(***)—Yo soy... Yo... Yo soy gay—la imagen frente a él se aclaró, era momento de aceptarse y dejar de mentirse. Ya estaba seguro de quién era, mirarse a los ojos fue lo mejor que pudo hacer—Valla Ari, fue difícil ¿Verdad?
Hablarse a si mismo fue su mejor medicina para calmar el dolor, mientras la sonrisa en su rostro aparecía después de tanto tiempo ausente. Aún tenía lágrimas en los ojos, aún tenía miedo de cómo reaccionaria su familia, pero la paz en su interior comenzaba a crecer.
El reflejo frente al espejo fue el mejor, no importaban sus ojeras; no importaba su cabello despeinado; no importaba sus mejillas rojas; no importaba sus ojos hinchados; no importaba... Porque el brillo en sus ojos volvió...
—Soy Aristóteles Córcega Castañeda... Tengo 16 años y vivo en Oaxaca, amo la música porque en ella expreso mis sentimientos, me gusta hacer deporte pero más que nada el basquetbol—cada palabra lo hacía más alegre—Aveces soy modelo, aveces youtuber, otras pianista y cantante... Soy positivo y obtimista... Soy quién soy y no puedo cambiarlo porque así nací... Y me estoy enamorando de mi mejor amigo...
(***)
Temo López era la persona más calmada y tolerante posible, no le molestaban los comentarios a sus espaldas, estaba acostumbrado a que hablaran mal de él. Ya no tenía miedo porque su padre y su hermana lo aceptaban y con eso bastaba por ahora.
Decir en voz alta "Soy gay" fue lo más tranquilizador para su alma. Pancho López tuvo las palabras correctas para su hijo cuando él le confesó su orientación y estaba bien, su pequeña hermanita fue su mayor apoyo.
Pero todo tiene un límite y el pequeño Julio López lo había cruzado, pues los insultos de su parte siempre habían sido leves y no tan hirientes, hasta esa mañana.
—¡Ya mejor admite que eres igual de homosexual que tú hermano!—Sebastián podía reír descaradamente frente al más pequeño de los López—Después de todo... También actúas rarito
—¡Claro que no! Deja de compararme con Temo... Yo no soy como él— Cuauhtémoc se quedó recargado en la pared, solo escuchaba sin hacer nada, recibiendo cada cuchillazo de su pequeña calcomanía
—¿Seguro? Antes decías que serías como él... Pues vas en buen camino—escupir palabras puede ser tan fácil, y el pequeño Córcega no tenía miedo alguno para seguir insultando
—¡Cállate! O te juro que...
—¿Qué? ¿Vas a llorar como una niñita? Buuuuu—sus manos formaron puños y estos bajo sus ojos dramatizaban más su falso llanto. Ese fue el límite para Julio quién se lanzó sobre el pelirrojo y comenzó a golpearlo.
Temo reaccionó tarde y corrió a separarlos, no sabía que hacer, él odiaba la violencia. Intentó rodear a su hermano, pero en su lugar recibió un codazo en el estómago.
—¡Largate de aquí, maricon!—Sebastián logró quitarse a su rival y miró al mayor con desprecio
—Esta es una pelea de hombres, Cuauhtémoc... No te metas—era la primera vez que Julio lo miraba a la cara después de dos semanas, y sus ojos reflejaban odio, ya no era la dulce mirada de su hermanito
—Si Cuauhtémoc... Deja a tu hermano resolver sus propios problemas—Ya estaban rodeados de alumnos, Zack y Ben estaban a su lado—Además él sí se sabe defender
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Una aventura al día [Aristemo/Emiliaco]
Fiksi PenggemarPromts de colores por el mes del orgullo LGBT 🤗❤️💘💛💚💙💜