Amor Entre Cuatro

Traición.

El amar es extraño.

La noche llegaba, y con ella, el ruido del dia empezaba a apagarse mientras los insectos empezaban a crear las melodías que inundaban el ambiente.

Cuatro chicos, felices, tranquilos, y con mantas cubriendo su cuerpo, se encontraban en un enorme futon. Compartiendo un momento tan ameno y normal como lo era ver una película en la laptop del bicolor. Tres acostados y uno sentado,casi uno encima del otro.

Se volvió aún más ameno cuando las risas empezaron, acompañando la sinfonía de los grillos. Las cosquillas iban y venían al igual que gritos de auxilio el cual nunca llegó.

Todo estaba bien, se sentía correcto, tan pero tan malditamente correcto que no pudo evitar soltar esas palabras cuando la pequeña guerra acabó con todos ellos respirando irregularmente y aún soltando pequeñas risitas.

-los amo,chicos.

Los rubíes, un par más oscuro que el otro, lo miraron, sin perder detalle en la enorme sonrisa que les regalaba, mientras el gris y celeste se mantenían ocultos bajo los párpados, pero aún así mostrando unas pequeñas arrugas por la sonrisa que tenía.

Todo es perfecto en este momento. Izuku se puede permitir pensar y sentir que todo está bien ahora, por lo que se acuesta junto a sus razones para vivir y deja que el montón de brazos busque donde acomodarse sobre su cuerpo.

Esta feliz, muy feliz.

Sabe que ellos también lo aman, que se aman, y entonces cae en cuenta de que su corazón empieza a doler un poco. Importando le poco solo deja que el calor ajeno opaque  al frío en su interior hasta caer profundamente dormido.

🌑

Todo es un desastre.

Escombros por aquí y por allá. Polvo nublando su vista, y gritos de guerra no muy lejos de donde se encuentra.

Corre hacia allí, esperando calmar el pánico que lo inunda. Un sujeto lo intercepta, y está tan desorientado que no alcanza a activar su quirk a tiempo, por lo que ahora siente un dolor punzante en su abdomen. Devuelve el golpe y empieza a luchar con aquel hombre que al parecer carecia de quirk pero aún así se defiende muy bien de los golpes y ataques que manda, hasta que un bloque de hielo lo golpea y deja congelado en uno de los muros que se mantuvo completo luego del abrupto ataque de la liga.

Mira a su defensor, a su novio, el cual mantenía a duras penas la mitad de su uniforme intacto, y corre hacia él para darle un inevitable abrazo.

- ¿estas bien?

-Si.

Con eso basta por ahora. Están en medio de una zona en colisión así que se ponen en marcha, peleando juntos y moviendose entre los pasillos, ayudando a compañeros heridos y estando atentos a cualquier amenaza.

Llegan con su sensei y demás compañeros de clase. Katsuki se les acerca e inspecciona rápidamente para asegurarse de que sus idiotas novios estén bien. No pueden negar haber hecho lo mismo con él.

Pero aún hay una gran interrogante en todo este torbellino, una preocupación enorme y un muy mal presentimiento.

- Eraserhead, un gusto verte de nuevo.

La voz atrajo la vista de todos. Shigaraki Tomura se encontraba en una placa flotante de metal en medio de todo el caos ocasionado por él. Acompañándolo, un pelinegro miraba divertido todo el desastre ocasionado, y a su lado otro villano, uno desconocido para todos ellos, llevando un elegante traje negro con toques de un oscuro verde y una máscara que cubría su rostro, su cabello era oscuro pero con un tono... verdoso.

-Shigaraki - las palabras fueron escupidas por el Héroe.

- Es un gusto verlos a todos, tan asustados y preocupados por sus amigos, sucios y cansados de luchar. ¿Les gustó mi sorpresa? - la sorna en su voz asqueaba a más de uno.

-Ya maldito! Ven y pelea como el líder que dices ser, no dejes que tus lacayos hagan el trabajo sucio ¿o que? ¿Te da miedo, bastardo? - pequeñas explosiones salían de sus manos. Estaba furioso y esperaba enfurecer también al villano.

Más una risa y una carcajada fue lo que resivio, descolocando a todos los presentes.

- No soy el líder de la liga.... Jamas me podría comparar con él, alguien tan poderoso e inteligente como para engañarlos - soltó en tono burlon - tan grande como para engañar al mismísimo All Might... No, ese no soy yo - miro a su lado extendiendo su mano hacia el villano desconocido.

Una risa espeluznante retumbó en los oídos de todos, mientras el villano se acercaba a Tomura y quitaba su máscara dejando al descubierto el rostro de aquel al que llamaron amigo y confidente, de aquel que consideraban fiel.

-Gracias por la presentación, Tamu-chan.
De todas las reacciones que imagine que tendrian, esta - extendio sus brazos - es la mejor - mostró una enorme sonrisa, que en vez de parecer tierna, hacía que cada uno de ellos sintiera escalofríos.

Tres corazones, en especial, se detuvieron un momento cuando reconocieron los ojos esmeralda de Midoriya. Y se sintieron terriblemente rotos, traicionados.

- No me mire así, Sensei ~

El héroe intentó moverse, hablar, gritar por su alumno, pero no podía, estaba estático, congelado, solo mirando al que hace unas horas era su estudiante.

- De ahora en adelante, las cosas cambiaran - ensancho aún más su sonrisa mientras un portal aparecía tras de ellos. Miró a cada uno de sus ex compañeros, deleitando se de las miradas de horror y tristeza que mostraban. Hasta que se detuvo en los tres que se encontraban delante de todos, sus miradas estaban cristalizadas, con dolor, traición y confusión en ellas. Eso no le gustó.

-¡¿ENTONCES TODO FUE UNA MENTIRA?! - grito con voz rota el cenizo.

-Si.

Ya no se hallaban los dos villanos, solo el peliverde. Una explosión sonó cerca de donde estaban ellos y todos dirigieron su mirada hacia allí, excepto los tres chicos que miraban como su pequeño novio se acercaba al portal. El corazón retumbando en sus pechos y las lágrimas amenazando con salir.

Izuku les dirigió una mirada - anoche no mentía - resonó en sus mentes, y el peliverde desapareció de sus vistas.

Kirishima cayó de rodillas al suelo mientras las lágrimas surcaban su rostro, Shoto se le acercó y lo abrazó, también arrodillado en el suelo. Katsuki se quedó viendo el lugar por el que se había ido uno de los amores de su vida y parte de su corazón.