El timbre sonó, Todoroki fue a abrir la puerta sorprendiéndose ante la presencia de una chica de cabello negro y traje rojo que entró robándole un beso en los labios que reaccionó alejándose lo más rápido que pudo, su omega ya se sentía lo suficientemente triste como para añadirle los celos que debían darle cuando los veía juntos a él y a Momo.—Hola bebé.—Saludó alegremente la peli negra que fingía no saber lo que sucedía, Izuku llegó con la bebé en brazos para ver de quien se trataba, al ver a Yaozuru su gesto cambió a uno serio.— Amor, iré por algo a la tienda me llevo a Yukiko, no quiero que conviva con traidoras, ¿necesitas algo?.—Por el semblante de su Izuku supo que la situación era crítica, decidió no decir nada.— Yo sí.— Exclamó la chica, Todoroki intentando que la situación no fuera más tensa sonrió y la tapó la boca a la omega que, con descaro lamió su mano.—No, no necesito nada.—Intentó disimular lo sucedido con su mano pero era demasiado tarde.
Izuku salió de la casa con Yukiko en brazos.— El puente de Londres se derrumba, se derrumba, mi querida dama.—Tarareó a Shōto le dió un escalofrío, Inko siempre le había dicho que cuando su hijo estaba molesto, celoso o a punto de hacer una locura y quisiera que ella lo supiera cantaba esa canción, Yukiko comenzó a removerse en los brazos de su padre quizás notando cómo se sentía, Todoroki se daría cuenta más tarde del terrible error que cometió al dejarlo ir.
Yaozuru sonrió mientras veía a Izuku irse, se podría decir que su sonrisa era casi malévola sin embargo el mayor seguía confiando en ella por ser amigos de la infancia, no entendería hasta después cuáles eran los verdaderos planes de la chica que haría lo que fuera por él, entraron a la sala sentándose cada uno en distintos sillones, entablaron una conversación de cosas triviales del trabajo, pasaron unas cuantas horas hasta que Todoroki notó que Momo parecía cada vez más nerviosa, observaba constantemente el reloj, movía las manos con nerviosismo y después lo observaba a él con deseo, ella se paró y se sentó junto a él.
Incómodo, se alejó un poco pero ella volvió a acortar la distancia, se recostó en su hombro y le susurró.— ¿Te gustaría marcarme...como tuya?.— Unos fuertes golpes en la puerta, la interrumpieron, Todoroki aliviado se separó con la excusa de abrir la puerta, no estaba preparado para lo que vió, Bakugo, sudoroso, con cara de terror y lágrimas en los ojos.— Es el nerd de mierda.— Gritó Bakugo con la desesperación marcada en su rostro, no dijo nada más y salió corriendo seguido por Todoroki, cada vez más lejos se escuchaban los gritos de Momo pidiéndole que no fuera, no les prestó atención ni a los gritos ni a las gruesas gotas de lluvia, los truenos ni los relámpagos, un fuerte dolor en el cuello lo invadió, el lazo se había roto, aún así siguieron corriendo sin fijarse de los autos, cruzaron y cruzaron las calles hasta llegar a una casa abandonada, donde el llanto de una bebé se escuchaba muy claramente, entraron a toda prisa y lo que allí encontraron los dejó devastados, Izuku tirado en el suelo, un gran de sangre a su alrededor, un cuchillo enterrado en su corazón, con cortadas profundas de ese mismo cuchillo en todo el cuerpo y una bola de mantas que el intentó proteger del cuchillo con su cuerpo y en ella una bebé que apenas iba a cumplir el año, llorando por la pérdida de alguien tan importante a tan temprana edad, Todoroki cayó de rodillas, a lado del cuerpo, tirado se encontraba el teléfono del menor y en él aún marcado el último número al que había intentado llamar: Todoroki Shōto, Bakugo comenzó a llamar a una ambulancia y a los héroes que alguna vez habían conocido a Izuku, la ambulancia llegó y se llevó el cadáver, la hija y el esposo, los policías arrestaron a Momo pero el crimen ya estaba hecho.
Los momentos buenos y malos que había pasado con Izuku se reproducían en su mente, lamentando todos sus errores, todos los héroes estaban de luto, al igual que la ciudad, en todos los noticieros se anunciaba la muerte del héroe número uno, más villanos comenzaron a aparecer, lograron arreglárselas entre todos pero sin Shōto el cual se había encerrado en casa con su hija, hacía ya más de un año, si por algo no estaba muerto era por su hija ya estaba a punto de cumplir los dos años y aunque la desgracia ocurrió cuando tenía poco menos de un año ella desde ese día había dejado de sonreír con frecuencia y cuando lo hacía era muy especial.
¿Qué se supone que haga sin ti?
¿Sabes, Izuku, lo mucho que te amo?
Muchas veces, me quedo mirando la luna desde el balcón, me pregunto ¿por qué su esplendor?, ¿porqué si no puede estar junto a su amado?, entonces me río, no, ella no está con su amado, pero pueden verse, sentirse, tal vez pase mucho tiempo...pero siempre se reencontrarán.
Izuku, dime, ¿Cuánto tiempo tengo que esperar para volver a encontrarte?, no puedo dejar a nuestra hija sola, pero...¿Puedes venir?, ¿Puedes dejar de observarme desde las sombras de la muerte?, ¿Puedes dejar de culparte a ti mismo por lo sucedido?.
Sólo hay un culpable, y ese soy yo, me lo merezco, por haberte dejado ir, por mis estupideces me dejaste, una dulce canción que dejará de escucharse hasta que regrese, abriéndose paso por las puertas de la muerte...Dime Izuku, si revivieras ¿Me seguirías amando? ¿a pesar de todos mis errores?, ¿Mis tonterías? .
Siento como lentamente todo rastro de ti desaparece, el lazo que formamos cuando nos conocimos se desvanece...una profunda desesperación me invade, escucho la melodiosa voz de nuestra hija, la heredó de tí, al igual que esas ganas de conocer el mundo, tiene una hermosa sonrisa, que también sacó de ti.
Todas tus fotos desaparecieron, no soporto verlas, no es que te odie por haberte ido...no, solo, solo me odio a mi mismo por mi torpeza, mi insensatez y mis nulos sentidos de protección.
¿Dónde está mamá dices? No lo sé, probablemente sea un espíritu libre volando alrededor del mundo...¿O tal vez un gato? Un gato de ojos verdes muy inteligente y fuerte, ¿Que si se fue?.
No, no lo hizo, sigue aquí, tiene que seguir aquí, cuidando de ti por que de mí no lo se, lo conozco y sé que no me culpa, pero a pesar de eso a mí la culpa me carcome, como un lobo hambriento con un dulce conejito recién cazado y separado de su familia con rudeza.
FIN
Con esto llegamos al final de esta historia, sé que dije que iba a ser un final feliz, pero esto tiene una continuación que publicaré como una historia separada, va a ser la segunda parte pero estará en otro libro, no se me estresen, cuídense mucho bye!!
【Publicado y editado: 6/3/2021】
Número de palabras: 1173
Nota: espero que el poema haya sido de su agrado, me costó mucho escribirlo.
Nos leemos en 1 o dos días.
FIN
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⤫𝔼𝕣𝕣𝕠𝕣𝕖𝕤 𝕕𝕖𝕝 𝕡𝕒𝕤𝕒𝕕𝕠⤫
Romance¿Cuántas veces he cometido el mismo error? Un incidente los separará, los celos y la desesperación se hacen presentes en sus vidas. Advertencia: Versatilidad. Advertencia: Editado y pues, traigan pañuelos gracias.