin Ling parecía haber nacido en su natal Baling. Solo era de verlo con cuidado, su perfil era algo delicado para ser masculino, sus cejas eran frondosas y largas, sus ojos eran de un lindo color avellana y que decir de sus labios, su labio superior era más delgado que el inferior y tenían un lindo color cereza que te invitaba a probarlos, además su cabello largo era tan estético que sentía que si no lo dibujaba moriría por no poder plasmar tan linda imagen.