Yo estaba dormido en mi habitación, nuestra casa era enorme ya que mamá era una persona de dinero, no tanto como papá.
Mi madre estaba dando vueltas por toda la sala esperando a que mi padre llegase, eran las tres y media de la madrugada cuando de pronto escuché gritos, por lo que me desvelé y fui corriendo a ver qué ocurría.“¡A buenas horas apareces!” gritó mi madre muy enfadada con mi padre.
“Leia, perdona, es que... he tenido una discusión con Luke y se me ha hecho tarde” confesó él.
“¡Una discusión de que nunca estás en casa ¿no?!”. Mamá ya sabía del tema en el que habían hablado.
“¡Oye, que tú tampoco estás nunca en casa, siempre dejas al niño solo!”. Al parecer mi padre se empezó a cabrear.
“¿Yo? ¿Tú no? ¿Tú eres un santo? Ambos le hemos dejado solo alguna vez, ¡pero lo tuyo es de campeonato, sales a saber dónde a las siete de la mañana y llegas cada día más tarde!”. Entendía su enfado la verdad, era lógico, yo casi no veía a mi padre y eso decía mucho de su persona.
“¿¡Te crees que son modales que me hables así cuando yo soy el que más tareas tengo!?”, mintió, porque que yo sepa no hacía nada por nosotros.
“¿Y qué quieres que haga? ¡Si no hablo así no escuchas!”, y qué razón tenía.
“¡Claro que te escucho, pero si quieres que te escuche tienes que hablar!”.
Esto último les chocó a ambos, fue ahí donde mamá mirando para abajo sin levantar la cabeza señaló la puerta.“A la calle”.
“¿Qué?...”.
“¡Que pido el divorcio! ¡Ya no te aguanto más Solo!”. Estaba cansada y se le notaba.
Papá, anonadado, se señaló a sí mismo subiendo la ceja derecha con cara de sorpresa.“¿¡A mí!?”.
“¿Quién más se apellida Solo?”.
“Tu hijo, Ben Solo”, acentuó mi apellido.
“A la calle, no me lo hagas más difícil. Lárgate y no vuelvas a pasar por aquí sin previo aviso, tus piropos ya no me alagan”. Volvió a señalar la puerta, algo que a papá le enfureció.
“Muy agradable por tu parte echarme de casa sin dinero al borde de mi cumpleaños, de veras, es muy buen gesto de su parte princesa”.
Eso fue lo último que dijo, ya que mamá tenía la cabeza girada para no verle y ese gesto de cobardía le enfadó más aún, tanto que salió de casa dando un gran portazo.“Por qué me enamoré de ti, por qué de ti...” se repetía mamá en la cabeza.
Al verla llorando, bajé las escaleras para abrazarla, algo que la tranquilizó y tras ello me llevó a la cama con una sonrisa.“Este en su galaxia, ya ves Ben, no se acordaba de que cumplías años días antes que él”. Eso fue triste, sí...
“Buenas noches mamá”, dije mientras bostezaba y me acurrucaba en la cama, algo que le provocó una sonrisa.
“Buenas noches mi vida, duerme bien”. Tras un beso en la frente, apagó las luces y cerró la puerta.
Si digo la verdad... yo esa noche no me pude quitar de la cabeza la imagen de mi padre junto a mí enseñándome a andar.
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"Yo te protejo" - Los Solo
FanfictionBen Solo narra la historia de él junto a su padre tras el divorcio de sus progenitores. Por mucho que le odiase, nunca pudo desmentir que su padre estaba ahí tanto para lo bueno como para lo malo, aunque sobretodo para lo malo.