Capitulo 2 (¿el misterioso rubio de ojos verdes?)...

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Mari decidió caminar hasta aquel misterioso muchacho, y al estar tan solo 10 pasos de el..ella pudo verlo mejor, era un chico de ojos verdes, cabello rubio y piel blanca. Que portaba una sudadera de color negra con una huella en forma de gato color verde, unos yins color gris y unos zapatos del mismo color

Ella quería acercarse mas al muchacho, pero antes de que pudiera dar un paso hacia adelante...Escucho su nombre, y rápidamente se voltio, para ver quien la había llamado, y se llevo una agradable sorpresa

Era una hermosa niña  de ojos color marrón, cabello castaño y piel morena. Mari río y corrió hacia ella - ¡Manon! - grito la azabache mientras corría para abrazar a la pequeña - ¡Marinette! - dijo la niña alegremente  mientras veía como Marinette corría - Manon, cuanto tiempo sin verte, mira como has crecido!! - afirmo la azabache dulcemente mientras que en sus labios desfilaba una enorme sonrisa - lo se Marinette, jamas te olvide, fuiste una grandiosa niñera para mi - dijo la hermosa niña mientras la miraba con una bella sonrisa - y ¿Que haces por aquí sola Manon?, ¿donde esta tu mama? - pregunto la de ojos azules con un semblante preocupado - No te preocupes Marinette, mi mama esta trabajando, y de hecho su trabajo esta aquí cerca, y me dio permiso de venir a dar un pequeño paseo - hablo la niña con un semblante despreocupado, tranquilizando a la mayor que se encontraba frente a ella - ok, eso esta muy bien Manon - dijo la azabache con la anterior sonrisa que antes permanecía en sus labios

De pronto la azabache se voltio, para ver si el muchacho rubio de ojos verdes. Aun se encontraba a unos 50 metros de distancia, alejado de ellas 2 - ¿Te ocurre algo Marinette?  - pregunto la niña de ojos marrón mientras veía extrañada a la de ojos azules - q-que me ocurre?, nada Manon - respondió la de coletas voltiandose de nuevo frente a la niña - ok pero..es que me pareció que estabas buscando a alguien - dijo la pequeña mientras miraba a la azabache con ojos interrogantes - No, como crees Manon!, yo buscando a alguien. Para nada - negó la azabache nerviosa mente - bueno, te creo - dijo la niña entre pequeñas risitas - bueno Manon fue un gusto verte, pero ya me tengo que ir - hablo Marinette dulcemente - ok Marinette, también fue un placer verte - y después Manon la abrazo, y la azabache correspondió ese gesto - Adiós Manon - dijo la azabache separándose del abrazo - Nos vemos Marinette -  se despidió la niña

Y así cada una, tomo diferentes caminos, para regresar a casa, Marinette durante todo el camino de vuelta casa, iba pensando, en aquel misterioso chico rubio de ojos verdes, y en la forma tan extraña que desapareció, sin dejar rastro como si se tratase de un fantasma

Ella realmente le llamo la atención, aquel chico rubio de ojos verdes, y sin darse cuenta llego a las puertas de la universidad, y al llegar al 2 piso que le correspondía donde se encontraba su habitación, ella camino hasta el final del pasillo, y con la ayuda de su llave abrió la puerta...

Mari tenia la mirada perdida en sus mas recientes pensamientos, y al levantar su rostro,  la expresión tranquila y en paz que llevaba en su cara se convirtió en una mirada de asombro y estupefacción. No podía creer lo que sus ojos estaban presenciando

Su amiga Alya estaba con un chico, pero no solo estaba con uno, sino que ambos estaban en una posición no muy decente. El chico estaba sobre  Alya, lo que reflejaba que ambos estaban en una posición muy comprometedora                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                  Y lo que Mari asumió fue que antes de actuar debía hablar con su mejor amiga - Alya, por favor me puedes explicar ¿Que hacia este chico encima de vos? - pregunto con un tono bajo de voz, y estando un tanto incomoda y nerviosa -¿Que acaso no lo sabes hermosa? - dijo el chico sensualmente, recibiendo por salio un puñetazo de la morena - ¡Cállate Nino! - expreso furiosa la morena - Preciosa, tu me puedes dar todos los golpes que desees!! - exclamo el moreno coqueta mente                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                             provocando que la morena se sonrojara e enfureciera a la vez, y recibiendo por castigo, una cachetada de la castaña - dije que te callaras idiota!! - le grito Alya furiosa, haciendo unos ademanes con sus manos apuntándole a la puerta para que se fuera - o-ok nena, p-pero tranquilízate - y acto seguido le lanzo un besito al aire de despedida a la castaña y se apresuro a salir por la puerta

La playa del destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora