capítulo 2 - culpable

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Jack aún no conocía a muchas personas en la universidad y, por lo tanto, pasaba una buena cantidad de sus fines de semana y noches saliendo con todos ellos. Katie lo veía estudiar el mimo y la sobrealimentación de Hannah de su hermano mayor y tenía una sensación de hundimiento cuando se daba cuenta de que los dientes estaban girando en la cabeza de Jack.

"¡Tú y Hannah son tan horribles!" sonrió cuando Hannah y Daryl se dirigieron a su casa una noche, después de una fuerte orden de comida para llevar. "Pobre Daryl no tiene idea, ¿verdad?"

"No sé a qué te refieres," murmuró Katie, comenzando a ordenar, incapaz de hacer contacto visual con Jack.

"Hannah es fácil de detectar como un alimentador. Tuve que vigilarla durante todo el verano, alentando a Daryl a comer e insistiendo en que esa ropa ajustada le quedaba bien", se rió. "¡Pero no tenía idea de que te tenía ayudando!" el asintió. "¿Más cerveza Daryl? No puedo terminar mi pizza Daryl, es una pena desperdiciarla. ¿Tengo un helado si lo quieres, Daryl?" Jack loro, recordándole a Katie todas las cosas que había dicho, justo esa noche. "¡Estás tratando de ayudarla a engordar!"

Katie podía sentir su cara sonrojarse. Ella pensó que había sido más sutil en su aliento esta noche. Aparentemente no. ¿Cómo se suponía que debía responder a eso?

"No es que lo esté juzgando", se rió Jack. "Daryl nunca ha sido el crayón más brillante en la caja", se rió para sí mismo. "No me sorprende en lo más mínimo que esté herido en una relación con una chica como Hannah que secretamente le está hinchando las entrañas".

"¿Vas a decirle?" Katie murmuró torpemente, renunciando a tratar de ocultar su parte en el aumento de peso de Daryl.

Jack sonrió, sin revelar nada. "Tal vez", bromeó, tomando la única porción restante de pizza que Hannah y Katie no habían logrado bajar por la garganta de Daryl. "Tendré que pensarlo", sonrió con aire de suficiencia.

Katie decidió no decirle a Hannah que el hermano pequeño de Daryl estaba con ella. Solo haría las cosas incómodas y ella ni siquiera estaba segura de lo que Jack planeaba hacer al respecto. Aún así, se volvió bastante incómodo mantener el secreto mientras los penetrantes ojos de Jack los miraban a los tres juntos.

"¡Pidamos pizza!" Hannah cantó cuando los cuatro volvieron a la habitación de Katie una noche después de salir a tomar un helado. "Podrías conseguir pizza, ¿no, cariño?" Hannah sonrió, mirando a su novio barrigón con adoración.

Katie observó a Jack asimilarlo todo, sabiendo exactamente qué estaba haciendo Hannah con su hermano mayor.

"Uf", Daryl hizo una pausa, silenciosamente eructando de todo lo que ya había comido esa noche, "No sé en realidad, yo... '

"¿Qué te parece Katie?" Hannah le preguntó, esperando su apoyo, como siempre.

Katie miró con culpabilidad a Jack, quien le sonrió, preguntándose cómo iba a responder.

"Um, bueno, no sé ..." se retorció, bajo la mirada de Jack. "Tal vez no esta noche", respondió al fin.

"¡Disparates!" Jack irrumpió. "Solo estabas diciendo todo el camino a casa que todavía estabas muriendo de hambre", mintió Jack, sonriendo a Katie. "¡Ordenemos!"

Katie se volteó, mirando confundida a Jack mientras sacaba su teléfono celular y comenzaba a ordenar en línea.

Hannah había convencido a Daryl para que hiciera un pedido grande y, de alguna manera, Jack había logrado hacer un pedido bastante grande para Katie también. "También podríamos recibir la oferta especial", se encogió de hombros, "revisando la gran cantidad de comida que habían reunido colectivamente." Espero que puedan comerlo todo ", le sonrió Jack a Katie mientras hacía tapping para confirmar el pedido". Odiaría estar decepcionado ".

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