Epílogo

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Junio 2027

Daniela estaba examinando los rostros de la gente, pero el sol hacía que fuera difícil distinguir sus facciones. La mayoría de las personas tenía lentes y gorros, por lo que encontrar la cara que estaba buscando no era tarea fácil.

La morena se puso detrás de un carro que iba muy lento y aprovechó la baja velocidad para seguir mirando a la multitud que salía por las puertas de llegadas internacionales. Pisó fuerte el freno cuando vio los rizos que caracterizaban a su mejor amiga.

Amalia saltó y corrió hacia el carro con una sonrisa de oreja a oreja. Dani apretó el botón del maletero para que la mujer pudiera guardar rápido su equipaje y solo esperó el escándalo que vendría una vez que abriera la puerta del copiloto.

- ¡Mira esa carita! - la mujer de rizos le apretó los cachetes con fuerza y después la abrazó - ¿Cómo estás? Ya te están empezando a salir arruguitas ...

- No seas exagerada, no jodas - Calle soltó una carcajada - tampoco es como que hayan pasado siglos.

- Oye, después de verte cada semana no verte en un año sí se siente como un siglo - Amalia se abrochó el cinturón y la miró emocionada - ¿Todo listo? ¿Cómo están esos nervios?

- Nerviosos - Dani rio - pero el trabajo ha sido buena distracción.

- Qué novedad ...

Cuando el carro de adelante avanzó Calle se lo rebasó y le preguntó a Amalia si quería poner música.

- Nop - la mujer negó con la cabeza - prefiero que hablemos y que me digas qué pasa. Noto tu estrés.

Dani frunció el ceño y la miró.

- ¿Estrés?

- ¿No has estado durmiendo mucho? - Amalia alzó una ceja como diciéndole "te conozco más de lo que crees".

- Estoy durmiendo normal ... como toda la vida.

- Ay mija, esas ojeras hablan solas.

- Estas ojeras - Daniela las señaló - son producto de la última concesión que firmamos. Nadie en la oficina durmió en tres días.

- ¿Y quieres manejar así? - Amalia dijo asustada.

- Fue hace un par de días, relájate - Calle le aseguró - hasta me tomé el día siguiente para poder dormir ... me estoy cuidando, siéntete orgullosa de mí.

- Con todo lo que está pasando obviamente estoy orgullosa de ti - la mujer le puso una mano en el hombro y se lo apretó con cariño - te juro que habría venido antes si no hubiera sido por la gira.

- Lo sé. No te preocupes. Lo importante es que ya estás aquí.

Se quedaron en silencio varios minutos y Dani empezó a golpear el volante con los dedos mientras tarareaba una canción en su mente.

Amalia subió los pies al tablero y rompió el silencio.

- ¿Ya están listos todos los detalles? - la miró sonriendo.

Dani, sin quitar la vista de la calle, asintió.

- Vale y su esposo llegaron ayer, pero todavía no los veo.

- Qué bueno que sí hayan podido venir ... así las ayudan un poco con todo. ¿Hace cuánto no se ven?

Calle pensó un poco antes de responder.

- ¿4 años? - dijo sin estar segura - La última vez que vinieron fue cuando Jacobo cumplió 5.

- Uf, se van a llevar una sorpresa cuando lo vean.

TE PROMETO QUE TE QUISE | CACHÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora