El peor error

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Era un día como cualquier otro con la simpleza de un viernes por la mañana, no sería como los demás viernes por mucho, yo ya tenía planes para el día con mi novia era algo que llevábamos planeando desde hacía tiempo pero por azares del destino no se podría concretar. Hoy me daría la prueba de amor, para ello decidimos saltarnos las clases e ir a mi casa en la segunda clase que es cuando mamá se va al trabajo y no volvería si no hasta  5 de la tarde.

Me desperté apenas y los primero rayos de luz me dieron en la cara, me levanté, tome mi toalla y entre al baño para bañarme, me mire al espejo, no soy un tipo muy guapo pero tampoco feo, de igual manera, no soy alto ni muy bajo mido 1.75 tampoco soy delgado ni gordo sobrepasó un poco el peso ideal, trabajo en llegar a mi peso ideal y después trabajaré en el abdomen. Entre a la regadera y me duche, al salir veo que no tengo ropa interior limpia así que voy al cuarto de mi madre a buscar si hay algo de mi padre aunque lo dudo, después de que papá muriera mi madre guardo todas sus cosas en cajas y las almaceno en el sótano. Entro y comienzo a buscar en los cajones, para mí mala suerte no hay nada de mi padre, pienso en ir a revisar las cajas al sótano pero recuerdo el regaño que me dió la última vez que saque algo de ahí así que no lo haré, de cualquier forma ella selló las cajas y se dará cuenta. Cómo último recurso busco algo de mi madre, algo que no se vea muy femenino y que se asemeje a la ropa interior masculina, mi mirada se enfoca en unas pantys rosas de seda y pienso
-si lo voy a hacer hay que hacerlo bien.

Pero recuerdo que hoy es el gran día en el que perderé la virginidad y lo haré con Helen, mi hermosa novia a la cual le entrego toda mi atención y amor.

Decidido tomo unas pantys negras, me las pruebo y me observo en el espejo de mi madre.
-tengo buen culo- Digo bromeando
No es lo que esperaba pero no se ve tan femenino y creo que Helen no se dará cuenta.
Prosigo a terminar de vestirme y bajo a desayunar, mi madre en la cocina me dice que ponga la mesa y así lo hago pero por una estúpida alacena abierta me golpeó la cabeza y cae de mis mano un plato de cerámica todo paso como en cámara lenta yo solo pude ver cómo caía lentamente hasta tocar el suelo y romperse.
-Maldita alacena, ¡¡mamá cierra los cajones y alacenas por favor!!- Le dije un poco molesto, acepto que me pase un poco pero tampoco le grite.
-!!No me hables de esa manera, si me vuelves a levantar la voz así te aseguro que te arrepentiras!!
Eso sonó como amenaza de muerte pero no le tomo importancia después de todo no cumple con las amenazas, así es ella desde la muerte de mi padre hace 2 años. Entiendo su dolor después de todo el era mi padre también me sentí triste pero el hubiera querido que siguieramos con nuestras vidas y así lo he hecho, ella en cambio se refugia en el alcohol y se creo un escudo desde que guardo las cosas de mi padre según ella si no las ve no se siente mal pero cada noche que llega ebria, baja al sótano y abre las cajas.
Después de limpiar me fui a la parada del autobús, no quise discutir y me fui sin desayunar, ya en la escuela comería algo, no podría aguantar como toro con Helen sin antes algo en el estómago.

Al llegar a la escuela veo Helen en el patio charlando con sus amigas, ella se despide y de dirige hacía mi.

-Hola princesa- Dije mientras la abrazaba
-Hola rey, listo para esto?- me preguntó
Recordé lo de la ropa interior y me preocupe demasiado que no pude dar respuesta.
-Estás bien?- volvió a cuestionar Helen
-si~si solo que... Bueno mejor lo digo después, no es nada malo solo necesitas saberlo antes de todo. Excuse.
-bien nos vemos en 2 horas, te amo- me dijo para después darse la vuelta y dirigirse a su salón.

A las 2 horas salí yo de mi salón y fui al salón de Helen para buscarla e irnos a mi casa, nos dirigimos a la salida y para salir no hubo problema las puertas siempre están abiertas, hay guardias que para entrar revisan tu credencial para que no entre nadie que no sea de la escuela pero puedes entrar y salir cuando quieras ya que los horarios son muy variados desde las 7 AM a 8 PM con 2 turnos que es el horario que trabaja la escuela.

Nos dirigimos a mi casa en el auto de Helen y lo estacionamos dónde iría el auto de papá.
Al entrar a casa estoy seguro que no está mamá ya que si auto tampoco está, fuimos a mi cuarto, Helen se sienta en mi cama y yo frente a ella le digo -tenemos que hablar
Ella me mira confundida
-no es lo que piensas, es algo estúpido pero te lo digo antes para que que pienses mal
-bien, dime
-traigo ropa interior de mi madre- le digo apenado y bajo la mirada
-Que- me dijo mientras reía a carcajadas
-mira, no es lo que crees, por la mañana me bañe y no tenía que ponerme asi que busque ropa de mi padre pero no había y mi última opción fue ponerme algo de mi madre, creeme que fue lo menos femenino que encontré.
-jajajaja está bien te acepto como eres, siempre quise saber que es tener novia
-muy graciosa- dije para después lanzarme sobre ella en la cama y comenzar a besarla.
Poco a poco subió la temperatura entre nosotros y ocurrió el amor, a media corrida de toros escucho en la puerta de mi casa a mi madre diciendo mi nombre muy enojada.
Media hora después Helen se había ido y yo me quedé a recibir el castigo.
Al ver a mi madre ella me dió una cachetada
-No me importa si te revueltas y tampoco con quién lo haces pero se supone que debieras estar en la escuela!!- me dijo mi madre muy enojada
-yo~yo, realmente no tengo excusa, lo lamento estuvo mal lo que hice.-
-Tus disculpas no te evitan del castigo que te pondré, con lo de la mañana y ahora esto te irá muy mal, y pensando bien ya se que castigo te pondré, ve a mi habitación y espérame ahi.

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Hola qué tal? Espero que estén bien y hayan disfrutado de este capítulo, es la primera historia que hago así que si hago algo mal díganme para ir mejorando gracias.
También dejen en los el castigo que creen que su madre le pondra

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