Nuevo Tú

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Decidí solo seguir los pasos desde atrás de Giyuu-san sin decir ni una sola palabra.
Después de todo el tiempo que pasamos juntos se que el prefiere el silencio y la calma. Eso no quiere decir que no le guste la compañía de otra persona a su lado, al menos la mia siempre le hace sentir relajado y algo feliz.

O bueno, eso es lo que pude olfatear cuando ambos estabamos juntos pasando un rato en su finca.

De cierto modo, antes, cuando aún no conocia a Giyuu por completo solia pensar en nuestro primer encuentro; ese doloroso día... me generaba un mal sabor de boca, aunque lo respetaba y agradecia por no haber asesinado a nezuko y otorgarme la oportunidad de volverme un cazador de demonios, al recordarle solo sentia nervios y cierto miedo al hombre que yo creía realmente serio y frio.
No fue hasta que llegue con los pilares que me di cuenta lo equivocado que estaba.

No miento, no fue en ese momento... Fue cuando me salvo del demonio Araña, y cuando me volvió a salvar a mi y a nezuko después de que Shinobu-san quiso cortarle la cabeza. Nunca pensé que un hombre con ese olor y aura podía ser al mismo tiempo alguien tan dulce y realmente amable.
Sin Giyuu-san no hubiera podido lograr todo lo que conseguí ahora.
El me dio la oportunidad de convertirme en lo que soy hoy.
El me dio algo que no creía que podria tener otra vez...

-Esperanza-

Pensar que ha dado la vida por mi y nezuko varías veces solo me hace sentir mucho más agradecido con el.

Me alegro ser alguien importante para Giyuu.
Ahora no sólo es respeto, Giyuu y yo somos amigos y eso simplemente me hace muy feliz.
Saber que yo también pude ayudarlo en ciertos aspectos de el mismo que queria cambiar, me hacen sentir realmente feliz!
No se como agradecerle cada cosa...

Quisiera conocer más de él

-¿Qué?-susurró el joven de ojos rubis para si mismo, al percatarse de que pequeñas lágrimas cristalinas caían de sus preciosos ojos,no sabía desde cuando estas habian empezado a salirse pero al instante comenzo a quitarselas con su brazo bueno, rogando que el mayor no se haya dado cuenta del acontecimiento que ocurría a unos pasos atrás de el.

El mayor de los kamado se avergonzó un poco y rápidamente logro cortar con las lágrimas, su cara se torno de un ligero rosa y trato de mirar a la izquierda, aunque lo único que queria era concentrarse en otra cosa y no tener que ver la espalda del hombre por el cuál lloraba.
Después de todo lo sucedido hace tres meses, el joven pensó que seguramente estaba muy sensible ya que aun se sentía algo aturdido por la batalla; o eso era la excusa mas realista que se planteó en tan poco tiempo para si mismo.

Llorar no estaba mal, en realidad es una forma natural de poder sacar todo los sentimientos que tienes guardados. Eso es algo que decía mucho su madre,sin embargo,no podia evitar sentirse avergonzado.No por haber llorado por pensar en lo que hizo Giyuu por él, por supuesto que no! Tanjiro apreciaba mucho esos recuerdos,demasiado; pero de cierto modo llorar por aquello le hacía sentir pena, ya que eran cosas del pasado y ahora ambos estaban bien...
El mayor de los kamado hizo una pausa en su mente, ni el mismo comprendía en si porque habia llorado o porque sentía verguenza...

Suponía que era porque la razón de sus lagrimas estaba enfrente de el. Al menos eso era lo que creía ahora.

-El árbol de cerezos es puramente precioso¿No lo crees, Tanjiro?
-Mencionó el mayor, con una ligera expresión de calma en su rostro, no podía despegar los ojos de aquel hermoso árbol, el podía asegurar que cualquiera se sentiria en paz al recostarse cerca al cerezo.

•Oportunidad• [Giyuutan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora