Era solo un pasatiempo.

Cap 1. La maestra y su excéntrico pasatiempo.

Este es el primer Fic de mi creación que escribí por lo que pido comprensión si algo suena extraño XD XD XD.

Ha Hanji le gusta experimentar con cosas que no debe, ¿Qué es lo peor que puede pasar? Son solo un par de conjuros oscuros, no pasara nada malo... ¿Qué? ¿Qué algo que parece un "ángel" con cara de pocos amigos ha venido para juzgar su alma?... bueno eso si es malo.

Era solo un pasatiempo

Este fic es LeviHan, si no es de tu agrado esta pareja o consideras que mi texto es descabellado, por favor sigue de largo; afuera hay un mundo de fanficker por conocer.

Disclaimer: Shingeki no Kyojin y sus personajes le pertenecen a H. Isayama.

Este fanfiction fue creado con el único propósito de entretener, a ti si te gusta este ship y las historias raras y a mí porque me gusta escribir cosas bien random.

Era solo un pasatiempo.

Cap 1. La maestra y su excéntrico pasatiempo.

Existen tres planos existenciales, el divino, el inframundo y el terrenal, dentro de cada uno existen seres habitándolo y los únicos que en algún momento cambiaran irremediablemente a algunos de los otros dos planos son los terrenales; los simples humanos al momento de morir, sus almas son juzgadas y enviadas a alguno de los otros dos; normalmente ese juicio es simple, si fuiste bueno iras al divino si fuiste malo serás enviado al inframundo.

Si, definitivamente es algo simple a menos que el alma del terrenal en cuestión sea de comportamiento errático a ojos de los jueces, un alma que va de ser el ser más caritativo de la ciudad a invocar demonios el viernes por la noche y esa alma tiene nombre y apellido, Hanji Zoe, una joven mujer con un talento inusual para encontrar libros raros de lenguas antiguas y rituales paganos ya olvidados aun por los volúmenes más antiguos dentro de las paredes de las bibliotecas universitarias.

Su vida transcurría como maestra de literatura en la facultad de letras de la universidad más importante del país, facultad de la cual habían salido reconocidos escritores actuales que le daban gran prestigio.

Una tarde bastante luminosas, se refleja en las ventanas del corredor principal de la biblioteca universitaria por donde pasos apresurados se dirigen a la salida del recinto.

- Date prisa Zoe, si salimos ahora tendremos tiempo de pasar a comprar las velas y el aceite - se decía a si misma Hanji mientras caminaba con su bolso colgando de un lado y un grueso y antiguo libro entre los brazos.

- Maestra, maestra, por favor espere un momento... maestra no se vaya.-

Hanji volteo mientras se detenía. - ¿Si Armin?-

Armin Arlert, era un joven prodigio, que aspiraba a ingresar a la facultad con la calificación más alta de toda su generación y ahora se encontraba bajo tutela de Hanji, por orden del consejo universitario al ser un muy joven autor que prometía mucho.

- Si Armin ¿Qué sucede?-

- Maestra Hanji, termine el borrador de los 3 primeros capítulos de la novela que estoy escribiendo y quisiera que por favor los leyera y me diera su opinión.-

Hanji tomo la carpeta que el chico rubio le ofrecía y la coloco encima del libro que llevaba - Bien Armin me are un espacio para leerlo y te daré mis anotaciones el lunes, ahora tengo algo de prisa así que te dejo.-

Armin como todo un caballero que era se ofreció a llevar el pesado libro por ella, a lo que Hanji no se negó, así juntos caminaron hasta el estacionamiento.

Armin observaba la pasta del libro mientras trataba de descifrar el texto que poseía la tapa.

- ¿Qué idioma es este?- Pregunto con curiosidad al no poder descifrarlo.

- Es arameo Armin, y me ha tomado una eternidad y 5 diccionarios traducir solo unas hojas hora me lo llevo a casa para seguir estudiándolo, ¿quieres que te lleve al centro?, voy a pasar al refugio a dejar algunas prendas donadas y después a comprar algunas cosas.- Decía mientras acomodaba su bolsa, el libro y la carpeta dentro de su auto.

- No es necesario, aún tengo algunas cosas que hacer aquí, valla con cuidado- Respondió el rubio.

Hanji se despidió con una cálida sonrisa, mientras arrancaba el vehículo.

- Sigue revisando esos libros raros y polvorientos, me sorprende que una maestra universitaria de su nivel y cultura se interese en esos textos, tan medievales llenos de supersticiones, haaa bueno solo debe ser un pasatiempo excéntrico como ella misma. – pensó Armin para sí mismo mientras caminaba de regreso a la biblioteca.

Después de una travesía de 2 horas por la ciudad, donde paso a dejar una donación al refugio de desprotegidos y tardo en zafarse de los encargados que siempre la entretenían demás con su charla, logro llegar a una exótica tienda de esoterismo que se encontraba en el lado más antiguo de la ciudad.

- Muy buena tarde Carla ¿Cómo va todo por aquí?, la tarde es excelente el sol brilla y no hay nubes de lluvia en todo el horizonte. Saludos Hanji apenas entro al local.

La particular tienda pertenecía a los Jeager una familia de lo más pintoresca, el cabeza de familia era un respetado médico que de vez en cuando impartía cátedra en la facultad de medicina y el hijo del matrimonio; Eren había tomado clases de verano con Hanji gracias a una recomendación por parte de Armin que era su amigo de la infancia, aunque no era tan brillante como el rubio era de admirar la entereza con la que se esforzaba en aprender.

Por medio de esta línea de conocidos fue que Hanji supo de la tienda esotérica de Carla Jeager, lugar perfecto para comprar cosas para su excéntrico pasatiempo, donde podía adquirirlas sin que nadie la criticara, excepto sus 2 alumnos.

- ¿Maestra Hanji? ¿Otra vez está comprando cosas raras?- Dijo Eren mientras entraba a la tienda, con su mochila al hombro.

- Eren, llegaste temprano, pensé que Armin vendría contigo hoy. Dijo Carla mientras veía a su hijo.

- No mamá, Armin dijo que se quedaría en la biblioteca hasta tarde, para recabar algunos datos para el libro que está escribiendo, cosas históricas.

Hanji garraspeo un poco para llamar la atención de Carla y prosiguió con lo que venía hacer - Carla vengo por las velas de cera cocida, aceite de cereza y la tiza de ladrillo y cal.

Carla asintió con una sonrisa y puso sobre el mostrador una caja donde ya estaba el encargo de Hanji, después de intercambiar el pago por el producto, Hanji se despidió.

- Maestra Hanji, debería de dejar de hacer esas cosas que tal si un día resulta algo de lo que dicen esos viejos libros, o tiene un accidente con todas esas velas. – Le menciona Eren mientras sujeta la puerta para que pueda salir.

- No te preocupes por eso Eren, se bien lo que hago, y tu deberías prepararte para los exámenes de ingreso, están muy cerca, si quieres entrar en la facultad tendrás que esforzarte mucho.

Hanji se despidió y salió de la tienda.

- Eren se rasco un poco la cabeza mientras recogía su mochila del suelo donde la había dejado al entrar - Creo que la maestra Zoe me dijo cortésmente que no me meta en su excéntrico pasatiempo.

- Puede ser hijo, pero ya que lo menciono, ¿has estudiado? Sabes que tu padre se enojara mucho si no apruebas el examen, en especial después de que te negaste a tomarlo para medicina.

- Pero mamá tu sabes que la medicina no es lo mío además... yo... haaa... voy a mi cuarto.

Eren se escabulle por la trastienda con dirección a su cuarto, dejando a Carla sin una respuesta clara, en serio a veces no sabe que pensar de su hijo.

--------- O ---------

Gracias por leer, se aceptan comentarios.

(n_n)/° nos leemos pronto.