Es nuestro último día de vacaciones, último día para poder disfrutar sin las preocupaciones que me esperan una vez llegue a mi casa y a mi vida normal. Este viaje ha sido justo lo que quería. Tiempo con mis amigos y novio disfrutando lejos de todo. Y lo mejor es que no he recibido ninguna mala noticia o alerta del supuesto anónimo. El hermano de Damien me ha estado dando actualizaciones, ha estado pendiente a mis padres y no ha pasado nada fuera de lo normal.
Por otro lado, no todo ha sido tan perfecto como lo había planeado, desde el primer día cuando Damien me besó y luego me confesó lo que siente por mi. Eso fue algo que me tomó por sorpresa y es algo que he tenido presente en todo el viaje.
Damien quiso encontrarse aquella noche en el mismo lugar donde se había confesado, pero yo decidí no encontrarme con él a solas de nuevo. Teniendo en cuenta que aquella misma mañana trató de volver a besarme. Por lo que he estado tratando de ignorarlo sin ser tan obvia para no levantar ninguna sospecha. Obviamente lo menos que quiero es que Jack o alguna de las chicas se de cuenta que hay algo sospechoso entre Damien y yo.
Para el día de hoy no planeé nada en específico para hacer todos juntos. Decidí dejarlo libre para que cada quien haga lo que le plazca. Los chicos decidieron irse temprano a hacer un poco de ejercicio y luego se quedarían por la ciudad haciendo cualquier cosa. Por otro lado las chicas y yo aún no decidimos que hacer.
"¡Vamos a la piscina!" Exclama Natalia aplaudiendo varias veces.
"Eso suena bien." Dice esta vez Stephany.
"Si quieren vayan ustedes. Yo me quedaré aquí descansando un poco. Luego las alcanzo." Me tiro en la cama agarrando una de las almohadas y abrazándola como si fuera un peluche.
"Eso suena muy aburrido. Pero no te vamos a discutir." Dice Stephany.
Ambas comienzan a prepararse y luego de unos minutos salen de la habitación. Busco el control del televisor y busco cualquier programa o película entretenida. Cuando encuentro algo que me gusta dejo caer el control en la mesa de noche y me vuelvo acomodar.
Luego de varias horas las chicas regresan a la habitación para ducharse y pedir algo de comer a la habitación. Yo, por otro lado, de tanto estar acostada me empieza a molestar la espalda. Así que decido ir a caminar un rato.
"Chicas iré a caminar por ahí..." les digo levantándome de la cama y buscando mis zapatos.
"¿Estás bien?" Pregunta Stephany.
"Si... ¿Por?"
"No lo sé, Stella. Has estado actuando un poco rara. Estamos de vacaciones y hoy es nuestro último día aquí, y tu decidiste quedarte aquí tirada." Contesta cruzando los brazos y examinándome con la mirada.
"Estoy perfectamente bien. Simplemente hoy quise quedarme descansando porque mañana será un día largo de viaje." Digo lo primero que se me viene a la cabeza y espero que eso sea suficiente para que ya no siga haciendo más preguntas.
Salgo de la habitación cerrando la puerta detrás de mi y asegurándome de tener la llave para poder volver a entrar después. Camino hasta llegar al elevador y cuando se abren las puertas me encuentro con Jack y Damien, perfecto, las últimas personas que quería ver en estos momentos... en especial, Damien.
"¡Mi amor!..." me saluda Jack. Se acerca a mi y me da un casto beso en los labios y mi mirada se encuentra con la Damien. Me pongo un poco nerviosa y comiendo a jugar con mis dedos. "¿A dónde vas?"
"Eh... por ahí... quería salir a caminar un poco." Contesto tratando de que suene como lo más aburrido para que no quieran ir conmigo.
"Ah bueno, pues te acompañamos."
Mierda.
Le doy una sonrisa forzada y bajamos en el elevador. Una vez que llegamos caminamos alrededor de todo el hotel, terminando en el área de la piscina. Es de noche y hace un poco de frío por lo que no hay muchas personas aquí.
"No puedo creer lo rápido que pasaron estos días." Dice Jack moviendo sus pies en el agua.
Los 3 estamos sentados en el borde de la piscina con los pies sumergidos en el agua. Y como si no fuera suficiente, yo estoy sentada en el medio de Jack y Damien.
"Si, ya mañana volvemos a la rutina de siempre" comenta Damien y por un segundo ambos nos miramos, pero soy yo la que rompe el contacto visual.
Me enojo. Me enojo porque ya no lo puedo ver de la misma manera, en cualquier otro momento estaríamos haciendo chiste, molestándonos y riendo juntos. Pero desde que me besó ya no lo puedo mirar de la misma manera.
Pasan los minutos en donde solo hablan Jack y Damien, yo solo hago uno que otro comentario para que Jack no sospeche que me pasa algo.
Jack se levanta y nos mira.
"Ya estoy algo cansado ¿Vienen o se quedan otro rato?"
"Yo me quedo" respondo pensando que Damien se irá con él.
"Pues yo me quedo otro rato con Stella." Contesta Damien a mi lado y todo mi cuerpo se tensa.
"Bueno no suban muy tarde, mañana tenemos que madrugar." Se despide de ambos y lo observo caminar hasta que desaparece al subir al elevador.
Vuelvo mi vista a mis pies sumergidos en el agua y los muevo a un ritmo lento. El silencio crece cada vez más con las pocas personas que habían yéndose a cualquier otro lugar. Damien imita mis movimientos y ambos seguimos en silencio uno al lado del otro por lo que parece ser una eternidad.
"Lo siento..." susurra.
No lo miro y tampoco sé que decir.
"Entiendo si no me quieres perdonar, pero... por favor, no dejes de ser mi amiga." vuelve a susurrar.
"Damien..." suspiro y me obligo a mirarlo a los ojos. "Esto es muy difícil para mi, y espero que lo entiendas. Tu eres como un hermano para mi, y jamás pensé que tu me quisieras de esa manera."
"Lo sé, Stella." agarra mi mano delicadamente y me tenso de inmediato. "Pero entiéndeme tu también. Yo no puedo controlar lo que siento y lo que siempre he sentido por ti." con sus dedos acarician delicadamente mi mano y un escalofrío recorre todo mi cuerpo.
"Te entiendo, Damien... Pero yo estoy con Jack y lo amo mucho."
"Lo sé." su mandíbula se aprieta y voltea su cara hacia el otro lado. Agarro su cara con mi mano libre y volteo su cara delicadamente para que me mire. Nuestras caras quedan muy cercas la una de la otra. Recorro todo su rostro con mi mirada, sus ojos que me miran fijamente, su nariz, su cabello alborotado, sus cachetes, su mandíbula apretada y sus labios entreabiertos que hacen que automáticamente me humedezca los míos. Luego de unos segundos decido hablar.
"Damien, no te puedo prometer nada, tu sabes que mi corazón le pertenece a Jack."
"No lo sigas repitiendo, por favor." me interrumpe. Su aliento choca contra mi cara, huele a menta.
Concéntrate.
"Esta bien." quito mi mano lentamente de su mejilla pero el me detiene.
"No te alejes." susurra y lleva su mirada a mis labios. Me muevo incomoda, no se que es lo que pretende pero si alguien nos llegara a ver así me muero.
Lo peor de todo es que me siento tentada a el, yo lo amo pero no de la manera que el quiere que lo ame, pero en estos momentos muchas cosas pasan por mi mente. Para mi sorpresa, me siento cómoda y no siento la necesidad de alejarme. Sé perfectamente que está mal, pero mi mirada vuelve a sus labios... y lo que menos quería que pasara pasó. Corté el pequeño espacio que había entre nosotros y choque mis labios con los suyos en un beso lleno de necesidad por fuera y lleno de arrepentimiento por dentro.
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Anonymous
RomansaImagínense tener la vida perfecta. Tener una familia adinerada, ser popular en una de las mejores escuelas de tu ciudad, y tener a los mejores amigos y novio. Una vida donde todo es perfecto, todo es color de rosa. Así era mi vida hasta aquel día e...