ser diferente

ᴛɪᴇᴍᴘᴏ ᴀ sᴏʟᴀs

Desperté y lo primero que hice fue agarrar mis lentes que se encontraban en el velador, me los puse y con un gran esfuerzo de voluntad me levanté de la cama.

Ahora que había arreglado las cosas con Cristian estaba feliz de poder volver a ir a la escuela en su auto, aunque aún sabía que debía aprender a conducir, mi madre me lo seguía repitiendo y yo le seguía diciendo que pronto aprendería cuando no tenía la intención de hacerlo.

Desde la cena incómoda con mi madre y Harry, ella no me ha dirigido palabra pero si miradas que no supe como interpretar.

Antes de bajar por desayuno revisé mis mensajes.

Tenía un mensaje nuevo.

Harry
7.20 a.m. Hoy me toca ir al hospital para ver todo el tema de los  pulmones compatibles, aún no sé si hacerlo o no, pero mi madre me convenció de venir. Te avisaré como las cosas salieron cuando termine. Te amo.

Yo
7.30.a.m. Que bueno que tu madre te haya convencido, ya quiero saber como van las cosas. Estoy tan orgullosa de ti. Te amo más.

Dejé mi celular hasta que ya estaba dentro del carro con Cristian camino a la escuela.

Volví a entrar a mis mensajes.

Harry.
7.45 a.m. No es posible ;)

Una sonrisa salió de mi boca al leer el mensaje, era tan adorable.

—¿Quién le provoca esa sonrisa a mi hermanita? —intervino mi hermano.

—Es Harry.

—Esperaba que dijeras que estabas leyendo nuestras conversaciones antiguas, hay algunas muy divertidas —bromeó.

El día en la escuela pasó rápido y cuando tocó el timbre para salir en la última hora, salí rápidamente y ya afuera de la escuela, encendí mi teléfono para revisar mis mensajes, mejor dicho, para ver cómo le había ido a Harry en el hospital.

Tenía tantas ganas de saber como le había ido que golpeaba levemente la pantalla para que se encendiera más rápido.

Ya encendido, sonreí al ver una notificación en mis mensajes.

Harry.
3:20.p.m. Ya salí, ya estoy en la lista de espera y si alguien es compatible a mi me avisarán, aún no estoy seguro si es la decisión correcta. Me encantaría verte hoy, voy que estar en el muelle esperándote a los 4:30 pm.

Puse de nuevo mi celular en el bolsillo de mi pantalón y caminé hacia el muelle para encontrarme con Harry.

Al llegar al muelle, él ya estaba allí, y como siempre estaba sentado con los pies en el agua viendo el movimiento de las olas y el cielo, o por lo menos eso es lo que suelo mirar yo cuando me encuentro en esa posición.

Lo sorprendi por atrás con un beso corto en su frente.

Como siempre se veía increíblemente guapo, sentía que podría pasar toda mi vida mirando su rostro y no me cansaría, ni siquiera un poco.

Me senté a su lado y como ya lo conocía lo suficiente esperé a que hablara.

—Hace dos minutos no estaba seguro, pero ahora te miró y... —pasó una mano por mi cabello —lo haré, voy a luchar por salir adelante, por ti —suspiró —por nosotros —una sonrisa tímida salió de sus labios.

Nos quedamos un rato charlando entre risas, besos y sonrisas.

Aún me costaba explicar como me sentía cuando estaba a su lado, pero tenía sentido, ya que no habían palabras que describieran mis sentimientos por Harry.