Historias Willgan

Invisibilidad.

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Fargan guardó sus espada respirando agitado, agarró con fuerza la pequeña inyección y de golpe se la colocó en una pierna, rápidamente su vida empezó a subir y todas sus heridas empezaron a regenerarse, por fin había llegado al nivel 30 y mejor aún, al nivel 32.

Pasó su mano por su cara limpiando el sudor, dándose cuenta que era invisible, ni se había enterado cuando recibió ese poder, sin darle mucha importancia empezó a caminar directo a la casa de su novio para darse una buena ducha y descansar, luego encantaría la armadura y el pico.

Entró en su casa viendo el amanecer por detrás del gran árbol, pasó por la sala de estar viendo palomitas regadas por el piso y el sillón, mantas, el control del televisor en el piso y su teléfono, agarro su teléfono y pasó directo a su cuarto en donde encontró a Willy acostado boca abajo dormido, dejó su teléfono cerca y se metió a darse una buena ducha, salió con la toalla envuelta en la cintura viendo que Willy no estaba dormido, estaba boca abajo mirando su teléfono.

-Buenos días- saludó Fargan, Willy lo miró o bueno a donde provenía su voz.

-Buenos días, cariño- Fargan se acercó a él y le dio un beso en los labios -¿como te fue anoche?- preguntó curioso sintiendo como su cara era llenada por muchos besos de su novio ahora invisible.

-Bien, llegue al nivel 32 y ahora soy invisible- dijo Fargan alejándose de Willy para buscar su ropa limpia y vestirse -¿Y a ti? La sala está hecha un desastre- Willy se sentó en la cama estirando su cuerpo.

-Mhmn, felicidades- le felicitó con una linda sonrisa que Fargan admiró embobado -Bien, aunque vi una araña en la sala y bueno...- no hacia falta terminar de explicar, Fargan era consciente del miedo que le tenía Willy a las arañas.

Y entre unas cosas y otras siguieron su día tranquilamente, después de todo era un sábado.

[De aquí pa' bajo va a hacer calor, calor del bueno, así que si sigues leyendo no quiero quejas luego, avisa'o estás]

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Fargan lo pensó un rato y finalmente se decidió, llegó a la habitación donde se encontraba Willy con el teléfono en mano.

-Willy~- le llamó seductoramente llamando la atención del nombrado -¿Podemos hacerlo?- preguntó con ilusión mientras se quitaba la camiseta, Willy se sentó en el borde de la cama interesado.

-Bueno- dijo simplemente viendo como la ropa de Fargan caía al suelo hasta no ver nada de él, siguió las hendiduras con formas de pie en la alfombra, estas se detuvieron frente a él.

Fargan pasó su dedo por los labios de Willy haciendo que este se sonrojar de manera repentina, aunque nadie lo viera Fargan sonrió con diversión.

-Solo es mi dedo, amor~- y las mejillas de Willy subieron a un tono más rojo que antes al haber malpensado.

-Ya, es que lo tienes igual de pequeño- le respondió con malicia Willy, Fargan colocó su mano sobre la mejilla de Willy, acariciandola con suavidad.

-Oh~ parece que alguien está muy juguetón hoy~- Fargan apoyó su mano sobre la pierna de Willy -Cierra los ojos~- y Willy rápidamente obedeció, haciendo sonreír satisfecho a Fargan.