Capítulo 5: Bienvenida

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POV MARÍA JOSÉ

Estuve alrededor de 5 minutos preguntándome cómo podía haber conseguido mi número celular, y definitivamente mis dudas apuntaban a Alberto, le debía una y muy grande. Luego de estar dando vueltas, decidí abrir el mensaje que me había mandado la castaña.

Calle

Buenas noches Poché, espero estes teniendo una linda noche.
Seguro te preguntarás quién soy, soy Calle jaja. Y conseguí tu número con Alberto. Espero no incomodarte, un beso.

Recibido 11:00 PM

No podía creer que con ese mensaje había olvidado un poco el día tan mierda que tuve, justo cuando iba a responderle, sentí debajo de mí el pequeño sobre que me había entregado Alberto unas horas antes, fue cuando decidí dejar el celular en mi mesa de noche y leer lo que había escrito mi padre como último mensaje para mí.

María:
Seguramente si estás leyendo esta carta es porque no me encuentro con vida. Quiero pedirte perdón por absolutamente todo, yo sé que no estabas nada de acuerdo con estilo de vida que llevaba, pues siempre me reprochabas que no tenías una vida normal y que por lo mismo siempre tenías que ir ocultando tu verdadera identidad, que también por mi culpa tú madre era infeliz, pero te juro mi niña que yo daba todo porque fueran las mujeres más felices del mundo y nunca les hiciera falta nada. Sé que también seguro me estarás reprochando que no comunicara los problemas a los que me estaba enfrentando o los enemigos que tenía y todo por avaricia, por querer más y más. Yo mismo terminé por cavar mi propia tumba, en donde ni el dinero ni el poder que llegue a tener en vida, servirán de algo, pues aún cuando pudiera tener todo eso, no tendría ni a ti, ni a tu madre aquí conmigo. Discúlpame mi niña, por joder tu vida, pero te pido perdón desde lo más profundo de mi corazón y estoy seguro que lo más probable es que me termines odiando por seguir jodiendo tu vida, pues lamentablemente lamento informarte que tienes que seguir con mi legado. TÚ eres la encargada de seguir administrando mi negocio en el mundo del lavado de dinero, Martín ya está al tanto de todo y será el encargado de cuidar tanto tu vida, como la de tu madre. Te amo y bienvenida al mundo del narcotráfico.

Juan Carlos G.

No podía creer lo que estaba leyendo. ¿Acaso era idiota? ¿Cómo podía hacerme esto a mi? Sabía que odiaba todo lo relacionado a ese mundo y llega con una estúpida carta a decirme bienvenida al mundo al que odiabas, seguiré jodiendo tu vida y haciéndote la persona más infeliz; que patética fui creyendo que podía tener una vida normal.

Luego, ¿Cómo se atreve a mencionar a mi mamá y su bienestar cuando por su puta culpa mi mamá no se encuentra más aquí conmigo? No podía creer el monstruo de padre que tenía, no podía creer que siempre estuve cegada por todo el amor de hija y admiración que le tenía, misma que acabo hoy justo el día de su muerte.

De algo podía estar segura y era que definitivamente no sería la misma María José, esa persona noble que siempre buscaba el bienestar y seguridad de todos, a partir de hoy, absolutamente nadie iba a conocer a María José Garzón Guzmán y me aseguraría de ser mil veces mejor que mi padre en ese negocio; nadie iba a poder acabar conmigo, no otra vez.

-

A la mañana siguiente me desperté con un dolor insoportable de cabeza, cuando volví a recibir un mensaje de Calle, de inmediato recordé que no había respondido al anterior, definitivamente esa carta removió mis sentimientos y me había hecho perder la cabeza por largas horas, tanto que perdí la noción del tiempo hasta quedarme dormida.

Calle

Sólo te escribo para pedirte perdón, quizás te pareció algo incómodo que haya pedido tu número, perdón si te cause algún inconveniente.

Amar(te) DueleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora