HOSTILITY(Traducido al español)

Hostility - Capítulo 4 (Parte 2)

Chanyeol miró a Junmyeon, jugando con el anillo que tenía en su mano, y le murmuró
- Puedes cerrar la puerta.

Los ojos de Junmyeon parecieron enceguecer por un momento, se puso de pie, dejando que la mayoría de invitados se marchara, les dijo que quienes se quisieran quedar podrían esperar en la habitación de al lado. El asistente de Huang Zitao no tenía mucho conocimiento de la situación, por lo que siguió hablando entre dientes, pero se calló cuando Junmyeon le lanzó una fría mirada.

Sobre las cosas que iban a suceder, Junmyeon lo sabía más que nadie. Ser capaz de convertirse en productor de MON en menos de cinco años, tenía que ver con sus habilidades, pero también en que aparte de hacer guiones y elegir a los protagonistas, se había convertido en la marioneta de este grupo de jóvenes.

Al comienzo, Junmyeon sentía que sus acciones eran una vergüenza, pero a medida que pasó el tiempo, aceptó gradualmente el rol de ser una “proxeneta”. Después de todo, tenía que entrar en ese círculo ya que no tenía ningún recurso de altas conexiones o aumentos de fondo. Para ganar contra los productores de oro que le bloqueaban el camino, debía ponerse a sí mismo en este juego.

La iluminación de la habitación se tornó oscura repentinamente y un telón cayó desde arriba. Las ‘acompañantes’ de la habitación comenzaron a quitarse sus ropas y tirarlas al suelo. Xiao Zi miró a Huag Zitao quien estaba tendido en el suelo y luego a Wu Fan quien le miraba, sintiéndose particularmente incómoda, cubrió su boca con una mano, incapaz de articular palabra.

- Ya he visto lo que de ver. Quítate la ropa – Wu Fan se inclinó en el sofá, un grupo de chicas bastante hermosas se habían despojado de toda su ropa para posteriormente correr al telón detrás del improvisado escenario, dejando sola una incómoda Xiao zi.

- Pero… pero, hice esto antes, cuando éramos “novios”, ¿no puedes dejarme ir por hoy? – Xiao Zi temblaba.

Si hubiera sabido antes que “Romantic double star” estaba financiado por inversores de Yuang Dong, no habría aceptado el papel. Anteriormente, cuando Xiao zi entró a ese mundo, estaba llena de anhelos. Aunque no era muy famosa, le agradaba a una gran cantidad de empresarios, que siempre le hacían promesas de un futuro como estrella internacional. La Xiao zi de aquel entonces era algo ingenua, pensando que todos los hijos de los grandes jefes que conducían BMWs eran príncipes y que todos los chicos guapos que fumaban eran buenos hombres en los que podría confiar. Cuando conoció a Wufan y este no solo invirtió en sus películas, sino que le compró la última temporada de Chanel, ella sintió que era suficiente, ¿por qué más habría que luchar?

Pero este sueño solo duró unos cuantos meses, cuando Xiao zi se dio cuenta de que ella era simplemente una de sus varias amigas. Lo que él le daba, se lo daba a otras también. Además, si le sirves bien, te dará mejores cosas. En ese momento, Xiao zi creía estar en una relación con Wu Fan, pero después de una gran pelea, Wu Fan terminó con ella diciéndole fríamente “¿Quién dijo que tú eras mi novia?”

Xiao zi no era el tipo que se apegaba a las personas, ya que él era despiado, y además, si continuaba aferrándose a él, sólo le demostraría cuan barata era. Arrojándole las joyas que le había dado en la cara, Xiao zi también rompió con él.

A pesar de que las cosas estaban relativamente bien por esos tiempos, Xiao zi se aterrorizó cuando se dio cuenta de que las empresas no la contrataban para actuar, ni siquiera podía encontrar una agencia con la que tener un contrato estable. Había tratado de contactar con la empresa que la había llevado a la fama pero le dijeron “¿Has… ofendido al jefe Wu?” en ese momento se dio cuenta de que su situación no era la más favorable.

Aunque desde hace mucho tiempo, ya fuera haciendo películas o no, Xiao zi siempre había sido nombrada “Reina” por sus fans. Pero en el mundo del espectáculo, donde cada respiración estaba siendo controlada, ella sólo era una marioneta que se movía de acuerdo a los deseos de otros. Sin embargo, esa marioneta aún brillaba como un diamante incorporado en la superficie de “Chanel”. Es muy difícil dejar este mundo, si se quiere seguir disfrutando, hay que pagar el precio.