No quiero ser la princesa

Una noche de pasión

Narra Ryan

Loreine -ella seguía dejando besos por mi cuello descendiendo hasta mi torso- estas segura de esto? -la detengo no quiero llevarme otra desilusión con que me quieran o sólo me usen para un fin-

Si lo que te tiene en duda es que si estoy segura de esto si lo estoy -sonríe de lado mirándome y baja su mano hasta mi pecho- ahora si estás pensando si te quiero o no, pues no puedo decir que te quiero, pero si quiero que pase esto -se acerca a mi rostro aún risueña por los efectos del alcohol- además te voy a admitir que a pesar de tu actitud y carácter, y tu trato conmigo, eres muy jodidamente ardiente

Pero... -me beso callando lo que quería reprocharle-

Me deje llevar la traje más hacia a mi, ella se quejó y yo me detuve

Loreine no quiero lastimarte -puse mi mano en su mejilla ella sonrió, ella me miro y volvió a besarme, la tome entre brazos y la puse debajo mío- no quiero que lo hagas si en verdad  no estas lista

Nunca sabré si estoy lista -me miro triste- si no lo intento

Loreine, si te hago daño en algún momento quiero que me lo digas -ella solo asintió con una sonrisa tímida, empecé a dejar besos húmedos en todo su cuello bajando de poco en poco hasta sus senos, la miré pidiendo permiso para continuar, ella me miro con la respiración acelerada y asintió con la cabeza al mismo tiempo que tiraba su cabeza hacia atrás, entonces quite los botones de su camisón para abrirme paso a mi cometido llevando uno de sus pechos a mi boca succionando acunando el otro en mi mano, su respiración se aceleraba más, la presión en mi pantalón aumentaba al escucharla, al sentir como se estremecia y se removia inquieta, intercambie la posición el pecho que estaba en mi mano ahora estaba en mi boca, el otro era acunado con mi otra mano, me detuve a observar un instante, era una escena muy erótica, ella estaba totalmente indefensa ante mi, al percatarse de que pare, se apoyó en sus codos y me miró con la respiración aún acelerada

Que miras tanto? -le sonrió y me acerco hacia ella-

A ti -ella se sonroja ligeramente- tu respiración acelerada, la forma en que arqueas tu cuerpo por el roce de mi lengua, tus pechos, tu cuello tan dispuesto a mis caricias, parece demasiado irreal, así que estoy esperando que me des una bofetada.

Tonto -sonríe de lado, toma mi rostro te da un beso tan dulce, tan lento-

No es lo que esperaba, pero estoy satisfecho -sonrió viéndola- tal vez pueda enamorarme de ti -vuelvo a besarla, bajo mi mano hasta sus piernas fáciles de descubrir gracias al camisón que trae- última oportunidad para arrepentirte

Ella niega, entonces subo el camisón hasta más arriba de sus caderas, queda ante mi su entre pierna cubierta de bello, dejó besos por su cadera se estremece, la miro y parece contener la respiración tiene miedo, sonrió y sigo dejando besos por toda la área de sus caderas cintura y estómago, abro sus piernas con calma, las pongo encima de mis hombros, empiezo a dejar un sendero de besos al interior de sus muslos empezando desde su rodilla hasta casi llegar a su centro, la oigo jadear, el olor de su feminidad me embriaga, esta mojada está tan mojada que al acercar mis labios a su área ya están empapados, se le escapa un suspiro, entonces dejo besos en esta área tan exquisita que rodea su clítoris bajo y subo mi lengua con calma por toda su abertura, ella gime quiero oírla gritar de placer, entonces aceleró las lamidas, empieza a moverse, también gime más fuerte sigo en mi ataque, entonces meto con cuidado dos dedos en su abertura, los cuales resbalan sin mayor esfuerzo y meto un tercero y ella sigue retorciendose, aceleró los movimientos de mi lengua así como los de mi mano, entonces enmedio de un grito llega al climax, terminó con los dedos empapados al igual que parte de mi rostro, ella jadea su respiración se calma poco a poco.