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Capítulo treinta y tres

No había muchas tareas de la universidad durante las vacaciones, por lo que fue muy pausado. Los dos vieron una película en la computadora y, por la tarde, Jiang ShaoYan una vez más se acostó, con sueño. Cuando se levantó por la noche, Wang Zhe ya había lavado todos los platos y sacado a ciegas algunas recetas de su teléfono. Jiang ShaoYan se apresuró a su lado y asumió las grandes responsabilidades del jefe de cocina.

Por la noche, He Yan regresó del trabajo alrededor de las 8 p.m. Jiang ShaoYan estaba mirando televisión con Wang Zhe en la sala de estar, así que cuando escuchó que se abría la puerta, se levantó de inmediato y se acercó.

"Ge, ¿has comido?"

Yan se quitó el abrigo, "Todavía no, ¿hay sobras caseras?"

"Sí, los calentaré por ti".

Wang Zhe apagó el televisor y se acercó, "Xuezhang, lo haré".

Jiang ShaoYan fue quien le preguntó a He Yan, por lo que, naturalmente, alguien más no podría hacerlo en su lugar: "Lo haré. Subes a descansar primero.

"No estoy cansado."

"Haz lo que te dicen. Ve a la habitación y espérame.

Anormalmente, Wang Zhe, quien siempre ha sido tan obediente, continuó argumentando: "Quiero quedarme aquí ......"

Jiang ShaoYan se sintió impotente. "Hay algo en mi mente de lo que quiero hablar con tu Ge".

"No puedo escuchar?"

Si escuchas, ¿cómo sería una sorpresa? Jiang ShaoYan solo pudo hacer todo lo posible para persuadirlo: "No ahora, te lo diré más tarde".

Wang Zhe frunció el ceño ligeramente. Parecía que tenía algo que decir, pero, al final, simplemente respondió suavemente, "Está bien".

Jiang ShaoYan observó su espalda desolada mientras subía las escaleras. Él pensó que últimamente algo le parecía mal al perro tonto, estaba sonriendo mucho menos y hablando mucho menos y siempre parecía triste y deprimido.

* Ding! * El sonido del microondas interrumpió su línea de pensamiento.

Jiang ShaoYan trajo los platos y el arroz sobrante especialmente guardados a la mesa, luego llevó un juego de vajilla a He Yan. Después, se sentó frente a él, sin hacer nada más que mirar tranquilamente al otro, reflexionando sobre cómo abrir la boca para comenzar.

Él dijo: "...... Hablando francamente, ShaoYan, cuando tu cara está tan en blanco durante tanto tiempo, realmente parece que podrías golpearme en cualquier momento ......"

La boca de Jiang ShaoYan se torció ligeramente y la cara hermosa y encantadora debajo del iceberg se descongeló un poco, "¿Me veo tan aterradora? Mi expresión siempre asusta tanto a Wang Zhe ".

"No, eres muy guapo, de verdad. Pareces un poco feroz cuando no estás sonriendo ".

"Entonces sonreiré más a menudo". Jiang ShaoYan retiró las comisuras de sus labios para mostrar una sonrisa que creía que expresaba amabilidad.

El cabello de Yan se erizó. "...... o tal vez no. ¿Qué pasa? ¿Por qué no llevaste a tu novio a una cita nocturna? ¿Por qué quieres estar aquí para verme comer?

Jiang ShaoYan respondió: "Ge, quiero pedirte consejos sobre algo".

Después de consultar durante más de media hora, el plan se finalizó. Cuando He Yan estuvo a punto de comer, dejó los palillos y dijo: "No esperaba que lo malcriases. Originalmente pensé que era el más proactivo entre ustedes dos ".

La historia corta de ShaoWangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora