de verdad,⁵

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AU


Bucci.
prosci! recibiste el mensaje de doppio?

Pros

claramente?? se ve importante

Bucci.
lo es!!!! nos vemos allá :p

"¡Pesci!"

El chico de cabellos verdes se apresura en llegar ante su llamado, entrando a su oficina con un alegre "¿Me llamó, jefe?"

"No es muy urgente, tranquilo... Quiero que organices mi reunión con el resto de los editores para la próxima semana," le indica mientras se desplaza para alcanzar su chaqueta. "Y te llamo mañana, tengo que reunirme con Bruno y Doppio y seguramente es para un evento que no sé si interrumpirá las actividades programadas..."

"¡Por supuesto!"

"¡Perfecto! Ten un buen fin de semana, querido".

"¡Que tenga un buen día!" alcanza a escuchar mientras sale de su oficina y cierra la puerta.

Mientras baja, es saludado por todos los trabajadores de la revista y Prosciutto trata de devolver el gesto a la mayoría. Es difícil tener a tanta gente a la siga, pero sugiere que es por su gran desempeño como editor en jefe y futuro CEO. No quiere ser demasiado intimidante, pero tampoco un hombre flexible y que se muestre débil.

Llega al estacionamiento y sube a su auto, viendo en su reloj que no necesita apresurarse; llegaría a la hora de todas maneras. Por lo tanto, cuando llega al lugar de la reunión -una de las cafeterías favoritas de Doppio, dónde el bendito latte es exquisito para su paladar-, sonríe con autosuficiencia al notar que es el primero en llegar.

Instalado en el área abierta para fumadores, Prosciutto fuma de su cigarrillo con su latte humeante. Agita su mano cuando ve a sus dos amigos a la distancia. Doppio se ve emocionado, pidiéndole a Bruno que se adelante, ya que él pedirá las bebidas.

"Se te pudrirán los pulmones", le dice el moreno, sonrisa amistosa y en forma de saludo. Le lanza el humo a la cara, riéndose apenas por el disgusto en su expresión. "Muy gracioso..."

"Lo es," dice sin mayor importancia. "¿Te dijo algo? Me pone nervioso verlo tan... saltarín".

"Nada amigo, aunque no debe ser algo raro, espero".

Y estando los tres, Prosciutto ve lo radiante que se muestra el pelirrosa.

Rápidamente se ponen al día; Bruno contando sus planes de ir a Florida junto a Narancia -un jovencito encantador, no podía esperarse menos del primogénito de su amigo- una vez Abbacchio salga con vacaciones, él mismo hablando de la próxima edición de la revista, escuchando atento algunas sugerencias de sus amigos con respecto a sus decisiones.

"¿Y qué tal tú, Pio?" le pregunta Bruno, tomando un sorbo de su Americano helado.

Doppio se sonroja de pronto, viéndose tímido y llamando la atención de ambos amigos. "Bueno... ya saben que después de que Diavolo se casara con Donatella, Padre nos puso condiciones ¿no?"

Ah, cómo olvidarlo, piensa Prosciutto.

En retroperspectiva, los tres eran algo similar a figuras importantes. Bruno Bucciarati era hijo de un importante dueño de barcos pesqueros y centros turísticos en las costas nacionales, haciéndose paso en la industria de la moda ganando más millones que cualquier otro diseñador en el mundo. Finalmente, se asentó en Nápoles junto a Leone Abbacchio, un reconocido productor de cine con el que adoptó a Narancia Abbacchio y son vistos la mayoría de las veces en eventos de caridad y beneficencia de parte del adolescente que tienen de hijo. Viven una vida modesta en los suburbios italianos, pero son felices y Prosciutto no puede estar más de acuerdo.

it can't be worse 🍾 risoproDonde viven las historias. Descúbrelo ahora