If They Knew.

Why Should I Stay?

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Algo sujetó fuertemente su mano en el último segundo.

Ella quedó confundida y lentamente giró su cabeza hacía atrás solo para ver a su hermano.

Ambos quedaron en silencio mirándose, Billie con un rostro desconcertado y él con una expresión desesperada.

— ¿Qué...? ¡¿Estás haciendo?!— Gritó en voz baja el mayor sorprendido por las acciones de su hermana.

— ¿De verdad esperas qué te responda?— Dijo de la forma más tranquila posible.

Él volvió a quedar en silencio.

— Déjame ir...— Habló nuevamente ella.

Él bajo la mirada sin soltar a la chica.— No puedo creer qué aún quieres ésto... Creí que habías madurado. Eres un símbolo, tienes una responsabilidad muy grand...—

— A la mierda todo eso, ésto no es solo sobre ello... Odio ésto, odio todo lo que soy, no puedo estar cómoda, no puedo ser feliz, todos quieren algo de mí y solo se dejan llevar de lo primero que ven en mí. Yo nunca quise ésto.—

Tiró fuertemente de su brazo para soltarse de su hermano pero fue inútil.

— Sí te vas... No tendría sentido qué yo me quedé.— Él la trajo bruscamente hacía sí para sacarla de la peligrosa sitúacion, el golpe los llevó al suelo dónde se abrazaron y la chica lloraba amargamente.

Ésto se repetía, no estaba acostumbrado a ver a su hermana destrozada, desde qué había crecido y poco a poco formando su reputación, ella había sido fuerte, pero nuevamente volvía a ser esa niña rara y sus tics nerviosos.

Frágil y vulnerable.

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Habían cientos y cientos de personas en el lugar, el ruido de sus gritos juntos retumbaba la ciudad, todos esperando ansiosamente a la chica prodigio del alternativo.

Sí tan solo supieran qué ella estaba en su camerino con pocas intenciones de salir, sus padres quedaron horrorizados cuando supieron sobre el intento de Billie de suicidarse, habían sugerido aplazar el concierto, pero ella se opuso, no podía decepcionar a sus fans, mucho menos ahora qué su imagen estaba siendo destruida.

Miraba su rostro en el espejo bordeado con bombillos qué iluminaban sus perfectas facciones, su rostro estába más decaído que de costumbre, ni siquiera el maquillaje qué usaba lo disimulaba, todos notarían qué algo malo sucedía.

No pudo más y empezó a llorar en silencio, veía como sus lágrimas esparcían su pestañina negra hasta sus mejillas, intentaba limpiarlas pero solo hacía más grande el desastre.

Su celular sonó y al verlo, en él habían personas comentando acerca de lo decepcionados qué estaban sobre el concierto, diciendo todo tipo de exageraciones y blasfemias hacía Billie.

Muchos empezaron a irse del sitio, los encargados de producción estaban desesperados y exigían a la familia Eilish traer inmediatamente a la chica o ésto habrá sido dinero desperdiciado.

— ¡Sí no sale ahora mismo, me encargaré de qué jamás vuelvan a contratarnos para el monte de sus presentaciones! ¡Ésto irá directamente a la disquera!—