Para tu deleite ❝ᴄʜᴀɴʙᴀᴇᴋ⁀➷

Química

Park Chanyeol se encontraba recostado en su cama con un gran dilema en su mente. Mientras pensaba en ello, lanzaba hacia arriba una pelotita anti-estrés, la cual inmediatamente atrapaba cuando descendía. Llevaba así un par de horas sin llegar a ninguna conclusión, y es que ¿cómo podría hacerlo si tenía muchas dudas?

Byun-ssi, Baek y Baekhyunee habían robado por completo su corazón.

Tres hermanos extremadamente diferentes, pero tan parecidos físicamente, se habían vuelto muy especiales para el atleta, tanto así que día y noche rondaban por su cabeza. Ya no iba a mentirse más, los tres le gustaban muchísimo.

Ahora la pregunta era, ¿a quién debería invitar a salir?

Byun-ssi tenía un aura tan seductora que lo atrapaba en cuanto posaba su mirada sobre él. Chanyeol podría describirlo como el perfecto amante, también era alguien que le traía madurez a su vida y quien encendía esa chispa de curiosidad por descubrir los más extraños misterios de su persona.

Por otro lado estaba Baek, el chico de personalidad refrescante y amigable. Las veces que habían conversado, este le había inspirado tanta confianza que sentía que podía hasta poner su vida en sus manos. Era alguien que Chanyeol necesitaba un su vida, pues su corazón se sentía tan aliviado y ligero cuando se encontraba a su alrededor.

Y por último, Baekhyunee, el menor de los tres mellizos, un chico tan puro e inocente a quien quería abrazar para siempre. Este muchacho hacía que Chanyeol aflorara su instinto protector, y podía jurar que era capaz de derrotar hasta a los monstruos más aterradores, si de ese modo mantenía a salvo a su lindo chico de mejillas rosadas.

¡Diablos! Esta era la decisión más complicada de su vida.

¿Qué debía hacer si con los tres tenía una química fabulosa?

Pensó, pensó y pensó durante toda la noche hasta que Morfeo le envió una idea, pues se había cansado de no verlo dormir. Chanyeol sonrió victorioso al tener al fin un plan que no podría fallar.

Solo así, el atleta se cubrió por completo con la frazada y se entregó muy contento a un sueño profundo.

🍭

A la mañana siguiente, mucho antes de que cantara el primer pajarito, Chanyeol se encontraba completamente aseado y cambiado, más que listo para salir de casa.

Tenía una importante misión por cumplir y no se regresaría a casa sin hacerlo.

Entonces, se ató muy bien las agujetas, tomó su mochila y salió en busca de la casa de los tres hermanos. No debería ser muy complicado, después de todo, Baek había dicho que vivía a dos paralelas del campo deportivo, ¿no?

Así que, muy decidido a buscar casa por casa, emprendió su recorrido.

Al principio fue emocionante tocar una puerta y esperar por quien fuere que le abriese para decirle que estaba equivocado o en lo correcto, pero luego de unas horas de recibir respuestas negativas y hasta portazos en la cara, se volvió algo cansado seguir. Había sido demasiado optimista al creer que si lo intentaba con mucho esfuerzo, conseguiría encontrarlo tarde o temprano.

Sus esperanzas se fueron en picada cuando estaba por tocar la última puerta de la cuadra y lo más probable era que obtuviera otra respuesta negativa.

—¿Hola?

Una chica de ropa blanca y cabello recogido salió a recibirlo. Era oficial, no encontraría a los hermanos ese día. Se comenzaba a preguntar la razón del engaño de Baek, ¿por qué le habría dicho que vivía por aquí cuando no era así?