El Viaje YouTube

CAPÍTULO 37:

Hoy tocaba show.

Los días que no tocaba, teníamos dos opciones, grabar cosas en una habitación con ordenadores que nos habían proporcionado para grabar, o hacer quedadas.

El show probablemente durara todo el día.

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Decidí levantarme temprano, a las 6.

Si, es demasiado raro, pero quería recorrer las calles un poco. Necesito otra de mis caminatas pensativas...

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Despues de desayunar, salí a la calle.

Hacía un poquito de frío, un poquito ya que estamos en verano. Uno de esos fríos de la mañana(?, tampoco era para abrigarse, me puse una simple camperita de estas normales(? wtf no se ni que digo hoy xD) y salí.

Comencé a caminar sin destino, tratando de recordar algun lugar que quisiera volver a ver... Entonces vino a mi cabeza.

No me acuerdo demasiado de los buses, las calles, las paradas y esas cosas, pero mas o menos, creo que puedo ir a ese teatro.

Recordé que estaba cerca de la casa de Mirta, así que fui para ahí, y me las arreglé para llegar.

Era un teatro antiguo, de esos con las butacas con cubierta de terciopelo, pero era pequeño.

Estaba algo descuidado, pero tampoco se caía a pedazos.

Yo solía tocar el piano, antes de... mi padre.... eso. Pero lo tuve que dejar...

Equí toqué mis piezas de piano desde que tengo unos... 6 años? No recuerdo bien.

Tomé el valor, y lentamente abrí una de las puertas de entrada, las que dan a la calle. Hum, que raro que esté abierto.

Caminé lentamente por el pasillo, estaba todo obscuro, de la nada, veo una luz, una linterna creo, y me agacho, para que nadie me vea.

Continúo camiando agachada, y veo que la linterna se apaga. Me quedo quieta en mi lugar. No escucho nada

Entonces algo me atropella, y nos caemos al suelo.

-QUE MIERDA???- grita una voz de hombre alumbrandome la cara.

-Perdón, soy _____- digo pidiendole disculpas algo desesperada.

-______?- me pregunta

-Si, porque?- le digo. Me ayuda a levantarme y se ilumina la cara.

-Joaquín!!!- grito abrazandolo.

-Como estas??- me pregunta- No, que haces acá???-dice

-Volví por trabajo- le contesto sonriendo.

Joaquín era el hijo del dueño del teatro. El se encargaba de la iluminación y de todas esas cosas.

Tiene mi misma edad, creo que unos meses mas. Pero, parece mayor, y es muy alto. Tiene el cabello marrón obscuro, corto con rulitos.

-Y vos??- le pregunto.

-Y nada, estoy acá- dice- Queres ver el teatro?- me pregunta.

-Porfavor- digo comenzando a caminar.

Subimos a la planta de arriba, yo me senté en uno de las primeras butacas contra el escenario (pero en la parte de arriba) y él fue a la sala esa de control a encender las luces, y pude contemplar todo el teatro, pero en especial el piano en el escenario.

Era un piano viejo, como el teatro. De cola larga y de madera. Era un piano especial para mí.

-Que lindo- dije admirando cada esquina en cuanto Joaquín volvió a mi lado.