¿QUIÉN ERES TÚ? (JOHNLOCK)

RECUERDOS

Todos quedaron sin palabras, ¿cómo podía decir eso? el propio Sherlock Holmes el sociópata, presumido, egocentrico y detestable, se estaba negando a decir su identidad, se estaba negando a si mismo, algo ocurria ahí, algo grave, pero nadie sabia que podía ser.

Hubo un incómodo momento de silencio en el cual todos miraban a diferentes lados, nadie se veia entre si, Sherlock miraba el suelo, John distraidamente lo miraba de reojo y cuando el primero levantaba la mirada miraba a la pared que casualmente ya no tenia disparos, ni rayones ni notas colgando de aqui alla, esto atrajo la atención de Sherlock, por lo que alzo la vista recorriendo toda la habitación, no estaban sus libros, sus utensilios de laboratorio, sus notas, su laptop y probablemente no había nada en su antigua abitación, bajo la mirada de nuevo, iba a decir algo pero unos peculiares pasos fuera de la habitación lo interrumpio, escucho atentamente y hablo.

- No estes merodeando por ahí Mycroft- El hermano de Sherlock abrio la puerta cuidadosamente sabiendo que todas las miradas ya estaban sobre él, con su caracteristico paraguas entro a la habitación pero no dijo nada, solo espero.

-Supongo que tu sabes lo que pasa aquí ¿no es cierto Miycroft?- pronuncio Sherlock viendolo directamente a los ojos.

-Tengo una vaga idea, si.-

- Entonces dime, ¿QUÉ DEMONIOS HAS HECHO?, yo debía morir y mirame estoy aquí como si nada, parado inutilmente en una sala donde solo 2 personas me conocen, ¿QUÉ HICISTE?-

-Sherlock, no seas infantil-

- ¿INFANTIL?, Mycroft, por fin era feliz y tú me arrebataste todo eso sin siquiera decirme nada o a John o a Lestrade, a nadie, actuaste a mis espalda, jugaste con mi vida y ¿me dices a mi infantil?-

- Sherlock...-

- No Mycrofy, solo quiero una explicacion y no te iras de aquí hasta que me la des- se encamino hacia la puerta principal y la cerro, lo mismo hizo con la cocina, posteriormente regreso a su sillón y se sento a escuchar, como en los viejos tiempos.

-Bien, en realidad no hay mucho que contar asi que ire directamente al grano- dijo Mycroft de pie frente a todos.

-No, iras poco a poco diciendome hasta el último detalle-

- Por favor Sherlock nunca te han gustado los detalles inutiles-

- Esto no es inútil asi que mejor empieza-

- Bien, te habiamos estado vigilando desde la fiesta de Rosie..- Mycroft fue interrumpido por John quien al oir este nombre se sobresalto.

-Espera, ¿conoces a Rosie?, ¿quién te hablo sobre ella?-

- John, deja que continue- dijo Lestrade quien se había sentado en el sofá del fondo y tenía los brazos cruzados.

- Como decía, te seguimos desde ese momento, seguimos tus pasos, tus pistas,  las cartas y CD que te enviaban, predecia que tarde o temprano ibas a dar tu vida por proteger a tu "familia", asi que empezamos a trabajar en 2 proyectos, uno consistia en hallar un cuerpo similar al tuyo para la situación esperada, cuando llego el momento mis hombres estaban al final del tunel y cuando John salio de ahí cambiamos el cuerpo, que es el que vio Lestrade, a ti te llevamos a un hospital privado en el que con el escazo, casi nulo pulso que te quedaba te pudieron salvar, cuando te recuperaste te anestesiaron una vez más y te llevaron a la habitación donde despertaste.

- ¿Y cuál fue el segundo de tus proyectos?-

- El segundo lo nombramos New Mind, qu supongo ya sabras para que sirve. Despues de tu supuesta muerte John estaba destrozado e incluso trato de quitarse la vida un par de veces, pero todo intento fue frustrado, asi que decidimos que era momento de actuar y aplicamos el programa en el y en Rosie, por que los niños recuerdan todo, borramos toda idea tuya, tus cosas y pertenencias las llevamos a una bodega donde hasta ahora estaban seguras. 

- ¿Eso es todo?-

- Sí- respondio Mycroft

-Te hare una ultima pregunta ¿por qué lo hiciste?-

- Sherlock, creo que ya es bastante obvio que lo hice para protegerte y a John tambien-

- No es cierto, estabas celoso porque al fin tenia una vida y decidiste arrebatarela, me quitaste todo lo que amaba-

- Sherlock, tu no amas a nadie, ¿cómo pude quitarte algo que ni siquiera tenías?-

- Te equivocas Mycroft-

- Claro que no, o ¿acaso fue en verdad todo lo que decias antes de tu nueva familia, o solo era una deuda que tenías con Mary?

- Todo era verdad Mycroft, algo que jámas entendiste porque nadie te quiere ni tu a nadie-

Hubo un silencio incomodo en la habitación, el cual lo rompio el pitido de un claxon, John se asomo por la ventana y vio que era el transporte de Rosie, bajo sin decir palabra por ella y subio casi de inmediato, la pequeña iba directamente a su habitacion cuando se detuvo en la sala, miro a todos, especialmente a Sherlock, su rostro denotaba asombro, desconcierto y tristeza, pero no sabian porque, la pequeña avanzo unos cuantos pasos y en su rostro se dibujo una sonrisa acompañada de unas cuantas lagrimas, corrio hacia Sherlock gritando.

- PAPÁ, ERES TÚ, ESTAS BIEN- se arrojo a los pies de Sherlock y rodeo su cintura con sus pequeños brazos.

Todos estaban atonitos, Rosie lo había recordado, eso era imposible. Sherlock feliz pero confundido alzo a Rosie del suelo y le beso las mejillas, la pequeña hizo lo mismo y dijo.

- Te extrañe tanto papi-